— ¡Ya no aguanto! —Le grito a Alex, quién lleva más de una hora escuchando todo lo que tengo para decir.
—Ethan… basta—Dice agarrándome por los hombros y parándome, deteniéndome de seguir caminando por toda su sala— Tienes que hacer algo, ya no puedes simplemente hacer como que no pasó nada, habla con tu mamá.
Asiento con mi cabeza pues no se que más hacer, está claro que tengo que hablar con mi madre.
—Se está saliendo de control, porque antes no lo hacía frente a ustedes—Dice él.
—Lo sé…—Digo con rabia— Y atreverse a hacer todo ese show frente a Stephany… estoy seguro que la golpeo, mi madre bajo maquillada.
—Entonces con más razón, hermano, habla con ella.
Salgo de la casa de los Brown decidido a hablar con mi madre, apenas papá se vaya de la casa a refugiarse de nuevo en su trabajo, hablaré con ella de lo que pasó y sobre lo que no puede seguir pasando. No es justo que deje que juegue así con su dignidad y sobretodo, con su integridad física.
Me subo a mi camioneta y antes de arrancar a casa, darme un baño y dormir hasta el lunes de ser posible, tomo mi teléfono y busco el contacto de mi novia en los mensajes.
Ethan: De verdad lo siento, Steph. No debí tratarse así, estaba alterado… Espero puedas disculparme.
Sin esperar su respuesta, enciendo el auto y me voy a mi casa, rogándole al cielo que por nada del mundo me cruce de nuevo con mi padre, pues no sé que sería capaz de hacer.
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Me remuevo en la cama sudando, me levanto y me siento en la orilla de esta. Tuve una pesadilla.
Paso mis manos por mi cara y tomo mi teléfono de la mesita de noche.
Dos de la mañana. Realmente fue un muy mal sueño, al punto de despertarme.
Reviso mi bandeja de entrada al tener un mensaje, Stephany me respondió el mensaje que le envié pero para entonces ya estaba dormido.
Castaña: No te preocupes.
Fue lo único que escribió y no debo ser muy listo para saber que sigue molesta conmigo. Y tiene toda la razón, me comporte como un imbécil con ella, cuando lo único que quería era ayudarme.
Reprochándome mentalmente mi comportamiento con ella, me levanto de la cama y salgo de la habitación hacía la cocina por un poco de agua o quizás leche tibia que me ayude a dormir.
Cuando paso por la habitación de mi hermana, escucho un sollozo que hace que me detenga.
Abro la puerta y la veo en su cama, hecha un ovillo mientras llora. La escena me parte el corazón y sin poder evitarlo mis ojos se llenan de lágrimas al ver a mi hermana así.
Entro haciendo mucho silencio, está tan sumergida en sus pensamientos llorando, que no nota mi presencia sino hasta que estoy muy cerca de ella.
—Ethan—Dice sentándose en la cama y limpiando su húmedo rostro rápidamente con sus manos, como si eso evitara que me diera cuenta que estaba llorando— ¿Qué haces despierto?
—Tuve una pesadilla—Digo tranquilo— Iba por un poco de agua y te escuche, ¿Quieres hablarlo conmigo?
Ella asiente mientras sin poder evitarlo, las lágrimas vuelven a hacer aparición por sus mejillas.
—Me da rabia que sea así con ella—Dice entre sollozos y entiendo perfectamente a que se refiere— Mamá no es mala, ¿Crees que se merece ese trato? Porque yo no.
—Claro que no, Kira—Digo sentándome a su lado— No lo merece, ninguna mujer merece ser humillada y maltratada por un patán.
Ella me mira mientras asiente con su cabeza
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Hasta el más mujeriego se enamora •Editando•
Teen FictionNo creo en el amor. No me voy a enamorar. No quiero ser esclavo de un sentimiento sobrevalorado. Mis pensamientos son claros y seguros hasta que mi vida da un giro inesperado y la veo, tan linda y dulce que sin darme cuenta, se convierte en mi éxtas...