ᴄᴜᴍᴘʟɪʀᴇ ᴍɪ ᴘʀᴏᴍᴇsᴀ [ғᴏʀᴅ x ____]

21. Gloria

¿Que sentir al saber que todo está en tus manos? Trabajé lo más duro que pude en las últimas noches en las cuales mi cuerpo me permitió bajar al sótano. Estaba cansada pero aún así tenía que seguir, tenía que protegerlos y sobre todo cumplir con mis promesas.

Plutonio era único de los que a mí parecer conocía ya que la mayoría eran de origen alien y extrañamente Ford contaba con cada uno de ellos en la bodega del laboratorio.
Sosteniendo mi vientre me aventure a intentar alcanzar uno de los frascos que necesitaba, estaba tan alto pero por obstáculo tenía mi peso que no me ayudaba si quería treparme en el estante como muchas veces hacia.

—Vamos chicos, dejen que mami suba —me dije a regañadientes tratando de alcanzarlo cuando en un movimiento alguien sujeto mi cintura y me ayudó a terminar mi "tarea"

— Creo que te advertí que no bajarás, sin importar que —exclamo Stan alzando una ceja— peor aún si vienes sola ¿Que es esa cosa? —pregunto mientras sostenía el líquido púrpura el cual era faltante para las municiones.

—Un suero que Ford y yo hicimos hace tiempo. ¿Cuánto llevas viéndome?

Él dejó salir una risa rodeando los ojos. — Un par de minutos, te escuché decir groserias —dijo con una risa de complicidad— Supe que no fue Mabel ya que Dipper siempre la regaña por ello —adquirio caminando junto conmigo a mi escritorio del laboratorio.

Mire hacia el aérea donde estaba el portal hace algunas décadas, estaba lleno de piezas por aquí y haya junto con esa cinta amarilla que indicaba peligro. La zona la habíamos cerrado con candado aún que el vidrio Anti balas con vista a él seguia intacto. —¿Ford sabe que estás conmigo? —pregunte guardando la caja del arma bajo mi escritorio ante la poca atención de Stan en lo que hacía.

— No que yo sepa, salió hace un rato con Dipper y planean regresar en un par de horas. ¿Necesitas ayuda con algo? —pregunto mientras yo tomaba un matraz Erlenmeyer y colocaba tres miligramos de la rara sustancia.

—Si me puedes traer mis gafas de laboratorio sería un alivio. Tienen más aumento que mis lentillas —conteste haciéndole notar que siquiera me moleste en usar los anteojos.

Se limitó a sonreír e ir por ellas aún que dudo que esté enterado de dónde las dejé. Comencé a colocar todo en un tubo de ensayo para llevarla a una centrífuga (aparato de laboratorio que gira mezclando sustancias a la perfección) y después comprimiendolas en una píldora que al ser colocada en el arma y ser disparada, era lo suficiente fuerte para deshacerme de ese malhechor.

Guarde todo y por primera vez en unos días pude respirar en paz.

— ¿Que hiciste el día de hoy? —pregunto Ford mientras comíamos todos juntos en la cocina.

—Solamente leer..

— ¿Stan cuido de ti? —pregunto tomando mi mano— últimamente lo noto distraído.

—Él me fue de mucha ayuda hoy. Había libros que no podía alcanzar —sonrei mirando hacia la sala donde se encontraba el jugando con Mabel y Dipper a mazmorras, mazmorras y más mazmorras. Era igual a CCY+C pero está vez en versión española donde los personajes eran de origen un poco más raro.

— Eso espero. Hoy Mansón y yo encontramos más conecciones de la cueva de Bill y extrañamente la estatua ya no está en su lugar —comento llegando a asustarme un poco— suponemos que alguien la robó —termino sin demaciado interés.

—Si... Era de esperarse —adquiri bebiendo de mi jugo un poco asustada.

El momento se acerca, él estará listo pero yo siquiera se si podré estar moviendo me para entonces.

Esa misma noche revise el correo ya que alguien al salir de aventura todo el día se olvidó de hacerlo. Tome entre varios papeleos de publicidad los resultados de mis análisis.

Tome con un poco de precaución de que nadie me viera y comencé a leerlo. —Joder... —maldije tomando mi encendedor y quemandolos.

Otra maravilla de la vida.