La Que No Podia Amar

30 | Fin de semana juntas

Andrea entró en la habitación de los gemelos y fue al baño, llamó a la puerta.

-¿Puedo entrar?

-Sí-dijeron juntas, Andrea vino a verlas peinarse el pelo, las dos llevaban sudaderas, uno con rosa y el otro con lila.

-Pensé que aún estaban en la ducha.

-¿Qué pasa con mamá? -Preguntó Caroline.

-Se fue a tomar un baño antes de la cena.

-¿Vamos a hacer otro maratón de películas? -Le pregunta Cassidy.

-Claro, simplemente no sé si puedo quedarme despierta, vi todos los que querías esa vez.

-Esta vez en nuestra habitación, así que cuando dormamos no necesitamos levantarnos -Andrea se rió.

-Esta bien -Dijo abrazandolas mientras estaban bajando.-¿Ponemos la mesa?

-Recojo los platos -dijo Cassidy.

-Yo los vasos -Dijo Caroline.

-¿Dónde están los vinos?

-Allí en los gabinetes, primera puerta a la derecha-respondió Cassidy.

-No tardo mucho-las chicas afirmaban y Andrea siguió en busca del vino, entró en la pequeña bodega y miró a su alrededor reparando los nombres.

Terminó optando por un Bonacchi Sangiovese toscano que cae perfectamente con la masa, volvió a la cocina y vio a las niñas acaba de poner los platos y tazas en la mesa, escuchó el horno anunciar que la pizza estaba listo, Andrea abrió el vino y tomó dos tazas , luego el jugo de las chicas, sacó la pizza del horno y la puso sobre la mesa, Miranda entró en la cocina viendo las tres sentadas, se sentó junto a Andrea quien le entregó una taza, cenó con risas, las chicas contaron las películas que quería ver después de terminar la cena. Las chicas se subió y Andrea miró a Miranda, esto bebió el vino traquilamente, Andrea se sentó a un lado.

-Estás tan callada -Miranda la miró y sonrió en la esquina.

-Estaba pensando, tengo un viaje esta semana.

-¿Crees que puedes volver el mismo día?

-Eso espero.

-Esperemos -Miranda se rió.

-Sí, esperamos-dijo acariciando su cara, Andrea la besó lentamente.

-¿Quieres más vino? -Susurró y Miranda se rió de sus ojos como ella decía, Andrea le sirvió-yo voy a tirar de la mesa-dijo levantarse, Miranda hizo mención de levantarse-¿adónde crees que vas?

-Para ayudarte.

-Nada de eso, puedes estar callada allí- tan pronto como Andrea terminó, se acercó a tomar la Copa y beber.

-Debiste haberme dejado ayudarte, todavía estás de visita.

-Mientras estés conmigo no harás nada de esto-Andrea la besó

-Creo que te estoy explotando.

-Claro que sí, pero no en esa parte-susurró sonriendo maliciosamente, Miranda se enrolla los ojos y y le da otro beso-¿vamos a subir?

-Sí, ¿pero no vas a terminar el vino?

-Me voy, pero no ahora -Dijo mirándola a los ojos, Miranda sintió que el cuerpo temblaba con esa mirada, Andrea tomó el último sorbo y tomó la botella, Miranda se levantó.

-Tengo algo que decirte-Andrea le susurró y miró a los ojos.

-¿Ha sucedido algo?

-No, sólo quiero decírtelo.

-¿Y qué es?

-Lily llega a la ciudad el jueves, ella se queda conmigo en el apartamento-Miranda se quedó en silencio, sabía que Lily era el mejor amigo de Andrea, pero todavía se sintió incómodo-no vas a decir nada? -Miranda la besó lentamente chupando su labio con lentitud, sintió Andrea la aprieta en la cintura y encaja mejor en el abrazo, Miranda se mueve asentándose en la pierna de la morena, sus lenguas se mueven con una lentitud torturante.

Andrea sintió que la mano de Miranda le aprieta el cuello, Andrea se alejó mirando a la mujer que yacía frente a ella que todavía tenía los ojos cerrados, ella acarició su cara y suspiró.

-¿Todo bien? - Andrea preguntó en un susurro, Miranda abrió los ojos lentamente y afirmó, Andrea la abrazó besándola en la cabeza - ¿Quieres conversar? - Miranda la miró.

-¿Sobre qué?

-No sé, podemos hablar de mi jefa-dije divertido, Miranda se rió en la primavera.

-¿Qué tienes que decir sobre ella?

-Bueno, ella es una mujer extremadamente arrogante, insufrible-bromeado y Miranda se la lleva, haciéndola reír en voz alta- Además de todo, exige mucho de mí, no creo que ella pueda soportarme.

-Estoy segura de que no.

-Yo también, pero ¿sabes qué?

-¿Qué?

- No sabría vivir sin ella, ni sin su arrogancia, ni su bravura, amo aquellos ojos intensos que a veces me confiesa por no saber qué color realmente ellos son, amo aquella sonrisa que sólo ella tiene y aquella voz extremadamente excitante - Miranda la miraba con atención, Andrea suspiró - Hacer lo que me encanta, amo mi trabajo, me gusta lo que hago y mi jefa ...

-¿Qué tiene ella?

-Es la mejor parte de mi día - Susurró y abrazó a Miranda un poco más mientras suspiraba apoyando la frente en la suya.

-Tu también eres la mejor parte de la mía.

-¿En serio?

-Sí - Sussurró, Andrea pasó la nariz por la suya y sonrió dándole un sello, luego la besó en el cuello.

-¿Quieres dormir?

-No -susurró.

-Y entonces.

-Nada, sólo aprovechar nuestro fin de noche así como tú

-Está bien - Susurró, Miranda colocó el rostro en la curva del cuello de Andrea y suspiró, Andrea le acarició sus cabellos, mientras con la otra mano la abrazaba por la cintura. Las dos durmieron una sintiendo el abrazo de la otra.