(Zoe)
Hace dos días que Enzo no aparece por las clases. No podía dejar de pensar que era porque estaba con Mónica.
-Vaya mierda –se quejó Shaun, que estaba sentado a mi lado en un banco del campus tomando unos refrescos- estoy cabreado. Vaya que irse de luna de miel con un chico que no es su novio.
Shaun no paraba de pincharme con ese tema, yo ya había desistido de corregirle.
-¡Aquí estáis chicos! –Dijo Troy acercándose a nosotros y sentándose entre nosotros- tengo noticias frescas.
-¿Noticias frescas? No creo que nos vayas a impresionar –le pico Shaun.
-Estoy seguro de que sí que pueden sorprenderte. Esta noche Enzo va a comprometerse.
-¿Qué? –preguntamos sorprendidos Shaun y yo al mismo tiempo.
-No pude ponerme en contacto directamente, pero le hable a Jeni, su hermana, que incluso me invito a la fiesta de compromiso.
¿Va a casarse con Mónica? No me lo podía creer. Todo estaba pasando demasiado rápido.
-Ese bastardo... no está satisfecho con irse de luna de miel que ahora tiene que dar una fiesta y todo –murmuro Shaun antes de preguntarme- ¿Podría ser que Zoe está embarazada?
-¿Qué rayos dices? –le grite.
-Calmaros –interrumpió Troy- Quien se va a prometer con Enzo es Mónica, la hija del director.
-¿Qué? ¿Entonces no es con Zoe? -pregunto Shaun con repentina alegría- ¿de verdad?
-Ahora que lo dices ni estoy seguro -bromeo Troy- que yo sepa es con Mónica.
-Entonces... así que ese bastardo no ha hecho más que juguetear con Zoe a la que llevo de luna de miel ¿y ahora se va a casar con Mónica? -dijo Shaun en voz alta para nadie en especial. Me estaba empezando a preocupar que se le hubiera ido la cabeza- Zoe me dejó por Enzo ¿pero ahora la han usado como un juguete y la han dejado? no dejaré que se salga con la suya.
Shaun empezó a caminar.
-¿A dónde vas? -pregunto Troy siguiéndole- espérame
-No voy a dejar que ese bastardo lo haga -dijo Shaun sin dejar de caminar.
Yo los deje ir. Me senté en el banco y no pude evitar que mis lágrimas se escaparan. ¿Prometidos? sí que ha ido lejos.
Nunca te dejare ir. La frase de Enzo se hacía eco en mi cabeza. ¡Qué mentiroso!
*****
Esta noche era la fiesta de compromiso de Enzo y Mónica. Yo está sentada en la cama pensando en si ir o no.
Soy tan estúpida ¿por qué debería ir? yo seré la que salga herida si voy. Ellos se verán genial y felices juntos. No, no puedo ir... pero aunque me duela debo ir.
Me levanté y saqué la ropa que había jurado no usar mientras estaba aquí y sacar a la Zoe que había enterrado antes de ir hacia la fiesta lo más deprisa que pude.
Su casa real más grande de lo que recordaba. Su padre es una persona muy importante, realmente viven en un palacio, no una casa. El jardín es incluso demasiado grande. No me puedo imaginar que sea tan rico.
Ahora que estoy frente a su casa me doy cuenta que pertenecemos a dos mundos totalmente diferentes. Es como la distancia entre el cielo y la tierra.
Estoy loca ¿para qué he venido? me di media vuelta como para irme.
Pero un grupo de chicos que no conocían se acercaron a mí y amablemente me invitaron a entrar.
Me quedé al fondo del salón justo en el momento en el que Enzo bajaba las escaleras con Mónica agarrada de su brazo. Estaban vestidos de punta en blanco, Enzo relucía ya por sí solo. Soy tan estúpida.
Todo el mundo está vitoreando y deseándoles lo mejor.
Nuestros ojos coincidieron y salí por el pasillo. No debí de haber entregado ni venido.
-Zoe -me llamaron cuando llegue al jardín.
Me giré y Enzo estaba en el umbral acercándose.
Me di cuenta de que esto no podía pasar por lo que seguí mi camino.
-Espera -dijo cogiéndome por la muñeca haciendo que frenará- ¿Por qué huyes?
-Es tu fiesta de compromiso...
-Como si eso fuera la gran cosa. Ni siquiera es importante para mí.
-Mientes.
Escuchamos voces de gente que se acercaba. Enzo me abrazó y nos escondió a los dos tras un muro de arbustos.
Mientras se podían escuchar voces que hablan sobre lo bien que se veían Mónica y Enzo cómo pareja. Eso hacía más consciente la diferencia entre Enzo y yo. Ni pertenezco a este mundo.
-Deberías volver a la fiesta -le dije intentando soltarme de su abrazo sin éxito.
-No.
-Debes volver...
-¿Por qué no nos escapamos juntos? -me pregunto dejándome un beso en la cabeza.
-¿Qué? ¿Hablas en serio? -me giré entre sus brazos para mirarle a la cara.
-¿Crees que estoy de broma? -dijo poniendo sus manos en mis brazos, mientras me miraba fijamente sin broma en la mirada.
No. No puede ser. Gente como él nunca se escaparía ni nada parecido a eso.
-¿No me crees? -dijo acariciando mi mejilla.
-Pero... pero tú eres perfecto a ojos de otros ¿Cómo vas a hacer eso?
Como respuesta me dio un pequeño beso, que me tomo desprevenida. Termino antes de que pudiera hacer algo al respecto.
-Antes de conocerte nunca pensé en una decisión tan temeraria. Vámonos -dijo ofreciéndome su mano.
¿Lo estaba diciendo en serio? ¿De verdad quiere huir conmigo? ¿está dispuesto a renunciar a todo por mí? ¿Estoy lista para esto? ¿Puedo renunciar yo a todo por él y huir con él? miles de preguntas me invadieron pero... si, si podía. Mientras Enzo este conmigo estoy dispuesta a ir a cualquier parte.
Le cogí de la mano y empezamos a encaminarnos a la salida.
Justo cuando estábamos en el umbral de fuera alguien me agarró de la otra mano, haciéndonos frenar.
-¿A dónde vais? -pregunto Shaun que me tenía agarrada- ¡Bastardo! ¿Así que has elegido huir con Zoe? ¿Abandonas tu compromiso con Mónica por ella?
-¡Te he dicho muchas veces que esto ya no es asunto tuyo! -se interpuso Enzo.
-¡Cállate! no puedo entregarte así a Zoe. Si quieres elegirla, hazlo ahora.
-Suelta a Zoe.
-¿Y si no lo hago?
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Zoe
RomanceDe alguna manera acabe estudiando en un internado masculino, disfrazada como mi hermano, para averiguar qué era lo que había llevado a mi hermano a querer suicidarse.