el último de hoy...
Capitulo 42
Si Arthit hubiese tenido que fundar sus opiniones solo en lo que veía en su propia familia, no habría podido albergar muy grata idea de la felicidad conyugal o la comodidad domesticas. Su padre, cautivado por la juventud, la hermosura y, sobre todo, por la apariencia de ambos, se había casado con alguien cuya mezquindad y falta de inteligencia habían puesto fin, ya en los comienzos del matrimonio, a todo afecto real hacía esa persona. El respeto, la estimación y la confianza se habían desvanecido para siempre, y las perspectivas de felicidad domestica de aquel se habían disipado. Pero no era propio del carácter de Mr. Sutthilak buscar consuelo para las consecuencias de su propia imprudencia en ninguno de los placeres que consuelan a menudo, con locuras o vicios, a los infortunados. Amaba el campo y los libros, y de semejantes aficiones había extraído sus principales goces. Poco debía a su mujer, a no ser la diversión que le habían procurado su necedad y su ignorancia. No es esa la clase de dicha que un caballero desea, por la común, deber a su pareja; pero donde faltan otros medios de diversión, el verdadero filósofo sabe sacar partido de los que están a su alcance.
Arthit, no obstante, jamás había dejado de percatarse de las inconveniencias de la conducta de su padre como marido. Siempre lo había observado con pena, pero, respetuoso de su talento y agradecido por el modo afectuoso con que lo trataba, procuraba olvidar lo que no podía pasar por alto, apartando de su pensamiento aquella continua infracción de los deberes conyugales y del decoro, que por el hecho de exponer a su esposa al desprecio de sus propios hijos, era tan reprensible. Nunca había sentido con tanta fuerza los daños que pueden causar a los hijos matrimonios tan incongruentes, ni nunca se había percatado tanto de los peligros que derivan de tan errada dirección del talento; talento que, la respetabilidad de los hijos, aunque no hubiese bastado para aumentar la inteligencia de la esposa. (jajajajaj pobre mamá...pero pues es verdad )
Si bien es cierto que Arthit se alegró de la partida de wickham, no puede decirse que encontrara motivo de satisfacción en la del regimiento. Salía menos que antes, y en casa tenía una madre y una hermana cuyas constantes quejas por el aburrimiento de cuanto las rodeaba entristecían su vida domestica. Aunque kitty llegase a recobrar con el tiempo algo de su sentido común, puesto que ya no existían las causas que la perturbaban, Arthit pensaba con intranquilidad en su otra hermana, cuya locura e imprudencia aumentarían al frecuentar, con cierta libertad, la playa y el campamento. En resumidas cuentas, ocurría ahora, como tantas veces antes, que un acontecimiento por el que tanto había suspirado no podía, al verlo realizado, proporcionarle toda la dicha soñada. Era preciso, por lo tanto, señalar otros límites para el comienzo de su felicidad, tender a otro punto al que quedasen ligados sus deseos y esperanzas y que, proporcionándole placer anticipado, lo consolase del presente y lo preparase para otro disgusto. Su excursión a los lagos era, por el momento, el objeto de sus pensamientos. Resultaba su mayor consuelo en los momentos desagradables que pasaba soportando el descontento de su madre y kitty, y todo habría sido perfecto si el plan de viaje hubiese incluido a kao.
Es una suerte, pensaba, que tenga algo que desear. Si todo fuera completo, mi disgusto sería seguro. Pero ahora, al cargar con la incesante fuente de pena por la separación de mi hermana Lydia, puedo razonablemente, pensar que todas mis esperanzas de placer quedarán colmadas. Un proyecto que promete innumerables delicias nunca puede tener éxito, y la decepción general solo se salva gracias a algún detalle molesto. (con esa hermana quién no...)
Al partir, Lydia prometió escribir a menudo a su madre y kitty, pero sus cartas se hicieron esperar mucho tiempo, y todas fueron breves. En las que dirigía a su madre siempre repetía lo mismo: que acababan de regresar de la sala de lectura, bellamente decorada, donde tales y cuales oficiales los habían saludado; que poseía un vestido nuevo o una nueva sombrilla que describiría con más lujo de detalle si no se viese obligada a dejarlo para otra ocasión por tener apuro, porque Mr. Fosters (doncel) la llamaba para ir al campamento. De las cartas a su hermana aun se extraía menos información, ya que aunque eran más largas, tenían demasiadas palabras subrayadas como para hacerla pública.
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Orgullo y Prejuicio (kong y Arthit) SOTUS
Roman d'amourmi tercera historia :3 será tal cual es la historia del libro de está misma, obvio mis toques, agregue temática de donceles(sí, Arthit será doncel ) espero les guste y su apoyo :3