34 | Mirandy

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Lily miró a su amiga y luego a la mujer que tenía una cara seria, Andrea sabía la mirada que estaba recibiendo, y eso la puso tensa.

-¿Que haces aquí?

-¿No puedo visitar a mi novia? -Ella preguntó fríamente.

-Por supuesto, pero no sabía que vendrías.

-Si miraras tu celular, lo sabrías -Entró, se quitó el abrigo y lo tiró en el sofá con su bolso.

-Está en el dormitorio, estaba haciendo la cena para Lily.

-Oh, preparando la cena -sonrió con un canto completamente irónico y se apoyó en el sofá.

-Si.

-Un placer Miranda, soy Lily Gledson, la mejor amiga de Andy.

-Miranda Priestly, la novia de Andrea - Ella le estrechó la mano.

-Escuché mucho sobre ti -Ella sonrió con simpatía. -Bueno, los dejaré hablar, discúlpeme.- Lily dejó a Miranda mirando y luego miró a Andrea.

-No me mires así, Miranda.

-¿Cómo quieres que te mire?, Pasaste la mayor parte de la semana ignorándome, no respondes a mis mensajes, llego aquí y esta chica está prácticamente desnuda, todavía estás cocinando para ella.

-Ignoré la forma en que me trató.

- Lo reconozco ¿vale? - Dijo sin poder hacer nada.
-Pero me dijiste que no luchara y que te besara cuando me sentía celosa o insegura, eso es lo que hice, pero apenas te correspondí, te fuiste.

-Estábamos trabajando Miranda, no podíamos ceder al deseo, se darían cuenta, principalmente porque eres un poco escandalosa -Miranda la miró fijamente, observando cómo se mordían los labios para no reírse.

-No es gracioso, Andrea Sachs -dijo con seriedad.

-Bien, ahora ven aquí con un beso a tu ENAMORADA - Repitió sus palabras y se echó a reír, poco a poco se acercó y la abrazó por el cuello. -Creo que puedo acostumbrarme -dijo, divertida, Miranda la pellizcó. -¡,Auch , Miranda!

-No es gracioso.

-Te beso a la ligera -Prometo recompensarte por esos días - Ella se frotó los labios de platino.

-¿Te quedarás conmigo?

-No puedo Miranda, Lily es mi visita, pero puedes dormir conmigo hoy -La besó en el cuello y lo mordió lentamente, luego la oreja. -¿Qué piensas? - Miranda suspiró, se estremeció.

-¿Has dormido aquí? -Ella susurró con los ojos cerrados, sintiendo las mordidas en su cuello de nuevo.

-Sí, muy cerca de mí.

-¿Y realmente dormiremos?.

-Buena parte del amanecer -Miranda se mordió el labio.

-¿Por qué el amanecer? -Andrea se acercó a su oreja otra vez.

-Te haré mía toda la noche -Andrea la miró a los ojos y chupó los labios de la mujer frente a ella. -¿Te he convencido?

"Completamente", susurró, mirando los labios de la morena. Andrea sonrió.

-Bien -susurró ella, tomándola en un intenso beso.

Miranda correspondió con la misma intensidad, estaba loca de anhelo, se fueron por falta de aire. Miranda chupó el labio de la morena y le acarició la mejilla.

-Te extrañé

-Soy más -susurró ella, apoyando sus cejas. -¿Vamos a la cocina?

-Sí.

-Lily está loca, te va a gustar - Miranda se echó a reír nasalmente y ambas entraron mano a mano en la cocina. Miranda se sentó frente al mostrador.

-¿Quieres un poco de vino? - Miranda acaba de decir.

Andrea recogió y sirvió a las tres, tan pronto como se sirvió la cena, comieron entre las conversaciones, Miranda casi no pronunció, ella prefirió escuchar, todavía estaba celosa. Tan pronto como terminaron, Andrea y Lily arreglaron la cocina y se despidieron con un "Buenas noches" y un abrazo. Miranda fue primero a la habitación, Andrea la siguió poco después.

La Que No Podia AmarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora