Kathell

7.9K 539 32
                                    

Caminaba en la habitación de Jack de un lado a otro, había ayudado a Amanda con algunas cosas en la cocina y ya había venido hasta su habitación esperando que se encontrara y por lo visto aún estaba en el comedor, seguramente tenían mucho de que hablar, estaba feliz por él, era un nuevo paso en su vida y sabía que sus días estarían mejores si el rencor era menos.

Temía hablar aún de mi madre, no sabía cómo lo tomaría Jack, sabía que me queria y que eran sinceros sus sentimientos pero aún así tenía miedo de hablar, el tiempo se agotaba y debía ser honesta con él antes de que fuera demasiado tarde.

Mi celular sonó sacándome de mis cavilaciones era Lilian.

— ¡Por los astros! Por fin y respondes ese puto celular, te estuve llamando todo el día— exclamó mi amiga eufórica— Ya iba para la mansión.

— Calma Lili; ¿Estás bien?— inquirí curiosa— ¿Esta todo en orden?.

— No primero dime, ¿Tú estás bien?; Porque no me respondías, pedía a las fuerzas astrales por ti y por tu estabilidad.

— Lilian Green cálmate, estoy bien, solo que hoy llegaron los señores Williams a la mansión y fue un día ocupado para mí dándole los reportes, ya sabes, informándoles todo, hasta ahora tomó el celular y no vi tus llamadas. ¿Qué pasa?.

— ¿Querrás decir, tus suegros? ¿Por qué siguen siendo tus suegros? ¿Verdad?— preguntó insegura.

— Si Lilian podrías tomar aire y decirme ¿Qué pasa?— dije preocupada.

— Es Jack— me alarme— Él hoy me preguntó por el lugar donde estaba tu mamá y yo casi que aflojo mi lengua y le dije tu apellido y estaba algo estresado y quería saber de ti y yo me aturdí.

— Tranquila Lili, toma aire— escuché dos inhalaciones y exhalaciones— ¿Qué le dijiste?.

— Que tu apellido es Harrison, que no tenías papá y me alteré cuando me preguntó que en qué lugar se encontraba tu mamá; antes de eso me preguntó por Fred, lo investigó — explicó mi amiga y sentí miedo.

Recordé el Jack cansado que entró a mi habitación, pero solo demostraba estar cansado, estaba comportándose bien conmigo, pero claro, su indirecta, como olvidarla.

— Yo, hablaré con él, siento mucho la molestia Lili y gracias por guardar silencio— susurré despacio.

— Tranquila amiga, ¿sabes que todo es muy efímero verdad?. Dile toda la verdad pronto, porque eso no es todo.

— ¿Qué más pasó Lilian?— formulé tomando el puente de nariz con mis dedos.

— Hoy vino un chico al edificio con las características físicas de Jack y le pregunto a mamá por tu apartamento y eso no es todo— tragué grueso— Fui donde Mackie como acostumbro a hacer y me dijo que se encontró con un chico en recepción también con las mimas características, castaño, ojos verdes, alto, pinta de empresario elegante y pulcro que redondea entre los 25 y que iba a visitar a Fred.

— ¡Oh Dios Lili!— exclamé aturdida.

— Arregla las cosas con Jack, él te quiere y merece saber la verdad, no lo eches a perder tienes tu relación basada en las mentiras— demandó mi amiga y Jack entró por la puerta dejando un casto beso en mis labios.

— Debo dejarte, hablamos después Karen— no pronuncié el nombre de mi amiga para evitar sospechas— ¿Cómo te fue con tus padres amor?

— Al principio fue complicado pero no fue difícil aclarar lo que quería— dijo mientras desabotonaba los puños de la camisa.

— Déjame ayudarte— me levanté de la cama y le ayude a quitar botón por botón, arrastre la camisa por sus brazos fuertes y acaricié su pecho al descubierto.

A Sus Órdenes Joven WilliamsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora