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El aterrizaje fue doloroso.

Me hice unas cuantas heridas que aunque me causaban dolor no me impedían moverme.

Baelfire estaba bien.

Pero Peter...

Sabía que cuando volviéramos aquí él volvería a donde estaba pero me había acostumbrado tanto a su presencia que el no verlo me causaba inquietud.

La isla estaba mucho peor que la última vez que estuve aquí.

Con tristeza toqué el tronco de un árbol muerto que se deshizo como ceniza.

Retrocedí y puse los pies en la tierra.

Había un plan que debía seguir al pie de la letra si quería que todo se arreglara.

Suspiré y me cambié por una ropa más apta para estar aquí.

______: Ahora Bae- me agaché a su altura- Esto será muy peligroso por lo que necesito que me obedezcas en todo ¿si?

Lamió mi mejilla como afirmación y sonreí.

______: Vámonos, entonces.

Al levantarme, un dolor agudo se presentó en mi estómago.

Ya había sentido esa especie de dolor antes.

Cuando Peter por accidente me lastimó con Tormento.

...

Llevaba más de media hora observando el Campamento.

Vi que había nuevos Niños Perdidos y eran muchos.

Los Niños Perdidos que yo conocía los estaban entrenando de una forma más violenta que la de antes.

Aquello me entristeció.

Me hubiera gustado mucho correr a abrazarlos a todos y decir cuánto los extrañé pero hacer eso tal vez me costaría la vida.

Por suerte no me había encontrado aún con ningún enemigo.

Pero no debía bajar la guardia.

Se escuchó movimiento entre los árboles, lo cual alertó a todos.

Solamente eran Félix y dos Niños Perdidos que habían capturado a un prisionero en una jaula.

¿Se trataba de Peter?

Félix: Alguien avísele a Jane que Pan y su amenaza han vuelto- dejaron caer la jaula sin cuidado- Y con un amiguito.

Wilson: ¡AUXILIO!- gritó tratando de escapar de la jaula.

¡¿Wilson?!

Pero ¿cómo es que llegó aquí?

Él no estaba dentro del cuadro y se había ido antes de que llegara Janeth.

Era imposible.

Félix: ¡Cállate o te corto la lengua!- abrió la jaula y lo sacó para acorralarlo contra un árbol con fuerza.

Wilson dejó de hablar y pude advertir un sonrojo en sus mejillas.

Félix se quedó mirándolo por un breve rato pero al instante negó con la cabeza y le puso la punta de un cuchillo con Tormento en el cuello.

Félix: Solo hablarás para decirnos todo lo que sepas sobre la chica y Pan si no quieres terminar con tu miserable existencia en este lugar.

Pero Wilson no sabía nada.

Quise salir para liberarlo pero debía ser cuidadosa con lo que hacía.

"El Chico En Mi Ventana" Peter Pan / Robbie Kay Y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora