-Stephenie, levántate. Vas a llegar tarde y no puedo perder otra cita en el spa.
Como siempre, la armoniosa voz de mi madre me despertó.
Estoy tan cansada de todo esto. Toda nuestra vida es una farsa.
Mamá y papá se odian, nunca nos dan 5 minutos de su atención a Noah y a mi y definitivamente crecimos siendo educados más por las personas que nos ayudan en la casa en lugar de por ellos.
Toda una familia feliz.
Olor suave y delicioso a tocino se filtra desde la cocina cuando bajo a desayunar. Tati esta haciendo el desayuno. Yum.
-ya era hora de que bajaras, niña.- me regala una sonrisa que se pierde en cuanto mamá entra en la habitación.
- Eso mismo estaba pensando. Jamás puedo llegar a tiempo a ningún lado gracias a ti. No veo la hora en que seas independiente.
Mi madre siempre fue fastidiosa, pero desde que Noah se fue a la universidad se la agarra conmigo.
Me compadezco de mi hermano, el la tuvo que soportar más tiempo. No me extraña que quiera estar lo más lejos de casa posible.
Aunque eso signifique dejarme a mi suerte en esta casa de locos.
Pero no lo culpo, si mis padres hubieran puesto toda la presión sobre mi también habría huido en cuanto se presentará la ocasión.
- No tendrías que llevarme si tuviera mi auto. - le digo.
Ella rueda los ojos.
-No has hecho nada para ganártelo.
Suelto un suspiro y decido dejar de discutir con ella. Ella no se ha ganado su nueva camioneta, celular y computadora pero aún así se las dieron. En fin, la vida no es justa.
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A la deriva
Teen FictionNadie dijo que amar fuera fácil. Lástima que nadie le advirtió a Estephanie. De 17 años de edad, Estephanie siempre se ha sentido atraída por Ryan, el chico más sexy y encantador que haya conocido, pero pronto descubre que no todo es perfecto. Su r...