-XXV-

2K 243 64
                                    

Un día despertar con náuseas y antojos sin dudas me alarmó con rapidez, los celos pasados no hubo ninguna protección e incluso cuando la marca fue hecha verdadera no habíamos pensado en eso. Estar de esa manera por cinco semanas no es algo de mi agrado. 

Yo he estado llevando a cabo proyectos bajo el poder que tengo como beta, ayudando a personas e invirtiendo en algunas mejoras de vida, me costó un poco que el consejo me cediera los permisos necesarios, ser influyente y tener el apoyo de todos los alfas era algo bueno.

Sí, ya se decidió de quién sería el poder de la manada sur, y si, mi hermanito quedó al poder de esta, siendo ayudado por mi madre. Por ahora y lo que tengo entendido todo está mejorando a pasitos de pingüino.

— ChangBinnie —la voz de cierto beta me llamó.

¿Alguna vez han tenido en su círculo social una pareja que parece inquebrantable?

En mi círculo social los más especiales es una pareja de tres lobos idiotas. HyunJin se las había arreglado para que los chicos consideraran una relación de tres, llevándola acabo ya desde hace más de medio año.

Yo por mi lado además de ser el menor entre ChaeYeon y YoonGi, me hice más unido a SeungMin, logrando descubrir más cositas sobre él de las que me llegaría a imaginar.

Él es hijo de una unión pura, en este caso de alfas. Siendo hijo de dos alfas había muchas expectativas en él, estás rompiéndose al ver que SeungMin no contaba con aroma y mucho menos un estatus social de alfa.

Hizo vida normal hasta que un día en la noche, por estar hasta tarde en la casa de un amigo, alfas de otra manada lo acorralaron en un callejón. Le golpearon y maltrataron hasta y que un alfa con sus ojos brillando de un tono rojizo apareció. Si, era HyunJin.

La amistad se fue forjando hasta el punto que usaban el aroma de HyunJin para cuidar de SeungMin, una protección que todos entendían y respetaban, sabían que ese beta estaba bajo protección de alguien muy fuerte.

Años después cuenta con los aromas de JeongIn y HyunJin, creando una mezcla tanto curiosa como deliciosa.

Qué SeungMin llegara a mí pidiéndome que lo acompañe a un lugar y que sólo a mí me pediría eso fue raro, por otra parte al momento de descubrir a qué lugar se refería no tardé en aceptar.

«Binnie, creo que estoy en estado»

Eso fue lo que dijo, mirándome con una mezcla de miedo y emoción brillando en sus ojos.

«Creí que no era posible ¿Sabes? Tengo miedo»

Admitió abrazándome como de vez en cuando lo hacía, dejando su cabeza en mi hombro.

«Pero no me quiero ilusionar por nada ¿Me acompañaría a una clínica?»

Y fue así como llegué a este lugar, atraído por mis propios pensamientos llegué a pedir también un análisis de sangre. Por casualidades de la vida —o por ser parejas yo del alfa y SeungMin de uno de los betas— nuestros análisis fueron de los primeros en ser liberados.

Ahora estamos en la habitación de SeungMin, sentados en la cama con los sobres frente a nosotros.

— A la cuenta de tres, tú lees el mío y yo leo el tuyo —me acercó el sobre con su nombre— Uno... Dos... Tres.

Abrí el sobre.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
WolvesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora