las rosas son rojas
el cielo es azul
la sangre es un líquido
que corre por tu espada,
mʏ ʟoνє
att: tɦɛ ʀɛaքɛʀ
Advertencia: los personajes no me pertenecen,crédito a sus autores
Estos pertenecen a un juego para móviles y pc.
Nombre: identity v
Nota de autor: pueden escuchar la canción durante el capitulo,es recomendable ver la letra.
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ƒíɑҍӀҽ
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Por fin
Por fin podría salir de allí.
La palabra libertad era un poco extraña en su situación,pero era lo que sentía.
Por sorprendente que pareciera,el confiaba en las palabras de aesop,pues parecía su parte con cordura.
Y si realmente salia de allí vivo...entonces,no lo culparía,pues así no era él.
Sentía que pagaba un castigo del pasado,y estaba bien por él,aunque doliera,aunque se caía a pedazos,su corazón están intacto,bombeante de amor y esperando.
En la mañana,aesop lo había soltado con algo de temor,y dudas,seguramente pensaba que iba a tratar de matarlo por todo lo sucedido.
Joseph no le haría nada malo,el karma se lo pagaría como pagaba con él por cada superviviente derribado.
Fue guiado por la mano desnuda de el embalsador hacia un baño,el cual había preparado para él como una de sus próximas miles disculpas.
No pensaba decir nada,no lo haría.
Se despojo de la camisa que lo cubría entrando al agua y calmando por completo sus adoloridas articulaciones.
Extrañaba tanto su baño...
Aesop estaba sentado de rodillas en un rincón del baño,con la cabeza baja como niño castigado.
Joseph sonrió con pena,le daba pánico que estuviera enamorado de el de una manera tan tóxica,pero ver a alguien de esa manera triste le daba aun más pánico.
- ...,aesop - decidió por fin llamarlo,haciendo que levante la vista - ¿me ayudas? -estiro su brazo hacia su espalda llena de marcas.
Aesop pareció confundido un momento,con aquella cara de "¿sera estocolmo?" que solo un criminal podía poner.
Sacudió su cabeza,y se acerco,ayudando a joseph a atar correctamente su cabello en una coleta alta,y limpiando su espalda con cuidado de no lastimarlo.
Se disculpaba con el cada que se quejaba un poco por ardor,estaba realmente arrepentido.
Al terminar con el baño,aesop le dio su propio espacio para que se vistiera tranquilamente,y le dijo a tropezones que si necesitaba algo,lo dijera.
Solo se limitó a asentir y a esperar a que saliera del baño.
Rato después,se decidió a salir,mirando todo limpio y menos oscuro que antes.
Un maravilloso trabajo proveniente de alguien que embellecía cadáveres.
Miro a carl en la puerta por donde siempre salia,esperando.
Se acercó despacio,pues tampoco quería precipitarse por movimientos bruscos,pues sus piernas le dolían tanto como los brazos.
En aquella mía entrada,aesop cubrió sus ojos con una venda,disculpándose nuevamente y diciéndole que no se asustará,pues su escondite quería dejarlo como lo que era,un escondite.
Dio varios pasos tontos en el transcurso de la salida,pero finalmente sintió el sol rosar su pálida piel,y el viento mover su cabello.
Se sentía tan bien respirar aire fresco.
Caminaron un poco más,y luego aesop sacó la venda de sus ojos.
Miro los árboles a su alrededor,las aves,los pequeños rayos de sol que entraban por las hojas.
Simplemente perfecto
Caminaron en silencio durante un largo rato,estaban bastante lejos de las mansiones,en la parte prohibida del bosque,y eso le ponía muy ansioso.
Supo que llegaron cuando empezó a ver los jardines,y las dos enormes mansiones asomarse a la vista.
- por aquí - el embalsador se abrió paso entre los arbustos frutales hacia los jardines,y el le siguió.
El muro no estaba,como recordaba,pero había un ambiente sombrío muy extraño.
- l-lo siento,seguramente están constipados porque desaparecimos del mapa unos días... - se disculpo otra vez
Las rejas de las mansiones estaban cerradas,nadie afuera y los jardines marchitandose por el poco cuidado de los inquilinos.
Pero no impedía que fueran vistos.
Desde las rejas de la mansión de cazadores hasta la de los supervivientes vieron a luchino y a norton,quien se tiro abajo la reja de los supervivientes tras varios días de intento con sus imanes.
El estruendo que causo la reja alerto a todos,y los asusto a ellos.
- ¿aesop? - lo miro dudoso un rato,mientras salia por la reja que derribó
Luchino desde la otra parte,vio a joseph,y salio corriendo hacia adentro llamando a los demás,los cuales estaban en los apocentros sin ganas de hacer nada.
El avistamiento fue tan conmociona río,todos saliendo como locos de las dos mansiones.
Se estaba poniendo tan nervioso,se sentía débil.
Ah...como desearía tener sus cámaras en ese momento para calmarse.
- ¡¡CARL!! - el mercenario se abrió paso entre la multitud de supervivientes,lanzándose a abrazar al embalsador y tumbándolo al suelo en el proceso.
Sonrió viendo la escena,zarandeos y preguntas,lágrimas y discursos de la responsabilidad.
escucho unos leves pasos detrás de él,y se giro despacio.
Allí detrás de el,se encontraba lo que más extrañaba,a quien más deseaba ver.
Se le fue el aire y las lágrimas se amontonaban en sus ojos,sus piernas exigiendo que se dejara caer para descansar.
- mon amour... - se acerco más a él,cada paso más rápido que el anterior.
Fue recibido por aquellos largos y agradables brazos que tanto amaba,se sentía tan bien regresar a casa.
Se puso a llorar,de verdad lo había extrañado tanto que dolía.
Jack seco sus mejillas con sus pulgares una y otra vez,y repartió suaves besos amorosos por su rostro,hasta terminar varias veces en sus labios.
Lo abrazo una vez más,y al rato se le unieron geisha,luchino y su chang,sus mejores amigos.
Los tres estaban llorando como él,de verdad no había nada mejor que estar en casa.
Lo único malo,es que cuando terminara la conmoción,tendrían que hablar todos los presentes sobre lo ocurrido.
