Y entonces...
Decidió irse.Comenzaron a añorarla los que tantas veces le habían partido el alma en dos,
incluso lloraron su ausencia.Pero jamás se interesaron por la infinidad de veces que, presa de la ansiedad y carente de cariño,
ella derramada un terrible mar de lágrimas.Ella no se fue...
La obligaron a irse.Le gritaban una y otra vez que se marchara y que no volviera jamás...
Y eso fue exactamente lo que hizo;
Irse para no volver jamás.Fue entonces cuando su felicidad comenzó.
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Lo Que Casi Sin Querer Sangro
PoetryCuando das todo por intentar algo que tal vez suponga tu perdición, tal vez es porque en lo más profundo de tí tienes la tremenda esperanza de que puede que salga bien, de que puedes conseguir un tesoro cavando en las tierras del mismísimo infierno...