El horrocrux perdido. (Estúpido Potter)

Epílogo

1 de septiembre del 2026.

-¡Arriba, mami y papi! -la dulce voz de la pequeña hija de Heather y James sonó en la habitación.

La pequeña pelirroja de ojos verdes saltaba en la cama de sus padres, intentando despertarlos, Heather abrió un ojo y vio a dos de sus grandes amores en la cama. Su esposo le hacía cosquillas a la pequeña de sus hijas mientras ésta reía.

-Y...ya papi já já já -reía e intentaba hablar la pequeña Catherine Angelina, James al fin la soltó.- ¡hoy hay que llevar a mis hermanos al tren rojoo!

Si, ellos se habían casado, su vida había sido espectacular después de todo. A sus treinta y cinco años, ya tenía a tres hijos, un empleo como auror (después de la muerte de sus padres, se empeñó a combatir la magia oscura) y junto a James, eran muy exitosos.

Los nombres de sus hijos eran: Harry James Potter ll, el mayor con quince años, era idéntico a su padre excepto por sus ojos, verdes como los de Heather; la de en medio era Elizabeth Potter tenía doce años, pelirroja y con los ojos café de su padre; la más pequeña de cinco años era Catherine Angelina (Angelina era el nombre de la madre de Heather), con el cabello igual al de Heather pero despeinado como el de James y los ojos café como su progenitor.

Los cinco vivían felices en Godric's Hollow, en la reconstruida casa que antes pertenecía a los Kervets.

En la estación de King's Cross se encontraron con los Scamander, que eran cuatro: Cat, Lorcan y sus dos hijos, Heather Alexandra Scamander, que tenía cinco años y el cabello rubio y ojos azules de sus padres; y Lyssander James Scamander de dieciséis años, idéntico a Lorcan y, por obvias razones, a Lyssander. El antes mencionado se había ido a Alemania, después de casarse con una chica morena llamada Megan Lightwood, según lo que saben es que tiene un hijo con el nombre de Fred.

El impertinente chico pelirrojo también estaba ahí, con sus dos hijos gemelos de doce años, Fred y George Weasley (podías decir, incluso, que eran casi idénticos a los verdaderos).

Los cinco abordaron el tren escarlata y agitaron sus manos a modo de despedida, los adultos y las niñas imitaron su acción y, a las once en punto, el Expreso de Hogwarts salió del andén.

En la vida siempre habrá dolor, amor, tristeza, etc. Pero debes aprender a controlar cada emoción o sentimiento. El amor siempre triunfa, es algo que James dice hasta ahora a sus hijos y que le dirá a sus nietos algún día.

Y es verdad, no importa cuánto sufriste, una vez el amor toque a tu puerta; la alegría vendrá acompañándolo.

Amar no es sufrir, es vivir.

-FIN-

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Eso ha sido todo, no se, la verdad si pueda hacer una secuela sobre la vida de alguno de los hijos de los protagonistas, aunque me gustaría.

Tengo un final distinto que publicaré en seguida de este, espero que el fic les agradara tanto como a mi me agradó escribirlo.

Gracias por todo, aunque sean pocas las que siguieron la historia, las quiere:

Valeria💋