Cap. 16

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Allí estaba, frente a aquel hombre que le tenía olvidada... Sus ojos se encontraron y el sonrojo en su niveo rostro no se hizo esperar.

-Bu...buen día dana-san- su voz tan suave y gentil, y sus ojos cerrados a la espera de algun comentario o reprimenda de su parte.

Sintio su imponente aroma, y aquella varonil mano sobre su cabeza dando una caricia cariñosa pero impersonal. El observaba aquel libro sobre el escritorio siendo consciente que ella lo había visto.

-Algo que quieras decirme Hime- abrió sus opalinos ojos, y lo encaro, asustada por la inexpresividad de su rostro. Siguió a donde su mirada se dirigía y observó que aquel hombre había visto que ella había tomado el libro.

-Gomenasai... Yo simplemente... Observe este libro sin título y me pareció muy curioso... Yo... Lamento si... Si lo e incomodado.- no encontró en sus ojos a aquel apasionado hombre que había declarado amor por ella, ni al gentil pero distante feudal que le había acogido. Solo observó ira contenida, y luego de años de sufrir la crueldad de su padre temió lo peor.

El tomo aquel libro intrigante entre sus manos, y con una de las velas de la habitación quemo las páginas allí contenidas, cerrando con fuerza la tapa dura extinguiendo el fuego y dejando en cenizas todos aquellos relatos. Ella no pudo evitar esa expresión compunjida por su abrupto actuar.

-Dana-san no... No era necesario- trato de acariciar gentilmente su brazo, pero el lo retiro abruptamente, con su mente llena de lo peor.

-Creí que podriamos... Que tu y yo... Podríamos...- hablaba más para si mismo pero el miedo envolvió a la pelinegra, aquel hombre estaba fuera de si, y ella corrio lejos... Salió huyendo de el, de la mansión, de la misma aldea... Aventurandose sin rumbo por aquel horrendo desierto, lleno de muerte y desolación.

Se encontró hecha un ovillo en medio de tanta arena, aun caliente como la ira de su querido pelirrojo, y con un aire tan frío como la mirada que le había dedicado... Estaba dolida, asustada... Tan confundida.

Entonces una silueta apareció desde el horizonte, ataviado en ropas para el desierto, con su figura imponente, le observo mientras ella perdía la consciencia... Un enemigo? Un viejo amigo?

Al verla pensó en enviar un águila a su viejo amigo, y notificarle de su amada en peligro... Pero recordó a aquel imponente pelirrojo, el había jugado sus cartas y ahora esa mujer inconsciente en el desierto le pertenecía... Pero si ella estaba allí con las vestiduras rasgadas y moribunda entre las dunas... Eso solo podía significar una cosa....

Sasuke la llevaría de vuelta a la arena, pero pediría una explicación a Gaara

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Sasuke la llevaría de vuelta a la arena, pero pediría una explicación a Gaara... Después de todo, era el único que sabía su gran secreto...
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Holaaaa perdón por la ausencia anduve muy ocupada! Pero ya me entregaré a este Fic!! Es un Gaahina les recalco jajaja pero si pueden pasen a ver mi Sasuhina que YA TERMINE! 🤗 🤗 Saludos!

Preciada Memoria... (GaaHina) TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora