James.
Era al fin una mañana calurosa, los fríos vientos del invierno habían pasado para dar paso a "la primavera" y no hice más que disfrutarla, jugué al quidditch con mis amigos y luego fuimos los cuatro al lago, donde me llevé una grata sorpresa, mi pelirroja estaba en un traje deportivo con el emblema de Hogwarts, seguro el que usaría en caso de ser ella la que tome la pista. Aunque quise (y me resistí muchísimo), no fui a verla, tal vez podría aburrirla y, es que quiero estar con ella a cada momento. ¿Es eso normal?
Entramos los cuatro al palacio y estuvimos hablando un rato sobre la segunda prueba que será mañana, donde lo que más ame estará atrapado en el fondo del lago y que, si en una hora y media no rescataba, lo perdería. Sin presiones, ¿eh? Cuando menos me di cuenta, ya era la hora de dormir, y la hora de la cena se me había pasado.
La mañana de la prueba, no estaba nervioso, comí unas tostadas y zumo de naranja, la pelirroja no estaba por aquí, pero seguro es porque desayunó antes. Todo el mundo se dirigió hacia el lago, donde nos llevaron en unos barcos blancos hasta más al fondo, llevábamos una túnica sobre el traje de baño y, cuando nos dijeron, me la quité. Varias chicas suspiraron y sólo tenía ganas de que mi pelirroja lo haga, pero no se apareció, fui hacia Catherine.
-Oye, Catherine, ¿dónde esta Heather? -su rostro se arrugó en tristeza, a lo que fruncí el ceño.
-James, ella está ahí -señaló el lago, lo miré y luego la miré a ella confundido.
-No la veo -volví a voltear para ver si estaba por ahí.
-James, ella es parte de la prueba, lo que más ama uno de ustedes -entonces comprendí, si no sacaba a Heather de ahí, la perdería. Volteé a ver a los competidores: Milena, el rubio y yo.-gracias Catherine.
Ya estaba listo, el cañón sonó y me metí al lago sin pensármelo dos veces, una vez dentro, hice el hechizo de la burbuja de aire y empecé a nadar por todos lados «aquí» susurraba una voz de vez en cuando, era como para dirigirnos. Seguí la voz hasta que esta me llevó a un "bosque de algas" imaginaba que esa era mi primer prueba, así que nadé hasta ahí para cruzarlo, cuando ya iba en medio camino unos grindylows empezaron a jalarme del pie y aunque forcejeé no se iban «¡expulso!» exclamé y se alejaron de mi, así que intenté nadar más rápido hasta que por fin, terminé ese bosque. Entonces un gran tiburón pasó a mi lado y me guiñó el ojo, extraño, sí y mucho. Llegué a una especie de ciudad, habían un tipo de chozas y más grindylows amarrados fuera, también había gente del agua mirándome.
-Tienes que pelear, es una prueba -dijo una voz gruesa, volteé y era un tritón musculoso sonreí malvadamente.- toma.- me lanzó una especie de lanza. Pero estaba claro para mi que luchar contra un tritón es igual a perder, o eso escuché una vez de Hagrid, así que mostré algo que a ellos les da miedo, mi varita mágica. Su reacción fue la que esperaba, todos se refugiaron en las chozas y el tritón se alejó nadando.
Segunda prueba, lista. Seguí nadando pero no encontré nada, en ningún momento, aún así continué y ahí estaban. Era una niñita con el cabello café, muy parecida a Milena y Heather, ¿el rubio ya había salido de aquí entonces? Cómo respuesta vi unas chispas rojas que salieron despedidas hacia arriba. «Reducto» dije, apuntando a la columna a la que estaba amarrada Heather y luego me la llevé, vi de nuevo al tiburón pero aún así lo ignoré sí una vez no me hizo nada ahora tampoco, salí al aire fresco con dificultad, nadar hacia arriba era más difícil. A penas salimos ella volvió en sí y me miró con el ceño fruncido, me empujó y luego se fue nadando hacia la superficie de madera que ahí había, la miré extrañado y copie su acción.
-Llegaste tres minutos después de la hora y media -me dijo Catherine, mirándome como sí estuviera avergonzada.- ella me había dicho: si en hora y media no lo logras, te aseguro que la perderás. James, llegaste después, la sacaste de ahí adentro, pero la perdiste sentimentalmente.
-Catherine, ¿qué haces con Potter? Y por qué él me tuvo que sacar, es una broma, seguro, yo no soy ni jamás seré lo que más ama, tendré que hablar con la directora sobre esto -refunfuñaba Heather de un lado a otro.
-Creo que deberían estar como cuando "se odiaban" ella no recuerda sus momentos lindos, o eso me explicó la directora.
Pero cuando salió Milena (descubrí que ella era el tiburón) la niñita la abrazó, no la perdió y no comprendía nada, hubiera preferido otra cosa, pero no eso. No quería que la única persona que amaba con tanta fuerza dejara de recordar todo, desde las palabras a los besos, o el baile... Una fea lágrima bajó por mi mejilla y la sequé, no me rendiré, ella dejó de tratarme mal una vez y lo puede hacer de nuevo.
Se volverá a enamorar de mi.
ESTÁS LEYENDO
El horrocrux perdido. (Estúpido Potter)
FanfictionLa tranquilidad reinó durante muchos años, relatando la vida de dos adolescentes que disfrutan esta tranquilidad y su extraña relación amor/odio. Heather Kervets, una bruja con familia de gran renombre, se debe enfrentar a un destino que ella no pid...