S E R I O || JohnDo

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Justo cuando esa duda invadía su cabeza, Taeil lo llamó y su atención volvió a su amigo.

- Pensé que te ibas a ir - escuchó del más bajo y soltó una pequeña risa.

- No me perdería la oportunidad de escucharte cantar - dijo sincero, abriendo sus brazos, para que Taeil fuera y pudiera abrazarlo, cosa que el mayor hizo.

- Gracias por estar aquí.

Johnny iba a contestar, pero apenas una sílaba iba a salir de su boca, una voz externa al pequeño grupo lo interrumpió.

- ¡Doyoung lo hiciste genial! - Se escuchó la exclamación de un chico extraño para el más alto, aunque tal parece que para el chico pelimorado y su mejor amigo, no.

- Hola Jungwoo - sonrió... espera ¿Ese chico sonrió? bien, su sonrisa era lo más hermoso de su ser, no tenía ninguna duda de aquello - ¿Vinieron mis padres? - alcanzó a escuchar, aunque el chico preguntó en una voz muy baja.

- No, lo siento.

La linda sonrisa de doyoung se volvió a esfumar, poniendo nuevamente esa expresión de seriedad, la cual parecía estar tatuada en su rostro.

- Oh ¡Hola Taeil! - saludó el adorable chico.

Taeil, que aún seguía entre sus brazos, lo saludó de vuelta.

- Taeil, Johnny ¿Vamos a cenar? - invitó Soyeon, haciendo que ambos se separaran y asintieran.

- Adiós Doyoung, adiós Jungwoo - se despidió el cantante, recibiendo un "adiós" de parte de los dos.

- Vine en mi auto - informó Johnny - Esta en el estacionamiento, vamos por el.

Los tres caminaron hacía el estacionamiento del teatro, donde había dejado estacionado su auto, Soyeon revisando en su celular hacía donde ir, tomando la mano de Taeil, mientras él y Johnny se ponían un poco al día, hablando de la Universidad del mayor y la del menor.

Cuando llegaron, Johnny se subió y Soyeon ánimo a su novio a sentarse de copiloto, a lo cual Taeil terminó aceptando.

Soyeon dió el nombre del local al cual irían a comer; Johnny sabía la ruta, así que no se preocupó.

Los novios iban haciendo comentarios de vez en cuando y él se reía de las ocurrencias de ambos, pero algo le impedía hablar. Era el pensamiento de duda por el chico pelimorado, ahora sabía su nombre y que tocaba el piano ¿Por que le seguía causando tanta curiosidad? ¿Era su rostro serio? ¿O quizás la duda de si era el mismo chico de anoche?

- ¿Qué sucede Johnny?

Suh salió de sus pensamientos, viendo el camino, ya estaban cerca.

- Ese chico, Doyoung ¿Es siempre igual de serio? - preguntó al fin, quitándose la duda que tenía encima, intentando no lucir tan interesado como realmente lo estaba.

- ¿Te interesa Doyoung? - fue lo primero que dijo Taeil, Johnny había fracasado en su intento de no parecer atraído por el chico.

- No - respondió rápidamente, pero sin entender porqué, sus mejillas se colorearon de un ligero tono rojo, quizás por el hecho de ser atrapado.

Soyeon se rió y Taeil la siguió.

- Admítelo, es guapo - dijo Soyeon, pero la conversación se detuvo, Johnny había estacionado.

Los tres se bajaron sin hacer comentarios y entraron al restaurante.

- Allá hay lugar - Suh informó, apuntando al lugar. Los tres caminaron hacía la mesa vacía y se sentaron.

- Entonces, volviendo al tema ¿Doyoung? - Taeil estaba sentado a su lado, y le dió un ligero codazo. Soyeon, frente a ellos, se rió nuevamente y Johnny volvió a tener su rostro sonrojado.

- Simplemente me da curiosidad su rostro tan serio, además anoche también estaba así.

- ¿Anoche? - dudo Taeil, confundido - Doyoung tiene reglas super estrictas, no puede salir de noche ¿Dónde lo viste?

Johnny estaba ultramente confundido ¿Por qué no lo dejaban salir de noche? ¿Por qué lo había visto de noche? ¿Qué edad tendría que lo controlan de esa forma? ¿Realmente era el mismo chico? dudas, dudas y más dudas, era lo único que su cabeza procesaba.

- No, quizás lo confundí - le quitó importancia el chico, cambiando el tema de conversación hasta que llegó el camarero con los menús.

Los tres lo leyeron con atención y pidieron cosas distintas, cuando el camarero se fue, volvieron a sumergirse en su conversación, la pareja y él. Hace un tiempo esa situación hubiese sentido tan extraña, ahora en cambio, solo podía sentirse feliz por su mejor amigo.

Johnny esa noche olvidó el tema de Doyoung luego de esa ligera conversación, él no importaba, solo era un extraño con dos extrañas coincidencias.

Pero a veces las coincidencias traen lo más bonito en la vida, o el mayor caos en la misma.

Bueno no tengo fechas fijas para subir cosas pq subo cuando se me da la gana 😈

Gracias por el apoyo que le han dando, tengan mis uwus.