𝔄𝔤𝔲𝔞 𝔭𝔞𝔯𝔞 𝔇𝔢𝔪𝔬𝔫𝔦𝔬𝔰

Capítulo 22

—Creo que me veo genial. —Dice Thomas bajando las escaleras.
Traía puesto la pijama azul de John y sus pantuflas de abuelo.

—Todo un angel de Victoria's
Secret— Sonrió mientras guardo un par de cosas en las alacenas.
Sabia que Juliet había elegido el juego de cubiertos porque se veían muy delicados y costosos.
Ella tenía buen gusto para la decoración al contrario de mi o John.
Toda la casa en realidad tenía su toque.
—Estoy cansada. ¿Quieres que nos acostemos ya?— Él sonríe pícaro.

—Seguro ¿Dónde me acomodo?— Pregunta.

—Tienes la cama de John o el sofá. — Me encojo de hombros.

—¡No dormiré en su cama! me quedaré en la sala. —Dice sentándose sobre la barra. Tan jodidamente bello.

—Solo espero que no estés sobre el sillón cuando llegue Jul porque te matará  —Comento. —Iré por una manta.— Digo subiendo.
Cuando bajé él ya estaba instalado.

—Llámame si me necesitas. Buenas noches Cassy— Dice cubriéndose.

—Buenas noches Thomas— Respondo volviendo a subir.

No me gustaba la cama, se sentía rara, diferente
Demasiado fría y enorme. También faltaba la compañía del gato odioso al que no había encontrado para traer.

La habitación era oscura y silenciosa aunque podía
oir los sonidos de mi alrededor.
Los autos en la calle, los perros de los vecinos y el bullicio normal de un pueblo.

El celular sonó y me asustó.

》¿Cómo estás? Siento mucho lo de hoy. Pero si sirve de algo te veías sexy con esa mierda encima.

《¡Ya lo creo! Aun asi, no es tu culpa tener por novia a una total perra.

》¡No es mi novia! ¡Demonios no! Ella apareció ahí y se pegó a mi mesa ¡Escapé de ella justo tras ustedes!.

《No me des explicaciones. No las pedí. ¿Y qué si te interesa ella?

》¿Crees que llevaría a Samanta la psicópata por un refresco? ¿Enserio? Si no esta desnuda sobre mi, no me interesa. ,

《Gracias por esa imagen mental Tristán, ¡Eww! Te veo mañana en clases.

》¿Quieres que pase por ti?

《No, esta bien. Descanza.

》Te veré pronto Cassiell.

Dejé el celular sobre la mesa de noche y me dispuse a dormir.
Mañana seria un largo día.

Pasada las siete de la mañana me levanto para desayunar pero luego recuerdo que no había nada que comer.
Thomas duerme aun, así que voy a despertarlo se veía tan bello.
Me recordó a las noches de pijamada de niños.

—Buenos días Cassy. —Me dice aun con los ojos cerrados. —¿Cómo dormiste?—

Increíblemente había tenido una buena noche sin pesadillas ni terrores nocturnos asi que estaba de buen humor.

—Bien Thomas. ¿Y tu?— Pregunté.

—Creo que este sillón es mejor que mi cama. —Responde.  —Me iré antes que sea tarde ¿Quieres que venga por ti? ¿O te espere así vamos juntos?— Pregunta poniéndose sus tenis blancos.

— No Thomas, estoy bien. Vé, me terminaré de alistar.  Gracias por quedarte... en verdad te lo agradezco. 

—Para eso están los amigos Cassy, bien te veo luego.  — Dice antes de cruzar la puerta.