MAFIA LOBUNA [SEHRÉN]. La Historia Original

CAP 20.

FELICIDAD

ALDAS: ¿Sehrén? .... Sehrén despierta... Estamos apunto de llegar para trasbordar - movía a su novio con delicadeza.

SEHRÉN: A-Aldas... No me siento muy bien - entre abrió sus ojos con pesadez.

ALDAS: ¿Te sucede algo? ¿Qué tienes? - tomo el rostro del muchacho.

SEHRÉN: Me siento mareado, me pesa el cuerpo, Aldas me están pitando los oídos y me duele mucho mi sien - frunció el seño.

ALDAS: Hay no, Sehrén no me hagas esto, no ahora - comenzó a preocuparse.

SEHRÉN: ¿Qué? - soplo muy apenas.

ALDAS: Escucha, tienes que resistir, todo está bien, solo faltan algunas horas y podremos llegar a nuestro destino - sonreía.

SEHRÉN: Va... - trato de alistarse pero el aire se le escapaba.

Aldas noto aquello así que ayudó a su pareja a alistarse para bajar.

Después de al menos una hora y media estaban a punto de bajar de su vuelvo de conexión, Aldas había estado cuidando de su pareja por los síntomas que sentía, para su suerte no era demasiado grabe, el viajar en avión ponía mal al jóven y eso sucedía, sin embargo a veces los dolores de cabeza hacia llorar al más joven y tendría que dormir mucho tiempo para componerse.

Ya no faltaba demasiado para llegar, despertar al chico fue un dolor en el culo... En verdad estaba profundamente dormido, parecía muerto... Muerto? Todos tranquilos, el joven respiraba regular, moverlo no funciono, tampoco llenarlo de besos, le apretó la pierna y tampoco,se le ocurrió una brillante y divertida idea y era dejarle una marca a su pareja y así poder despertarlo, chupo con fuerza el cuello del joven haciendo que este se levantará de sorpresa viéndolo de mala gana.

SEHRÉN: ¿Qué haces? - lo miro molesto.

ALDAS: Estamos apunto de llegar... - le sonrió Acariciando su mejilla.

Era increíble cómo Aldas podía soportar que Sehrén lo tratase tan fríamente y él aún así lo amara como si fuera un hermoso tesoro, como si Sehrén fuese un bombón cubierto de chocolate con frutos rojos y mucha, mucha miel, para él era como cuidar un Adolescente malhumorado, tener un hijo de 5 años y estar en relación con un anciano...

ALDAS: Te Amo ... - salió de sus labios en un murmullo. Sehrén sonrió apenado. A que venía eso?

SEHRÉN: No digas tonterías -.

ALDAS: ¿No puedo decirte cuánto te amo? ¿Eso es una tontería? Amarte, ¿Lo es? ¿Es para ti una tontería que te ame? ¿Es una tontería todo lo que siento por ti? ¿Estoy mal haciéndolo? - bombardeo al chico dejándolo boquiabierto.

SEHRÉN: No es eso... Solo ... Agh... Yo también te amo.... Idiota - sonrió ladino y con los ojos cerrados.

Aldas solo se limitó a sonreír y seguir Acariciando la mejilla del joven..

Ya una vez abajo del avión comenzó su camino al lugar donde se hospedarian, el hermoso mar cristal se veía ya, la arena bajo la puesta del sol, se veía cálido algo que hizo a Sehrén suspirar de satisfacción. La brisa chocaba bruscamente contra su cara mientras su cabello daba latigazos cada vez que se movía.