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~•~

El alcohol empezaba a tomar el control de sus actos.

Ya llevaba unas cuantas copas de más, al igual que sus amigos y prácticamente todo el mundo allí metido.

Como había sospechado, la fiesta no era precisamente pequeña.
Las luces y la música hacían el ambiente aún más llevadero, y Josh bailaba sin parar junto a Ashley y Brendon, además de algunas otras personas que alguna vez había visto en el instituto.

– Chicos, – Decía Brendon por encima de la música, pasando sus dos brazos por los hombros de sus dos amigos. Estaba aún más ebrio que el teñido, pues este todavía podía ser consciente de lo que hacía. – Voy a... – Hipó. – Voy a besar a alguien.

Ashley rió.

– ¿A quién?

– ¿Veis aquella guapura? – Señaló a una chica de pelo negro azabache que bailaba feliz junto a sus amigos.

– No me hago responsable de lo que pase después. – Levantó Josh sus brazos como si se defendiera de algo, y los tres rieron.

– Va a ser maravilloso. – Dijo riendo mientras ya se iba acercando a ella.

– Es Sarah Orzechowski. – Le informó Ashley a Josh una vez Brendon se acercó a ella. – Tiene fama de ser una chica un poco... Difícil. – Decía mientras la miraba. – No sé si me entiendes. – Y Josh asintió.

Frente a los ojos de Josh, tapando a su mejor amigo y a la chica que tenía en mente besar, se interpuso otra figura.
Lo reconoció al instante y tuvo que girar su cabeza hacia Ashley, rezando porque no lo viera.

– ¿Qué pasa? – Decía Ashley con una pequeña sonrisa, notando que algo ocurría.

– Mira detrás mío.

Ashley lo hizo y abrió un poco más sus ojos, para luego volver la vista a Josh.

– No creí que vendría Zack Joseph.

– Yo tampoco. – Contestó Josh sin girarse y queriendo irse de allí. – Mejor voy un momento al baño.

– No voy a dejar que ese capullo te haga nada, ¿Vale? – Le agarró del brazo Ashley antes de dejarle ir, y éste asintió como respuesta.

Subió las escaleras al piso de arriba, esquivando como podía a gente tirada en las escaleras y personas besándose con pasión por el pasillo. Hasta que llegó a la puerta del baño y se metió dentro, agradeciendo a la vida que no hubiera nadie.

Se miró a los ojos unos segundos antes de mojar su cara con agua y resfrescarse, pues realmente hacía calor allí dentro.

¿Es que no iba a poder olvidarse nunca? ¿Siempre habría algo relacionado con él que lo perseguiría?

Se quitó su camiseta, quedando desnudo de cintura para arriba, y mojó también su pecho y brazos.

Y entonces la puerta se abrió, asustando un poco a Josh y dejándolo atónito al reconocer el aroma.

El castaño cerró la puerta tras de sí y se giró para quedar frente a Josh, quién lo miraba con la respiración un poco agitada.

– ¿Qu... Qué haces aquí? – Dijo Josh en un tono un poco bajo. La música podía escucharse de fondo, retumbando en las paredes.

Tyler se acercó un poco más a él, pero el teñido retrocedía.

– Te ví subir.

– ¿Me has estado siguiendo?

– No. – Negó al instante con el ceño un poco fruncido. – Mi hermano me dijo que habría una fiesta y decidí venir a divertirme un rato.

– Genial. – Fue lo único que dijo Josh, bajando su mirada a la camiseta que sostenía en sus manos.

De pronto, en el aroma del omega pudo oler algo más. Podía notar su leve excitación, y volvió a levantar su vista para ver como el contrario recorría con su mirada los brazos, el pecho y el abdomen del tintado.

El lobo interior de Josh comenzó a despertarse como por arte de magia, y tuvo que cerrar por un momento los ojos para contenerse, aunque era demasiado difícil.

Tyler volvió a mirar con fijeza al pelirrojo, ambos soteniéndose la mirada sin decir nada, hasta que Josh no pudo soportarlo más.

Dio dos grandes zancadas hacia el castaño e impactó su boca contra la suya, pegándolo contra la puerta del baño de manera ruda y sorprendiendo al contrario notoriamente.
Lo agarró de la cintura al tiempo que notaba que Tyler levantaba sus brazos para dirigirlos a su cuello, y sus labios comenzaron a moverse al compás, de una forma muy pasional.

El fuego que sentía Josh en su interior le hacía sentir que iba a explotar en cualquier momento. Era una sensación única, y le encantaba.

Subió sus manos por el abdomen del castaño y sintió como el contrario enredaba sus dedos en su cabello y tiraba muy suave de él.

La necesidad que ambos habían tenido y seguían teniendo de aquello se podía notar a distancia, y Tyler sonrió un poco durante el beso.

Se separó de la puerta empujando a Josh hacia el inodoro, sin dejar de besarlo, y se sentó encima suya de una forma que casi elimina por completo la poca cordura que le quedaba al alfa.

Se empezó a mover despacio encima suya y no pudo evitar soltar un leve gemido sobre sus labios, haciendo que el castaño sonriera aún más.

Sus lenguas chocaban y se enredaban, y Josh capturó con sus dientes el labio inferior de Tyler, mientras rodeaba su tronco con sus fuertes brazos y lo apretaba aún más contra él.

– Lo siento por lo de ayer. – Le susurró Tyler con la respiración agitada y sus ojos cerrados, la cabeza un poco gacha.

– Siempre dices lo mismo. – Sonrió Josh, hablando en su mismo tono de voz. – Te perdono.

Tyler subió su mirada, observando los ojos de Josh como nunca antes lo había hecho.

– Me encantas. – Fue lo que dijo antes de volver a unir sus labios con los suyos, pero esta vez de una forma más suave.

Hacía tiempo que ambos no se sentían de aquella manera, y lo necesitaban. Se necesitaban.

~•~

Por fin xd aunque sea un poco kk como lo he escrito

Luna llena • Joshler ;(omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora