Written in the Stars | Kookmin

Capítulo 17

Luego de siete estresantes y dificultosas horas Jeongguk y los chicos habían logrado sacar con éxito a los pequeños potrillos, sin embargo la yegua estaba débil por todo el esfuerzo, no podían dejarla sin cuidados por lo que el como veterinario debería quedarse hasta el otro día con los animales.

La noticia del nacimiento de los potrillos se había esparcido en el pueblo, llegando a oídos de la abuela y los chicos, exceptuando a Jimin que no había salido de su habitación, ¿las razones? se había quedado dormido, ademas estaba enojado porque ya estaba oscureciendo y ni señales de Jeongguk. No es que fuera a salir con el porque seria una distracción en su relación con la chica pero mínimo una explicación de porque no había aparecido.

Enojado y hambriento se levanto para ir en busca de comida, torta de chocolate para ser exactos.

Cuando llego a la planta baja escucho a todos hablando y se les veía bastante emocionados.

-¿Por que esas caras?- Pregunto al llegar

-Nacieron dos potrillos.- La anciana estaba encantada, los caballos siempre fueron su vida y ahora habían dos potrillos bebes que podría cuidar.

-¿Y que tiene eso?-Pregunto mientras cortaba un trozo de pastel.

Taehyung blanqueo los ojos, hasta el que nunca se relaciono con lugares remotos lo sabia.- Es difícil que nazcan dos potrillos juntos, el riesgo es demasiado para la madre.- Jimin había echo una "o" con su boca.

-Mi pobre Jeonggukie no ha parado.- Jimin dejo de comer y le presto atención a su abuela.-Ha estado todo el día atendiendo el parto y se debe quedar con la yegua hasta mañana.

-¿Y porque el?- Taehyung y Jin rieron.

-Jeongguk es el único veterinario de la isla.- Respondió Jin

Okey, Jimin estaba impactado. Nunca se le paso por la cabeza que Jeongguk fuera veterinario, el chico era prácticamente perfecto.

-Le llevare comida.- Youngok comenzó a preparar muchos potes para llevarle comida a su nieto.- La señora Jeon se fue ayer a Jeju con tu padre y no volverán hasta mañana, y conociendo a mi pequeño Jeongguk no se moverá del lado de Cayetana.

-Hmm si quieres yo se la puedo llevar abuela.- Respondió Jimin en un tono casual tratando de sonar ajeno.

-¿En serio lo harías?- Pregunto con ilusión la anciana.

-Iba a salir a caminar, me queda de paso supongo.- Respondió levantando los brazos.

Jin y Taehyung se guiñaron el ojo y siguieron cenando. Jimin estaba cayendo en los encantos del chico, y no lo admitiría

Con la comida lista y en su punto, Jimin salio camino hacia donde se encontraba Jeongguk. Estaba nervioso. Si se topaba a Jeongguk y su novia, seria incomodo. Negó con su cabeza al imaginarse los posibles escenarios que extrañamente apretaban su corazón

Luego de quince minutos llego a uno de los terrenos de Jeongguk y pudo visualizar a Namjoon, el chico se veía sudoroso y cansado, llevaba un balde y unos guantes largos que estaban manchados con lo que suponía era sangre. Con decisión se acerco, no veía a Jeongguk y aquello le preocupaba.

-Hola Nam.- Saludo cortesmente.

-Oh, hola.- Dijo el chico de hoyuelos rascando su nuca.

-¿Como estas?

-Agotado, ahora me iré a descansar al fin.

-Hmm, ¿Por casualidad sabes donde se encuentra Jeongguk?- Pregunto formando una mueca

-Esta adentro, ha sido uno de los partos mas complicados que hemos tenido.

-Los chicos me comentaron algo al respecto. Lo lamento

-No te lamentes, si no fuera por las manos mágicas de Guk los animales hubieran muerto. Pero ya paso, hay que esperar que Cayetana pase estas horas cruciales solamente.- El celular del chico comenzó a sonar y se despidió rápidamente.

Jimin tomo aire y temeroso comenzó a caminar, estaba anocheciendo por lo que comenzaba a helar haciendo que le chirriaran sus dientes. El establo era grande, y al parecer los animales estaban dormidos porque el ruido era mínimo, solo se veía encendida una luz casi al final.

A medida que avanzaba podía escuchar una dulce y suave melodía. La voz inconfundible de Jeongguk hizo que sonriera a medida que avanzaba, lo que no esperaba era encontrarse al chico abrazado y haciéndole mimos a la yegua. El corazón de Jimin se detuvo por unos segundos, la imagen era preciosa

Jeongguk llevaba su profesión más allá y era claro que al chico le apasionaba lo que hacía, y si había algo que enamoraba a Jimin eran las personas apasionadas y gentiles, para su mala suerte Jeongguk cubría gran parte de las características y otro sin fin del cual aún no estaba enterado.

-¿Jimin?- Jeongguk estaba sorprendido, la persona que menos esperaba ver era al pequeño enojon y allí estaba con sus mejillas color carmín.

-Eh...- El vomito verbal se aproximaba, lo podía sentir.- Toma.- Le tendió la pequeña lonchera pero el chico no podía alcanzarla debido a su incómoda posición.-Lo siento.

Ambos jóvenes rieron por el pequeño percance pero una queja de Cayetana los puso en alerta. Jeongguk rápidamente hizo un chequeo general, todo estaba en orden debía sólo ser una queja. Aprovecho para taparla y salir un momento.

-Ten, debe estar caliente aún.

-Gracias, no he comido nada.- Había despertado casi al medio día pero aún así no tenía hambre.

-¡Como no has comido nada!- Gritó Jimin a lo que el más alto solo miro divertido.

-En estos casos, el hambre no existe.- Sacó los pocillos y comió arroz.- Es más importante la vida de un ser vivo que mi estomago.

Jeongguk comió la mitad de la comida bajo la atenta mirada de Jimin

-Lamento no haber ido por ti.- Rasco su nuca avergonzado.

-No te preocupes, dormí todo el día.

-No te avise, ni nada.- Hizo un puchero.- Fue muy descortés de mi parte pero en estos días te lo puedo compensar.

-Jeongguk no es necesario, además tu novia se podría molestar.

El castaño enarcó una ceja, no estaba entendiendo absolutamente nada.

-¿Perdona?

-Tu novia Jeongguk, me dijeron que estabas con ella después de la fiesta.- Dijo rodando sus ojos.

-¿Después de la fiesta?- El chico estaba que reía a carcajadas pero aguantaría un poco más.

Tiro unos mechones de su cabello, le exasperaba que fuera tan cínico.- No te hagas el que no sabes. ¡Hasta tuviste el descaro de coquetearme!

Una carcajada simple, brotó de sus labios haciendo que Jimin frunciera el ceño e hiciera un puchero, había hecho enojar nuevamente a Jimin.

-En primer lugar, no te he coqueteado.- Contesto guiñándole el ojo.- Segundo, después de la fiesta llegue a dormir porque estaba cansado de haber hecho todo eso para ti.- Lo señaló.- Tercero y lo más importante, no tengo novia, ¿Quien te dijo semejante estupidez bobo?

Jimin no había contestado, estaba muriéndose de la vergüenza. Le había echo una escena a Jeongguk que ni siquiera había hecho con el infeliz de su ex prometido

-Los chicos dijeron que habías llegado tarde, y con perfume femenino.- Murmuro mirando el piso mientras trataba de hacerse más chiquito.- Yo solo supuse que tenias novia, sería ilógico que no tuvieras una, ya sabes eres prácticamente perfecto...

-¿Park Jimin me acaba de decir perfecto?

Jimin recién caía en cuenta de la estupidez que había dicho, y podría jurar que nunca antes había sentido tanto calor en su rostro

"Nada resulta más atractivo en un hombre que su cortesía, su paciencia y su tolerancia"—🕊🖤