parte 25

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La cena en aquel lugar que traía beneficios a algunos pero dolor a otros ya había acabado, sin embargo seguían ahí, sentados, sin hacer ruido alguno, el incómodo silencio reinaba en el "comedor", nadie se atrevía a decir nada, hasta que, luego de algunos minutos de ese silencio sepulcral, alguien "nuevo" entró a dicho lugar, el mismísimo Guido

-Buona notte, como están estos giovane carino- dijo el italiano acariciando la cabeza de uno de los presentes

-Bien...hasta que llego el Fuchi- hablo el joven Lopez con una sonrisa formada en su rostro

-Il mio cognome è Mussi, insolente- dijo esbozando una sonrisa mas que forzada

-Guido Missi, ¿así te llamas? ¿no?- las palabras que salían de la boca de Julio hacían enojar cada vez mas a su raptor, y mas era el enojo al escuchar a todos los menores presentes tratar de no reír por las palabras del Lopez

-Me llamo Guido MUSSI- el enojo en su interior solo iba en aumento

-Mi llimi Guido...- Julio se vio interrumpido por un fuerte golpe en la mesa, cosa que hizo que todos se sobresaltaran

-!Zitto marmocchio¡- grito Guido, -solo...callate, lleven los al dormitorio- hablo dirigido a los mismos tres hombres que los habían llevado a aquel comedor

Los menores se levantaron de sus respectivos lugares, y de la misma forma en la que entraron, salieron, Julio a un lado de su mejor amigo, y siendo Alex el ultimo

-Espera- hablo nuevamente el italiano, Alex se detuvo al escuchar la voz de Guido

Mando, Dave y Julio se percataron de que Alex se había detenido, así que decidieron detenerse para voltear a verlo

-Ustedes sigan, estaré bien- dijo el mayor de aquellos cuatro dirigiéndoles una sonrisa, los otros tres se voltearon para seguir su curso a la "habitación", una vez estuvieron mas lejos volvió a hablar, sin la mas mínima intención de ver a Guido a la cara -¿Que quieres?-

-Me gustaría hablar- dijo el italiano

-Habla con alguien más, yo no tengo nada que hablar con alguien como tu- finalizo para volver a caminar, después de algunos minutos llego con el resto de jóvenes -Ya llegué-

-¿Que quería Guido?- pregunto Mando mientras seguía caminando para entrar a la habitación

-Nada importante- dijo Alex siendo el ultimo en entrar, atrás de el la puerta fue cerrada

Julio, Dave, Alex y Mando se dirigieron a lo que, se supone, es su cama, para descansar, aunque a decir verdad, sabiendo que es por lo que tienen que pasar todos los días, el descanso no era demasiado

-Oye Alex, ahorita que lo pienso, no sabemos nada de ti- habló el pequeño Corcega

-Si cierto, no nos has dicho nada de ti- continuo el joven Lopez

-Pues...tengo dieciséis años, y antes de estar aquí...no hay nada que contar, vivía con mis padres y mi hermano, un día mientras iba a la escuela llegaron unos hombres y me subieron a una camioneta, fue todo muy rápido, y ahora estoy aquí- finalizo Alex

-Y...¿Extrañas a tu familia?- pregunto Dave -Digo, todos aquí lo hacemos- dijo mientras una lágrima escapaba de su ojo

Alex soltó un suspiro antes de volver a hablar -Claro que los extraño, tengo cuatro años sin verlos...daría lo que fuera por verlos otra vez-

-Yo también- hablo el ojiverde, todos los que estaban ahí habían sido separados de sus padres, y soñaban con salir de aquel horrible lugar, volver con sus padres y abrazarlos, pero Julio conocía perfectamente el sentimiento de que era imposible volver a ver a su madre, abrazarla, darle un beso...mirarla a los ojos y decirle lo mucho que la amaba, todos esos sentimientos llegaron a el  haciendo que unas lágrimas también salieran de sus ojos

-Creo...-hablo Mando en un suspiro -Que todos quisiéramos ver a nuestros padres-

-Abrazarlos- dijo Alex

-Darles un beso- siguió Dave

-Decirles que los amamos- finalizo Julio, para estos momentos, los ojos de los cuatro chicos y de algunos mas que habían escuchado, se cristalizaron, a pesar de la personalidad única de cada uno, su origen o su edad, los sentimientos por sus familias eran algo que todos tenían en común

Y así, con algunas lágrimas por recordar a sus seres queridos fuera de ese lugar, todos se acostaron en sus respectivas camas

-Dave- hablo el Lopez viendo a su amigo desde su cama

-Si- contesto el mencionado

-¿Pu...puedo...-

-Ven- dijo Dave moviéndose a un lado de su cama, Julio se levanto y fue a recostarse a un lado de su amigo sin decir nada -Se lo de tu mamá, y no se que decirte, pero aquí estaré para ti, lo juro- en sus años como amigos, Julio solo había compartido sus emociones con Dave, no con nadie mas, ni siquiera con sus hermanos

-Gracias- finalizó mientras mas lágrimas salían de sus ojos, y así ambos se quedaron dormidos, en verdad extrañaba a su madre

Pero, a decir verdad, ¿Quien no desearía volver a ver a alguien que formó parte de tu vida? Ver a quien te dio la vida

.......

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