Rompiendo tus códigos

Epílogo

Elisabeth

Lydia está completamente embelesada ante todo lo que le estoy contando que hizo Michael el otro día por mi. En cierto modo me siento mal a contarle todo esto, porque sé que su historia no pudo ser, y eso la trae un poco decaída, pero ella insiste y termino por contarle, y verla tan ilusionada y feliz por lo que me pasa me hace sentir afortunada, porque eso me demuestra que es una amiga de verdad, aquella que hace el triunfo de sus amigas los suyos.

—Te lo mereces Elisabeth, eso y mucho más, has pasado demasiado tiempo de tu vida jodida por gente tóxica, ya era hora que llegase alguien como Michael.

—Un ex actor porno, en serio que no me lo creo, no me reconozco..., si me dices que me iba a pasar esto hace unos años me rio de ti— digo

Mi amiga asiente.

—Doy fe de ello— dice— y ahora, ¿Qué será de tu vida?

—Pues tengo varias entrevistas de trabajo, y ya estoy ojeando varios pisos, aunque Michael insiste que mientras puedo dormir en su casa, y que si me gusta, desistir de la idea de buscar piso...

Lydia se ríe.

—No sé porqué me huelo que si duermes varios días allí ese hombre encontrará la forma de convencerte que allí estarás mejor— Lydia guiña su ojo y yo no puedo evitar reír.

—Seguramente..., pero tengo miedo, de que todo vaya muy rápido.

—Llevas demasiado tiempo conociéndolo, no vais tan rápido.

Suspiro, no sé, quizás sea también porque con Michael el tiempo parece pasar volando.

Lydia y yo seguimos conversando sobre nuestras cosas hasta que mi móvil comienza a sonar anunciándome un mensaje de Michael.

<<Summer quiere hablar conmigo, en su apartamento, me gustaría que vengas conmigo hasta allí, ya no hay secretos entre tu y yo, lo que quiera decirme tendrá que ser delante de ti>>

Mi corazón se acelera, estoy nerviosa por el hecho de que esa mujer se haya puesto de nuevo en contacto con él, no es alguien que me resulte agradable, entre otras cosas porque tuvo algo con Michael, además de ser su compañera en numerosas escenas porno. Ella fue una de las causas que originó que Michael y yo nos distanciásemos la última vez, por eso no puedo evitar sentirme incómoda ante el hecho de que quiera verlo, y que Michael aceptase hacerlo.

Pero por otro lado agradezco que Michael quiera involucrarme en esto, que ya no me oculte nada y sea un libro abierto para mí. Ya no hay miedo entre nosotros, tan sólo una confianza fuerte, y que cada día alimentamos para que sea mucho más grande.

<<Me paso por tu casa en un rato y vamos juntos>> respondo.

—Lydia lo siento, me ha surgido una cosa, después te comentaré acerca de ello, ¿te importa si seguimos con el café mañana?

—No, claro que no, ¿está todo bien? — pregunta.

—Si, todo bien.

**

Cuando llegamos al apartamento de Summer me siento muy nerviosa. Michael lo nota y toma mi mano para darle un pequeño beso.

—Oye si quieres nos vamos..., sólo pretendía ser claro con ella

Asiento.

—No, necesito cerrar esta puerta, estaré bien.

El me sonríe y llama al timbre. Poco después Summer abre la puerta, pero sorprende al verme allí, agarrando la mano de Michael. Su sonrisa decae al instante.