CAPÍTULO.42.

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Siento un ligero movimiento.

-Muñeco despierta, son las seis de la mañana, tienes que irte.

-Mmm...-gruño volteando.

-Va, mi amor, levanta.-sigue moviéndome. Abro los ojos lentamente y me giro para mirarla.

-Solo si me das un beso.-digo para después volver a cerrar los ojos.

Escuchó una carcajada, y noto un pequeño golpe en mi brazo con la almohada. -Eso no hacía falta que me lo pidieras nenso...
Pone su mano sobre mi cara y noto su cercanía, abro los ojos, agarró su nuca y la pego a mí con rapidez uniéndonos en un beso apasionado, el mejor beso de buenos días que pude recibir. -Nos vemos después si?-dice pasando su suave mano por mi cara.

-Claro, mi amor, paso a buscarte, ¿a las siete?-sonrie asintiendo.

-Okey-le doy un pico y se levanta de la cama.

Después de que me rogara que me fuera varias veces, al fin accedí, ya que nos podían ver sus papás, me sacó por la puerta trasera con cuidado de que nadie nos viera, fui hasta mi auto y manejé hasta mi depa.
Ahora me encuentro sentado en uno de los taburetes de la cocina mirando mi celular, tengo llamadas de Rafael, y eso solo se puede significar una cosa, quiere cobrarse nuestro trato. No me importa, con tal de que Dulce sea libre. Sin ni siquiera devolverle la llamada decido darme una ducha y ir a verle.
Treinta minutos después me encuentro frente a la puerta de su despacho, me dispongo a entrar cuando notó una mano en mi hombro. Volteo.

-Ya estás aquí, cuando quieras nos vamos...-dice Thailor confirmando mis sospechas.

-Todavia no sé nada, no hable con Rafael.-digo tendiendo mi mano para chocar con la sulla.

-Pues ya me dices algo, Bro, pero cuanto antes nos vayamos mejor...

-Okey, ahora te veo...

Entro en el despacho y por su rostro noto que me esperaba.

-Sí, te escuché llegar...-dice antes de que le pregunte si me esperaba.

-Pues tú me dirás para que soy bueno.

-Cristopher, esto es algo grande, te vas ya mismo, en la azotea te espera el jet, tú y Thailor se me van a Colombia. Estamos negociando con los colombianos para traer la coca en submarinos, en cada uno entran cinco toneladas y media, ya sabes lo que eso significa, ciento sesenta y cinco millones de dolares...

Interrumpo. -Como les vas a pagar eso...

-Cristopher, para eso vas, tienes que hacer que nos la den en ochenta y dos millones ,la mitad del precio de venta.

-¿Pero te has vuelto loco? Desde cuándo haces tú esta clase de negocios, jamás te la venderán a ese precio-digo comenzando a alterarme

-Desde que tú me hiciste perder tanto dinero con la niña de la que te encaprichaste-grita y golpea la mesa poniendose en pie. -Es eso, o le dando a cualquiera de mis hombres que vayan a por tu muchachita y la lleven junto a él Romano.

-Aah-grito frustrado tirando una silla al piso. -Esto más bien es un castigo no? Pues está bien, acepto -doy un golpe sobre la mesa y tiro la otra silla.

Rafael sonríe -Marcame al llegar.

Yo no contesto y salgo del despacho.Busco a Thailor y sin despedirme de nadie, ni cojer nada subo directo a la azotea para irnos a Colombia.

Una vez en el avión es cuando me doy cuenta, mierda, dejé mi celular en la cocina, no puedo contactar a Dulce para avisarle de que no podré verla hoy, ni hoy ni lo más seguro mañana tampoco...
Suspiro pasando mi mano por mi cabello.

-Que paso? -pregunta Thailor.

-No traje mi celular...

-No hay bronca, usa el mío...-respomde amablemente tendiendo su celular.

-Ah pues sí-sonrio cojiendolo -Gracias.
Miro la pantalla recordando que no se su número y maldigo una y mil veces. Decido marcarle a Poncho.

-Eh, Thailor para que soy bueno.-responde Poncho.

-Bro, soy Ucker, ¿ya te enteraste de que me tuve que ir?

-Sí, algo escuché pero a poco ya te fuiste...

-Sí, según Rafael no hay tiempo que perder y con esto le "pago" lo de Dul...

-Es una locura...-dice mi amigo

-Lose... Pero no tengo más remedio, oye, necesito un tremendo favor... Me dejé mi celular en el depa, y no me se el número de Dul... Puedes avisarle de que no estaré, que intentaré volver mañana...

-Pues eso va a estar complicado brother, estoy con Any en la casa de sus padres y pasaremos aquí toda la semana, el problema está en que Any con el embarazo se volvió olvidadiza y también dejó su cel en casa y yo no tengo grabado su número.-suspiro frustrado... No sé qué hacer.-Oye dice Any que sabe el número de casa de los padres de Dul... ¿Te sirve?

-Sii, intentaré ponerme en contacto con ella a como de lugar, nada más aterrizar.

Guardo el número en el celular, me despido de mis amigos y le doy las gracias a Thailor de nuevo por prestarmelo.
Lo que queda del viaje me la pasó durmiendo.

Llegamos a Colombia, con solo bajar del jet se nota a que vinimos, nos esperan unos doce chavos vestidos de negro, uno delante y los demás a tras, asiento levemente al verle y el responde del mismo modo, después cuando estamos más cerca, tiende su mano, yo la tomo con gusto moviéndola de arriba abajo, sonríe, subo la mirada, y yo también sonrió...

-Soy Emmanuel, mucho gusto pues-dice sin soltar mi mano.

-Ucker-respondo.

-Lo sé, Rafael me habló muy bien de ti...

-Pues discúlpeme pero a usted  ni lo mencionó- digo haciéndole reír.

-También lo sé, no me gusta que se hable de mí si no estoy presente y eso tu jefe lo sabe muy bien-responde intentando dejarme de inferior a él.

-No es mi jefe, es como mi Padre y muy pronto los negocios los llevaré yo, así que te conviene que nos llevemos bien...

-Ah pues estamos en las mismas parcero, porque es mi papá el que anda en éstas por ahora, pero yo le juro que más pronto que tarde seré yo quien me maneje con todo esto-reimos

Después de un rato hablando con Enmanuel, decidimos quedar mañana con su papá ya que se hizo bastante tarte.

Ahora Thailor y yo vamos a una habitación que rentamos para pasar la noche, estoy deseando llegar para marcarle a Dul... Solamente espero que sea ella quien coja el celular y no el amargado de su papá...

Se Queda Conmigo (Vondy) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora