Written in the Stars | Kookmin

Capítulo 07

El camino de regreso a casa fue silencioso. En el trayecto Jimin había aprovechado de observar el frondoso paisaje y como la tarde daba paso a su primer atardecer. Por lo que se percato había caminado bastante, de no ser por Jeongguk el camino hubiese sido largo y tedioso. El de cabellos oscuros estaba agradecido de que la persona a su lado no hubiese emitido sonido alguno

Jeongguk por otra parte solo quería conducir, era uno de sus hobbies favoritos cuando quería distraerse y más ahora que iba acompañado de una persona tan gruñona. A pesar de que le había parecido divertido el momento anterior compartido, le impacientaba la tristeza que transmitía junto con su aura. Era momento de optar por silencio, ya tendrían tiempo de compartir en otra ocasión. Apostaba por ello

Pasaron un par de minutos y Jeongguk estaciono el vehículo fuera de la pastelería, el pequeño no lo había notado hasta que la puerta se abrió dejando ver a Jeongguk con una pequeña sonrisa y ofreciéndole su mano para bajar. No la acepto pasando por su lado rápidamente, solo quería dormir.

Jeongguk por su parte aprovechó de entregar el pequeño presente que le tenía a la dulce Youngok, por lo que camino detrás del chico, lo que no esperó era que Jimin cerrara la puerta y le diera de lleno con su nariz.

- ¡Auch! - Se quejó.

Jimin dio media vuelta asustado, por culpa de su imprudencia la nariz de Jeongguk estaba sangrando. Arrepentido jalo el brazo del castaño, donde los músculos no pasaron desapercibidos para él, un pequeño sonrojo se hizo presente y se quería abofetear.

- ¡Quédate aquí! - Corrió escaleras arriba llamado a su abuela, pero el silencio lo recibió. Al entrar a su cuarto se percató de una pequeña nota en su velador

"Fui a cenar con tu padre y mi futura nuera, no me esperes despierto Jiminnie. Tu comida favorita espera en el horno"

Sonrió pensando en lo dulce que era su abuela, pero todo pensamiento cálido desapareció cuando se oyó un ruido en la cocina y se acordó del egocéntrico que esperaba por el con su nariz ensangrentada. Bajo rápidamente y se encontró con Jeongguk comiendo de una olla mientras sujetaba un papel lleno de sangre en su nariz.

- ¡Eres un animal! - Comento Jimin con horror.

-Tengo hambre, iba a cenar con Nana, pero se fue con tu papá. - Hizo una mueca.

- ¿Cómo que cenar con Nana?

-Cenar con mi abuela, tan fácil como eso. - Jeongguk seguía presionando su pañuelo y Jimin por otro lado estaba confundido, pero ver que la sangre seguía saliendo lo tenía más preocupado, así que busco en los cajones un botiquín que encontró con éxito, y se dispuso a ayudar.

-Siéntate. - Exigió.

Jeongguk lo miro raro, un niño bonito no le daría órdenes, menos a él.

-Siéntate. – Repitió severo mientras buscaba dentro del botiquín una aguja, Jeongguk la miro y trago en seco. Las agujas eran una de sus debilidades desde aquella vez que se vacunó y el brazo le dolió por días. Con indecisión tomo asiento y sacó el papel que tenía en su nariz. - Buen chico.

Jimin desinfectó con un hisopo el interior de la nariz y parte del labio superior. Al parecer solo había sido superficial porque una vez terminada la limpieza no volvió a brotar sangre

-Mi nariz es un tanto sensible. - Jeongguk miraba encantado a Jimin, que por cierto estaba concentrado en su tarea.

-No me digas. - Limpio con una gaza la sangre restante y sonrió por su trabajo.

Jeongguk estaba maravillada con su sonrisa y el pequeño diente que sobresalia

-Gracias, no tuviste que molestarte.

-Fue mi culpa, no es necesario agradecer. - Respondió restándole importancia.

-No era necesario tanto cuidado.

-Para mí lo era, se podría haber infectado.

- ¿Siempre te quedas con la última palabra verdad? - Pregunto riendo a lo que el más pequeño alzó una ceja y arrugo su pequeña nariz.

Jimin en palabras simples, tenía a Jeon Jeongguk en sus pies

"La suerte es lo que sucede cuando la preparación se encuentra con la oportunidad"— 🕊🖤