La Que No Podia Amar

17 | "No te cambiaría"

Miranda bebió algo del vino y miró a Andrea.

-Cocinas muy bien, pensé que sólo sabía hacer esos sándwiches grasosos y nada saludable -Andrea se rió.

-Hay mucho sobre mí que no conoces, Miranda Presley.

-Espero que tengamos tiempo para saberlo.

-Creo que vamos a tener -dijo y dirigió su mano sobre la mesa -Voy a tomar la mesa, ¿te gustaría un poco más de vino? -preguntó cuando se levantó.

-Me siento como si estuvieras tratando de emborracharme.

-Sería maravilloso, debo admitir -dijo llendo al lavabo y poner los platos allí-Especialmente si el efecto es a mi favor.

-Es seguro, sólo estás aquí.

-Por lo que es un punto positivo para mí -dijo al poner vino en las copas, terminó de tomar los platos y tan pronto como terminó de empacar la cocina entró en la sala de estar y se sentó en el sofá, Miranda la miró.

-¿Cuánto tiempo has sentido eso por mí? -Andrea la miró y puso la taza en la mesa de café, Miranda repitió su acto y pronto sintió su cuerpo ser abrazado. Andrea se puso mejor tirando de ella en sus piernas y mirándola a los ojos, mientras acariciándola en la mano.

-No sé exactamente, sentí una tremenda gratitud y admiración por ti, entonces no podías verte a ti mismo como la reina del hielo -Miranda se rió -No sé a qué hora las cosas han cambiado dentro de mí, sólo sé que han cambiado, desde entonces no puedo sacarte de mi mente -Ella la miró a los ojos y pasó el dedo a través de sus labios -Me mantuvo imaginando el sabor de tus labios -miró a sus labios y luego a los ojos de nuevo -La textura de tu piel, el sonido de tus gemidos -susurró -Y todo es tan maravilloso -dijo en un susurro , Andrea se acercó a su cara y le pasó la nariz por la mejilla, la besó en la esquina de la boca, causando que Miranda cerrara los ojos y suspirara.

-¿Estás segura de que quieres esto? Sólo soy una anciana malhumorada que demanda demasiado de otros, alguien aparecerá en tu vida y en el mismo momento te olvidarás de que alguna vez me quisiste.

-Todo lo que quiero es aquí, Miranda, que tu puedes estar segura de esom

-¿Qué pasa si las cosas cambian?

-Es inevitable que cambien -detuvo el beso y la miró a los ojos -Empezaron a cambiar cuando me contrataron para ser tu asistente y seguir cambiando, pero sólo realmente cambia si queremos. No habrá nadie más que tú...-aspirado su labio -Nunca.