Tras salir de el edificio y subir en mi auto busco mi celular en la guantera de este. Miro en mi agenda ¿A quien puedo marcarle? El primer nombre en mi agenda de contactos es "Aany" el recuerdo de cuando ella misma guardo su numero en mi celular con donle "a" para que su nombre sea el primero viene a mi cabeza y me saca una sonrisa. Primero le marcaré a ella, las demás vendran después.
-Holaaaaa Crissss.-alarga el final de las palabras entusiasmada por mi
llamada. -Ya me enteré, pero quiero oirlo de tu propia boca ¿Andas con Dul?.-grita emocionada.-Sí,si, si ya lo sabes Any...¿porqué me haces esto?-respondo después de una sonora carcajada.
-No que tu eras el inalcanzable Cristopher Uckerman, mujeres de una noche, sin besos, nunca en tu departamento y siempre con protección. -rie al otro lado de la línea para después cortar la risa de golpe. -Como lastimes a mi amiga te mato Cristopher Alexander Von Uckerman ¿me oiste? No quiero ninguno de tus trucos con ella, se que todavía no tuvieron relaciones. Cris, es virgen, así que anda con cuidado.-me alerta sonando como una mamá regañona. -Prometeme que la cuidarás.
-Te lo prometo Any ¿tú como has estado? Y... ¿Que hace el loco de mi amigo?
-Ándale como cambia de tema el niño.-rie. -Estamos bien los dos, Ponchito aquí está dormidito junto a mí, lo amo tanto...
-Hay Any, ya cállate que enpalagosa...
-Ya se que le permites que te diga Cris... y solo me permitias a mí, me voy a poner celosa eh.-se burla de mi y me proboca risa. -Te parece si quedamos los cuatro, nose... vamos al cine... de pachanga... no sé que hacer todavia, ahorita le hablo a Dul, y en dos horas nos vemos, no permito una escusa si es lo que estas pensando Cris...-¿como podia conocerme tan bien? Mis planes de ir a "La Escondida" se vieron fastidiados por mi amiga la intensa.
-Esta bien güera.-fin de llamada-.
Apoyo mi cabeza sobre el volante, verla de nuevo en tan solo dos horas... suspiro resignado. No tengo de otra. Manejo hacia mi departamento.
Me doy una ducha y me tumbo sobre mi fresca cama. El portafolio con los datos de Dulce se encuentran sobre la mesita de noche a mi izquierda, lo abro y veo el dibujo que se le cayó el primer día que la ví, después de el dibujo, está su imagen, paso mi dedo pulgar sobre su rostro cuando suena mi celular.
Un número no agendado está en la pantalla.-¿Si? ¿Quién es?.-silencio al otro lado de la línea. -¿Aloo?
-Cris...-¿es ella o me estoy volviendo loco?
-¿Dulce, Dulce, eres tú?
-Sí Cristopher, soy yo. ¿Qué pasó? Cuéntame por favor...-suena nerviosa.
-Ya está solucionado, no tengo nada más que decir.-trato de sonar lo más tranquilo posible. -Solo que en diez minutos paso por tí, no sé si ya Any platicó contigo.
-Sí, ya me dijo, fue ella quien me dio tu número. En diez minutos nos vemos pues.-corta.
¿Por qué aveces tan cariñosa y aparentemente preocupada y otras tan cortante? Definitivamente no comprendo a las mujeres.
Termino por vestirme y ir en busca de ella en mi moto guzzi de estilo retro.
Estoy a punto de llegar, la diviso a lo lejos esperándome en la puerta de su casa. Freno en seco y saco mi casco cual no me permitia verla del todo bien, esta hermosa, un pantalon vaquero ajustado, unas botas que llegan hasta sus rodillas y una preciosa chupa de cuero, tremenda...
Bajo de la motocicleta y Dulce la mira alucinada acariciandola.-Es preciosa...-susurra.
-¿Te gusta?
-Sí, esta muy bonita.-sonrrie
-¿Quieres manejarla?.-le tiendo las llaves pero niega levemente con la cabeza.
-No, no tengo permiso de conducción y... si te soy sincera me da pavor manejar, eso te lo dejo para tí.-me mira sonrriendo, tomo su mano para darle una vuelta y poder verla mejor.
-Estas bellísima.-sus mejillas se tornan de un color rojo que le hacen verse aun mejor si cabe. -¿Me extrañaste noviecita? -reimos a la vez.
-Any se creyó todo ahora hay que finjir un poco delante de ellos y ya! En unos dias decimos que no funcionó y que prefirimos ser amigos.
¿Porque sus palabras suenan tan frias?
¿Tanta dificultad le supone hacerse pasar por mi novia? Suspiro cansando.
Vuelvo a subir en mi motocicleta y espero a que ella lo haga.-¿No piensas subir?-pregunto tras esperar unos segundos y ver que no se inmuta.
-Ayudame inbecil, ¿acaso crees que puedo hacerlo sola?.
-Sin Insultos Dulce.-tremenda paciencia hay que tener con esta niña. -Ven.-tomo su mano y le ayudo a montar.
Arranco el motor y Dulce se pega a mí como si de un imán se tratara. Me rodea con sus brazos de tal forma que casi me inpide manejar.
Casi vamos llegando, un semáforo en rojo nos inpide avanzar,miro a mi derecha y quedo realmente sorprendido, incredulo paso mi mano por mis ojos y vuelvo a mirar, no, esto no me puede estar pasando.
Comienzo a tomar y expulsar el aire fuertemente.
Nuestras miradas se cruzan, desde un auto azul marino , mi madre, acompañada de su amante ,me miran con ¿miedo,asombro? No puedo descufrar bien que hay en su mirada.-Cristopher.-pronuncia mi madre.
Siento salir humo por mi nariz de lo furioso que estoy, el semáforo cambia a verde por lo que me aguanto las ganas de partirle la cara a ese hombre. Acelero como si no hubiera un mañana, cambio el rumbo y ahí es cuando me doy cuenta de Dul.
Grita mi nombre una y otra vez atemorizada y me ruega que pare, pero no puedo parar, la ira corre por mis venas.-¡Cristopher, me estoy lastimando, por favor, para!.-grita.
Y como si de una imposición se tratara, bajo la velocidad automáticamente hasta pocos metros después, frenar.
Nuestras respiraciones son agitadas, siente miedo y yo rabia.
Me paro de la motocicleta y ayudo a Dulce a hacerlo.
Grito y voy hacia un árbol cercano,ya que en la zona en la que nos encontramos no hay mas que árboles, golpeo mi puño una y otra vez contra éste. De repente no sé ni como lo hizo, pero Dulce está frente a mí con su espalda en ese mismo árbol y lagrimas en los ojos.-Ya no más Cris por favor...-agarra mi mano llena de sangre y la lleva cerca de sus labios.-¿Ves lo que hiciste? Ya no más.-sus lagrimas son más abundantes, ver su rostro me hace entrar en sí y la abrazo para tranquilizarla.
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Se Queda Conmigo (Vondy)
Teen FictionHistoria narrada por Cristopher Uckerman, un hombre de una peligrosa banda mexicana, en la que trasportan drogas, hacen carreras ilegales, prostituyen a mujeres, y entre esas cosas, tiene una importante "misión" que deberá cumplir, secuestrar a Dul...