Capítulo 30

2.1K 99 49
                                    



Son las cuatro de la mañana del lunes.

Camino por la casa, cerrando puertas y persianas.

Me quedo cinco minutos en el cuarto de las chicas, mirando la fotografía que hay de ellas dos enmarcada en una estantería. Me alegro que no estén.

Apago la luz y cierro la puerta.

Voy a la cocina, me preparo un bocadillo, recojo todo y salgo por la puerta.

Llamo a un taxi y voy camino al aeropuerto.

El avión sale a las seis y media.

Al despegar cojo con fuerzas los reposabrazos cerrando los ojos y parece que sienta la mano de Marizza sobre la mía, reconfortándome. Pero sé que nunca más va a suceder.

Intento despejar la mente y descansar, pero sé que aun falta lo peor. Convencer a Franco y a mi madre para que me dejen quedar en Madrid y que entiendan el porqué.

.....................

Entro en clase con Luján, cabizbaja. He estado todo el fin de semana tratando de reconfortarla. Es muy duro y con su abuela están planteándose vender la casa e ir a vivir a Mendoza. Yo no quiero que se vaya pero entiendo que estén barajando la posibilidad. Yo lo daría todo por poder estar otra vez al lado de mi madre.

Ya en clase miro la mesa de Pablo vacía. Miro la cara de Tomás pero me devuelve una mirada seria. No le doy importancia y me centro en la profesora.

Casi al final de la mañana Michi interrumpe la clase y llama a Luján diciendo que tiene una llamada importante, ella y yo nos miramos a la cara extrañadas mientras se levanta y sigue a Michi afuera del aula.

Al rato, vuelve con una gran sonrisa y yo me muero por saber las noticias pero estamos con la profesora Carmen y no quiere oír ni un solo ruido, así que me aguanto las ganas y espero a que termine.

Al acabar la clase me giro hacia ella expectante.

- ¿Qué ha pasado?.

- Me ha llamado mi abuela. Dice que la han llamado del Ministerio. Han aprobado el traslado. A finales de esta semana ya estará aquí, en Buenos Aires. –Me dice con lágrimas en los ojos-.

........................

Aterrizo en Barajas después de once horas de vuelo y cojo un taxi hacia la casa de Franco mientras compruebo que tengo un mensaje de Tomy en el móvil.

<<Buen viaje, viejo amigo. He visto como le han dado la noticia a Luján. Esta semana su madre ya estará en Buenos Aires. Al final lo has conseguido. Cuando ya estés instalado espero tú llamada. Espero que todo te vaya bien es esta nueva aventura y encuentres la felicidad>>.

Pago al taxista y entro en la casa.

El servicio me abre la puerta y me informa que Franco está en su despacho.

Al entrar en él Franco se sorprende y se levanta a recibirme.

- ¿Se puede saber que haces tú aquí?. Menuda sorpresa. Tú madre está en casa de tus abuelos, pero ven, pasa, siéntate, estarás cansado del viaje. ¿Quieres algo?.

- No gracias. Mejor que ahora no esté, quisiera hablar contigo primero.

- Vaya, por tu tono y esta visita deduzco que es importante. Cuéntame. –Ofreciéndome asiento y sentándose en su sillón, detrás del escritorio-.

...........................

Acompaño a Luji a su casa y recojo mis cosas para irme ya que quiero dejar a su abuela y a ella a solas para que lo celebren. Al final todo ha salido bien. Supongo que con tantas peticiones de Luján al final le han hecho caso. Estoy feliz por ella. Cojo un taxi y vuelvo a casa.

Al otro lado del océanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora