Capítulo 26

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Lisa

Las mañanas en la manada de Luka , eran algo frías; sin embargo , hoy era distinto. Era un día hermoso como aquellos días en el Bosque Prohibido , extrañaba mi hogar , aquel pequeño lugar en que pude sobrevivir. A mi mente llegaban los recuerdos de las risas de las ninfas jugando en el agua, el canto de las aves y las mariposas turquesas bailando alrededor como si fuera de otro mundo.

Un mundo ajeno al de acá.

Y lo entendía perfectamente, había recorrido los partes más recónditas del bosque sin saber que al regresar a casa ya no tendría que hacerlo. Era extrañó , volver ahí, donde también había sido gris , tenía recuerdos dolorosos... Aun así... volví , porque ya no tenía donde más ir, porque la imagen de aquella persona venía una y otra vez a mí , manteniéndome atada a este bosque.

Luka... mi amado Luka...

Yo... había encontrado una luz mucho antes de conocerte... Era tan brillante , tan pura que parecería que fuese a derretirte. Como una luz alumbrándote en medio de la noche , haciéndome sentir por primera aquel deseo de vivir un poco más para él.

Cómo si por fin tuviera sentido.

Aún no entiendo del todo, porque repentinamente él cambió.

Su rostro era el mismo , su voz , sus ojos... sus ojos , no , era distinto. No era él , de repente cambió , su brillo había desaparecido , aquella luz que emanaba parecía haber sido extinguida. Mi pecho que latía profundamente por él pareció morir en una lenta agonía mientras trataba de comprender por qué no era él mismo , porque mi amado de aquel entonces había cambiado.

Y poco a poco fue destrozando nuestros recuerdos , volviéndolas añicos , me fue lastimando dolorosamente hasta que mis ojos llenos de lágrimas te vieron en medio de la noche , cuando venías hacia mí , creyendo que era tu amada en ese entonces. Te conocía , te había visto a lo lejos , sonriéndole a ella , quién decía ser tu mate , pero se acostaba con otro; te veía a lo lejos tontamente enamorado y sonriente.

Incluso llegué a reírme de ti.

Te tenía lástima cuando jugaban contigo , cuando estaban haciendo lo mismo conmigo.

¿Había sido el karma?

Extrañadamente, nos volvimos amigos, me hablabas de ella como si fuera tu universo — incluso ahora , me siento celosa de recordarlo — nuestra extraña amistad , me ayudó a aliviar mi corazón. En aquel entonces , aquella noche, me abrazaste y consolaste, cuando éramos totalmente extraños y recordando la calidez de él volví a sollozar. Mi hermano había muerto repentinamente y mi amado había cambiado...

Lentamente, fui haciéndome consiente de ti , de tu hermosa sonrisa, de tus ojos brillantes y plasmados de amor hacia ella; me estaba enamorando una vez más. Y creí que mi amor sería unilateral porque tú tenías a u mate , a pesar de qué esta te engañaba , aun sabiendo ello , nunca desee ver que algo borrase tu sonrisa.

Y a pesar de ello , la verdad algún día iba a salir y te enteraste de la peor manera , me odiaste por ello.

Porque yo, quien decía ser tu amiga , te lo oculté.

Me arrepentí de ello tantas veces , en mi hogar , cada noche recordaba tu sonrisa. Con el tiempo, continué haciéndolo , hasta que desperté un día después de tres años, mis pies se movieron solos y fueron simplemente hacia ti. Burlé la seguridad de tu manada y me escabullí como solía hacerlo. Había cambiado tanto, esa sonrisa ya no estaba , una amarga expresión vislumbraba tu rostro.

Y cuando tus ojos me miraron , ni siquiera me reconociste.

Era extraño , al menos esperé una mirada de odio o molestia.

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