Mis pensamientos

Nuestro año

Siento impotencia, impotencia por no poder hablar, por no poder gritar, por haberme quitado la voz. Porque sienten miedo de nuestro grito y revolución, de todo lo que podemos lograr sin su ayuda. NOSOTRAS SOMOS MÁS.

Y puedo decirte en un susurro,
con manifiestos en las redes,
con pintadas en las paredes,
con carteles en los muros;

que me has quitado la voz, pero que voy a seguir gritando. Y soy Yo,

soy Laura,
soy Marina,
Lucía
y Paula.

Soy ellas y nosotras. Porque somos una. Y de camino a la transición, de camino a la aceptación, te cuento que nosotras vivimos siglos por delante de vosotros, que la palabra "sororidad" ha entrado en el diccionario de la RAE, y que después de mucho tiempo empiezo a sentirme orgullosa de algo que pasa en esta sociedad. Te cuento que 2019 será mi año. MI año. En el que me querré como nunca lo he hecho y en el que nos querré como hace tiempo que llevo haciendo. Te cuento que se acabaron los insultos machistas, se acabaron las vendas en los ojos, y que las únicas que quedan son las de Bird Box. Este año recuperaremos la voz, y seguiremos susurrando, manifestando en las redes, pintando en las paredes y pegando carteles en los muros. Porque es totalmente necesario que estemos hasta en la sopa, con nuestros pechos desnudo y pintados, con nuestros pelos, sin sujetador, con celulitis, coloreando nuestras estrías y con caricias en el sexo. Que sepáis que este 2019 no sólo tenemos voz, sino tacto, vista, olfato y gusto. Allá vamos.