Mafia's Blood

Capitulo 20

—Dímelo todo.—sentencio KyungSoo, obligando a un confundido JongIn a tomar asiento sobre la cama de su propia habitación.

—¿De que hablas? ¿A que te refieres con todo?.—pregunto confundido, mirándole desde abajo ya que el mayor se había quedado de pie.

—Todo, la razón por la que JunMyeon apareció esa noche que te comportaste como un completo idiota.—JongIn hizo una mueca, mirando a otro lado con molestia.

—¿Que quieres que te diga? No es nada del otro mundo, me comporte como un idiota y mi hermano llego a detenerme, eso es todo. ¿Me puedo largar?.—KyungSoo lo volvió a sentar cuando intento levantarse, empujándolo por sus hombros para lograrlo.

—De nuevo estas siendo un imbecil, ¿que cojones te pasa?.—se quejo, mirándolo más que molesto.—Cuando te pregunto porque eres así te molestas conmigo, cuando nos conocimos no eras así, últimamente eres un completo cretino, saliendo a donde te de la gana, haciendo lo que te da la gana y acostándote con quien te da la gana.

—¿Y cual es el problema en eso? No eres mi esposo o algo así para quejarte al respecto.

—Tienes razón, no lo soy.—JongIn se sintió descolocado, esperaba que aquella acusación le cerrara la boca.—Pero soy tu amigo, prácticamente vivo en esta casa como para preocuparme lo suficiente por ti como tu maldito esposo. ¿Cual es tu jodido problema?.—separo cada palabra en su pregunta, harto del comportamiento de quien se suponía era su mejor amigo.

—No es tu maldito problema.—contestó de la misma manera lenta y molesta, mirándole con la misma ira que el más bajo le miraba.—Yo puedo hacer todo lo que me da la gana, es mi vida, es mi problema nada más.

—Si, probablemente sea así, ¿pero esta mal preocuparme por ti? ¿Por que tienes que ser tan cruel conmigo?.—esta vez KyungSoo le miro con tristeza, suspirando.—No te conozco, no eres mi mejor amigo, no eres el chico que tomo mi mano el día que nos conocimos cuando yo iba a morir de vergüenza por haberte golpeado en la mejilla.—JongIn toco por instinto sus mejillas, frunciendo más el ceño antes de mirar abajo.

—No, no lo soy, cambie.—y era cierto, había cambiado, sus gustos y manera de mirar a KyungSoo había cambiado, admitía que siempre le había gustado, pero hacia mucho tiempo que no era el mismo gusto inocente.—Y si no te gusta, la puerta está allí.—señaló con su mano la puerta de su habitación, recibiendo una mirada indignada de KyungSoo. JongIn se levanto de nuevo, dispuesto a abrir la puerta, aunque eso significará perder a la persona que más amaba.

Aunque de nuevo fue sentado por sus hombros, pero esta vez lo que lo impedía levantarse era el cuerpo entero de KyungSoo, ya que se había sentado sobre sus piernas, dejando las propias a los lados de su cuerpo. Sus nervios se dispararon y solo pudo observar asombrado al más bajo quien le miraba bastante serio.

—No soy estupido JongIn, yo lo veo todo, y se muy bien la razón por la qué haces todo esto.—gruño al final, jalando la camisa del menor entre sus manos con molestia.—Solo estoy esperando en que tu hagas el segundo paso, pero pareces muy lento y miedoso para hacerlo.

—¿Disculpa?.—se quejo el moreno, saliendo de su trance para sujetar con fuerza la cintura del contrario.—¿Me acabas de llamar cobarde?.

—Si, porque lo eres, puro jugando y siendo un miedoso en toda esta mierda.—JongIn gruñó, dando la vuelta para estampar al más bajo contra la cama haciéndolo jadear, tomo sus muñecas, presionándolas a cada lado de su cabeza, dejándolo atrapado a su merced y con sus rostros muy cerca.

—No juegues con fuego KyungSoo... Tu no sabes de lo que soy capaz...

—Lo se...—susurro, sin borrar su seria expresión.—Tu sabes lo mucho que me gustas, yo se lo mucho que yo te gusto, lo mucho que te gustaría tenerme aquí justo como me tienes ahora y hacerme todas y cada una de tus sucias fantasias.—JongIn gruñó de nuevo, porque el mayor lo estaba tentando demasiado.—Hazlo...