🌲 C I N C U E N T A Y U N O | D U D A S 🌲

26.4K 2.3K 223
                                    

"Y allí estaba, con una gran duda existencial"

Axel.

Axel daba vueltas en su cuarto, sin saber que hacer. Quería verla, ir allí y hablar con ella, sentirse bien... Pero se sentía un inútil.

Tan solo quería amarla, pero no era suficiente si no lo hacía bien. Y él lo supo a la perfección.

Entonces, el timbre de su casa sonó, extrañando a Axel. Casi nadie iba a su casa, ni mucho menos nadie iba a verlo a esas horas de la noche. Su padre, como de costumbre, estaba a las afueras del pueblo con su maldito trabajo, en vez de criar a su hijo y pasar tiempo con él.

Él bajó las escaleras y, cuando abrió la puerta, la escena que presenció le dejó patidifuso y angustiado. Una mezcla extraña.

Frente a él, una Ariel cansada, con ojeras y algo enfadada estaba a un metro de Axel. Pero él observó aquel vestido tan bonito que se había puesto ella y dejó de lado las idioteces que antes pensaba. Tan solo importaba la salud de aquella joven, la que era su novia.

—Ariel... —murmuró y ella negó con la cabeza, cansada de muchas cosas.

No dijo nada, pero sus gestos le transmitieron todo lo que necesitaba saber. Estaba muy enfadada con él y eso era indudable.

Por lo que Ariel entró en aquella casa y se quedó a tres metros del joven al que amaba.

—Axel, estoy cansada de esto... —dijo, empezando a hablar tranquilamente, aguantando las ganas de gritar y transmitir todo lo que llevaba guardando.

Axel, en cambio, no dijo nada. Tan solo cerró la puerta de la calle y la miró a los ojos, esperando más respuestas de ella.

Ariel estaba muy cansada de todo lo que le estaba pasando, sabía que así no podía vivir y necesitaba desahogarse, hablar con alguien y solucionar sus problemas. Quería transmitirle que estaba cansada de estar discutiendo con él por boberías, que él se enfadase con ella sin más y la tratase como la estaba tratando.

Necesitaba sacarlo de su pecho, donde latía con mucha fuerza su corazón.

—Axel, yo te quiero... Y me gustaría seguir demostrándotelo durante mucho tiempo. Pero esto no es vida, esperar a que se te pase el cabreo cada vez que algo te enfada. Oírte decir palabras feas cuando estás de mal humor y transmitírmelas a mí. Ignorarme por días, sin saber nada de ti. —Le dijo, enfadada y con las lágrimas en los ojos. Axel solo la miraba, tragándose las propias palabras de ella como pudo y que tan ciertas eran—. Te quiero, pero no me das motivos para hacerlo.

—Lo sé... Lo sé muy bien, Ariel.

—No. No lo sabes. Porque si lo supieras no me harías daño cada cinco minutos —contestó con dureza y él tragó saliva con fuerza—. Me tratas mal la mayor parte del tiempo y prefieres estar más en tu soledad que... Mira, no te pido que cambies. Solo que me trates mejor, solo eso —murmuró, al borde de las lágrimas—. Me parece perfecto que no quisieras venir a la fiesta conmigo, es tu vida y tu decides en ella. Pero... Ni siquiera me has dicho ni una sola vez lo que sientes por mi. Quizás no sientas lo mismo que yo, pero... No sé ni lo que digo —respondió por lo bajo y negó con la cabeza—. No he debido venir, perdona.

Y con esa última frase, dejando a Axel más mal de lo que estaba, caminó hacia la puerta, dispuesta a abrirla. Pero la mano de Axel no la dejó morder el pomo y el cuerpo de él se acercó al de ella, escuchando como Ariel lloraba en silencio y él arrugaba la frente, odiándose a sí mismo por lo que la estaba haciendo sufrir a ella.

—Nunca he pretendido tratarte así... Mis idioteces son las que actúan y es mi culpa hacerte eso, sé que ni siquiera te merezco... Pero me transmites paz, luz, felicidad —murmuró él, pegando sus labios al oído de ella—. No te he dicho lo que siento por ti porque ni siquiera sé cómo hacerlo. Puede ser fácil para el resto de la población, pero para mí no. Te lo digo muchas veces, pero siento ser así contigo... Ojalá pudiera cambiar y eso es lo que estoy intentando hacer, por ti... Solo por ti, sirenita.

Y Ariel respiró profundamente, sintiendo las manos de Axel por debajo de su vestido.

Malquerencia: Parte I [+18] ✔️ (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora