Se Queda Conmigo (Vondy)

CAPITULO. 10.

Abro la puerta de la habitación, sus miradas se posan en mí, lo que veo me impacta, llevo años en esta banda y pensaba averlo visto todo.
Hugo tiene a Dulce de los hombros, ella llora desconsolada, la sangre de su labio y su ojo algo inchado me alertan.
Una infinita rabia se apodera de mí, me abalanzo sobre él y se lo quito de encima, lo tiro a suelo y subo a orcajadas encima de él, golpeo su cara una y otra vez, la cólera me ciega, miro hacia mi izquierda y veo a Sara abrazada a Dulce.
Un golpe cae sobre mi mejilla, cosa que me hace apartar la mirada de ellas y continuar machacandolo como una pequeña hormiga, me incorporo y pateo sus costillas, la fria mano de Dulce se posa sobre la mia.

-Ya basta Ucker, lo vas a matar. -llora desconsolada, nose si porque no quiere que lo golpee o por que teme que tenga problemas con la justicia. Hugo cae inconsciente.
Paso el dorso de mi mano por encima de mi labio superior, respiro fuertemente y decido parar.
La miro y ella me mira.

-Sara, ve  buscar a Any y Poncho, la fiesta terminó. -Sara obecede.
Nos quedamos viendonos.

-¿por qué lo hiciste?. -yo no respondo solo me limito a abrazarla.-Ese hombre me queria matar... -me separo un poco de ella y agarro su mentón.

-Shh... Yo estoy aquí ¿okey? Nada te pasará. -acabo de darme cuenta que no cumpliré mi promesa, tengo dos dias para llevarla a la casa de las afueras y poder comercializar con ella.

Poncho nos interrumpe entrando por la puerta seguido de Any y Sara.
Dul de nuevo comienza a llorar, y el abrazo de Anahí no se hace esperar.

-Otra vez ocurrio, Any, ya nose que hacer.

¿Cómo?  ¿Otra vez? ¿Ese inbecil la pego mas veces?

-Hay amiga, tu ya sabes cual es la solición pero tu te niegas a denunciarle.

Un silencio se hace, Hugo comienza a despertar.

-Hugo, le marqué a Simon para que venga a recojerte. -el asiente y se levanta de el piso lentamente.

-Tu, Ucker, me las pagarás. -arrastra las palabras, tiene la cara ensangrentada y camina tocando su estómago.
-Adiós Dulce. -tira un beso a el aire, mirando a Dul, intento ir hacia él, pero Alfonso me lo inpide.
Sale por la puerta.

-Any, ¿podemos hablar? . - Anahí asiente y se pone en pie para después venir junto a mí. -¿Porqué dijo Dulce otra vez? ¿La a golpeado antes?. -ella traga saliva, respira hondo y responde mis preguntas.

-Sí, todo el tiempo que está con él la golpea. -baja la mirada. -La tiene amenazada, por eso no se atreve a denunciarlo, y yo temo por ella, cualquier día de una golpiza la mata Cris. -me informa entre sollozos. La abrazo.

-Tranquila Any, ya estuvo, no le pasará nada más.

Ver a mi amiga asi me hunde demasiado, miro hacia arriba y puedo ver a Dulce que está  detras de Any.

-Gracias de nuevo Cristopher, nose que hubiera pasado sino llegas a entrar... -me mira fijamente a los ojos, esta llena de tristeza. Any voltea y la abraza, y yo me uno a el abrazo.

-No te preocupes Dulce, cualquier hombre en mi lugar hubiera echo lo mismo. Me despego de ellas. -Ya será momento de irnos.
Entra Poncho a la habitacion en la que nos encontramos.

-Ya se fueron todos.

-Cris, dormiremos aquí, la casa es pequeña la acomodemos para pasar la noche de hoy, pero creo que nadie querrá dormir en esta habitación. Quedan dos habitaciones más, si quereis podemos dormir Dul y yo en una y ustedes en otra.

-No te preocupes Any, quedaros vosotros, yo me voy. -me dispongo a irme pero Dulce me detiene.

-Cristopher, porfavor, no te vayas. -su mirada me ipnotiza,¡Qué tiene esta chava que me hace comportarme como un idiota!

-Okey, me quedaré, pero no pienso dormir con Alfonso Herrera en la misma cama, me niego. -sueltan una carcajada.

-Si quieres... Podemos dormir juntos. -las palabras de dulce me solprenden notablemente.

-No creo que quieras, yo en la misma cama que una mujer, me acuesto con ella, no duermo. -el rubor de sus mejillas me hace ver que se ha avergonzado, rio y Any y Poncho se unen a mis carcajadas.

-Podre correr el riesgo.

-Andale no mas, mi chava, ok, pues les dejamos solos. Su habitacion es la de la derecha de esta, la nuestra esta al final del pasillo caualquier cosa ya saben, pero llamen antes de entrar. -reimos.

Una vez en nuestra habitación, me quito mi ropa y quedo en boxers, ella me mira de arriba a bajo.

-¿Te gusta lo que ves?. -sonrrio

-Te recuerdo que ya lo ví antes, ¿o acaso se te olvidó que dormí en tu casa?. -realmente se me olvidó por completo, por eso aceptó dormir juntos, demonios juega con ventaja. Sonrrio

-No muñeca, no se me olvidó. -me acerco a ella y la pego a mí. -Y... ¿A ti se te olvidó? -abre su boca esperando mi beso pero me alejo de ella. Suelta un pequeño gemido de desesperación casi inaudible.

Ella también sabe jugar, se quita sus altos tacones y continua quitandose el vestido. ¡Oh Dios que pechos!
Mi amigo crece.
Ella se introduce en la cama.

-¿Piensas quedarte ahí viendome, o vas a meterte en la cama?. -ella sonrrie muy sexy y yo me meto en la cama sin decir nada. Ella voltea para quedar frente a mí.

-Gracias, de veras. -me abraza, siento su aroma inundar mis fosas nasales, su respiracion se acerela y mi erección crece.

Miro su cara y subo en ella para después comenzar a besarla, bajo mis besos por tu mentón, sigo por tu cuello, gemidos de placer salen de su garganta, mi vulto roza su feminidad, el fuego que hay entre nosotros llena la habitación.

-Dulce, te deseo. -ella jadea.

Mis besos bajan por sus senos, los lleno de pequeños moretones fruto de el deseo que siento por ella. Le quito su brasier y supciono sus pechos.
Ella agarra mi pelo y me guia hasta su boca, me besa apasionadamente, me suelta y me mira a los ojos.