քʟaʏ ✿ƒ ɦʊռtɛʀs {°•IDENTITY V•°}

mon compte

Los rayos del sol habían recibido a jack en el rostro,y se removió,incómodo y arrugando su rostro,para luego moverse donde la luz no le molestara más.

Abrazo a joseph,pensando en que era una cálida almohada pequeña y suave.

Caliente

Con cabello

Y que soltaba gruñidos

Se despertó de golpe al darse cuenta de donde se encontraba,y soltó rápidamente a su amado.

Este,con una hermosa expresión pacifica reflejada en su hermoso rostro blanquecino,y con su cabello y ropa desorganizada.

Sus esbeltas y largas piernas estaban al descubierto,con una almohada de algodón entre ellas.

Lo primero que vino a su mente fue que tal vez sintió calor durante la noche o incomodidad,y termino de esa manera.

Se dedicó a examinar su alrededor

Todo se hallaba gris a excepción de ellos,las cámaras estaban encendidas de repente.

Significaba que joseph iba a despertar,cosa que hizo sonar una alarma incesante en su cabeza.

Trato de levantarse,con cuidado,logrando su asaña con gran éxito,pues,su amado conde dormía como una roca.

Como aquel cuento que leyó una vez,de la bella durmiente,mientras mataba en Londres.

Sonrió para sus adentros,y se dedico a escribir lo que para el sería la ultima carta que daría al fotógrafo que inundaba su cabeza y robaba su corazón.

No sabía que escribir,no sabía como despedirse.

Se sentó,frustrado y con un letargo suspiro junto a joseph,sin removerlo mucho de su cálido sueño.

Pensó,pensó y pensó,más las palabras no llegaban a su cerebro.

Solo podía observar la maravillosa obra de arte que era su amado.

Tanto se le fue el tiempo en ello,que no se dio cuenta cuando este se despertó,mirándolo directamente.

Tras un momento de choque de miradas,se exasperó y se levantó,pensando en escapar y disculpandose innumerables veces con él.

Un bufido detuvo sus disculpas,y una delgada y blanca mano halo la suya hacia la cama,haciéndole sentarse nuevamente.

- ¿a donde vas?,tonto... - volvió a bufar,molesto y removiéndose dejando lugar en la cama,mientras acariciaba con su pequeña mano la de jack - aún es muy temprano para preocuparse por el mundo... - le dijo suavemente en un tono bajo y dulce,que derritió una de mil veces más a su pobre corazón.

Un ataque al corazón,dijo su mente,haciendose reír así mismo.

Jack acarició la mejilla de joseph con sutileza,despacio y con cariño.

- no quiero que me odies aun más de lo que ya lo haces,mon compte - sus palabras,lejos de ser frías y severas,eran frágiles y adoloridas,acompañadas de un tono dulce que solo lo hacia mas amargo.

Joseph lo miro,expectante,con su rostro imperturbable y los ojos bien abiertos.

Una mirada que no decía nada,y la cual le asustaba y estremecía,pues esta podía traer consigo cualquier tipo de reacción.

Joseph fruncio el ceño,disgustado y aun con el somnio atacando su cuerpo.

¿que decía este tonto enamorado a estas horas de la mañana en un día libre?

¿no sabía que le había perdonado sus bromas la noche anterior?

O...era eso lo que recordaba

Lo miro un rato más,cambiando de un ceño fruncido a uno confundido,para luego enrojecer al darse cuenta de que en realidad nunca dijo nada,al menos no sin estar embriagado.

No pudo evitar reírse en voz alta al darse cuenta de porque jack estaba así.

se sentó y tomo su rostro,halándolo a la altura del suyo y sonriendole con ternura.

Su expresión confundida y deprimente le pareció algo divertida,y su rostro rojo aún más.

Beso su mejilla,allí,en la comisura de sus labios,para luego acariciar ambas mejillas con sus pulgares desnudos.

- ¿como odiaría al tonto que me enamoró con cartas y apodos en francés,mon amour? - le hablo con cariño y en bajos desibeles auditivos

Los ojos de jack brillaron,y sus mejillas se encendieron,mientras su corazón golpeteaba su caja torácica despiadadamente y su sonrisa movía su cara en un gesto feliz.

Oh,¿como expresar cuanto le amaba?

Lo besó con amor,haciendo que volviera a caer recostado y quedando a medias sobre él.

Tras dedicarle varios besos en los labios,procedió a besar el resto de su rostro y sus mejillas,haciéndolo reír.

esa mañana,las risas,los te amo y el amor,fueron palabras cortas para su felicidad.

Pero lo bonito no dura para siempre,y tampoco es tan fácil de conseguir.