Cap. 54

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—Hiperémesis gravidica —sentenció Dorian.

—¿Puedo pegarle con esta botella de agua? —pidió Kat entrecerrando los ojos a él.

—Tus síntomas bajarán poco a poco. No es muy normal que se hayan prolongado tanto, pero ya que tus niveles de hormonas deben estar por los cielos, es posible que algunos síntomas de prolonguen al primer trimestre.

—¿Era tan difícil?

—¿Va a morir o no? —preguntó Geneden sin ánimo de andarse por las ramas, mientras afinaba su guitarra... Creo.

Dorian la miró mal.

—No. Solo va a pasarla mal un rato más.

Todos habían querido asistir a recibir a Jaenne, la nueva niñera. En realidad sólo había pisado la casa un par de minutos mientras Liam y yo le mostramos la casa. Liam quería que se familiarizara con el ambiente y le había dejado claro que debía pulir sus movimientos en Krav Magá.

Al principio Jaenne se negó argumentando que conocía bien el tema, Liam entró en acción y la derribó dos veces sin darle ninguna oportunidad de liberarse y ponerse de pie. Al parecer herir su orgullo era la forma adecuada para hacerla ceder, porque, aunque maldijo entre dientes, aceptó las clases que Liam le ofrecía con profesores profesionales.

Últimamente Liam era todo paranoia. Cualquier ruido fuera de casa lo hacía tensar la espalda y ponerse en guardia, aunque fingiera que no pasaba nada. Me ponía los pelos de punta cada vez que volteaba hacia afuera con esa mirada calculadora.

—Tengo cupones de descuento para "Tasty-Tart" —entró Irina emocionada—. ¡Son gratis!

Jaenne había vuelto a la universidad después de retar a Dorian a otro combate cuerpo a cuerpo. Iniciamos las apuestas y programamos la pelea recreativa para después del nacimiento de los trillizos, algo así como una bienvenida a la familia. Una pelea de médicos. Interesante.

Ambos se veían emocionados y decididos a patear al otro, por lo que nadie pudo intervenir. Tampoco es que alguien lo hubiera intentado. En tiempos tan sombríos como esos, cualquier fuente de diversión era para disfrutarse.

Katy resopló.

—En Tasty-Tart todo es gratis.

Dorian y Geneden asintieron.

—Pues yo no conozco Tasty-Tart. —Irina puso las manos en la cintura y nos miró fríamente—. Y he ganado cupones de descuento.

—¿Cuando vencen? —preguntó Quen fingiendo interés mientras fruncía el ceño en torno a la guitarra desafinada de Geneden.

—¡Hoy!

Dorian resopló.

—Buena suerte con eso.

Irina le golpeó el hombro y yo negué con la cabeza. No era tan difícil ser amables de vez en cuando.

—El tal Miranda vendrá a ser la sombra de Luce mañana —nos recordó recorriendo nos a todos con la mirada—. ¿Por qué no disfrutamos de su último día parcialmente libre y vamos por una tarta?

La verdad es que cuando cargas a tres seres dentro de una bolsa de carne repleta de líquido no tienes mucho ánimo para salir al mundo exterior y caminar varias manzanas con la espalda curvada hacia atrás para mantener el equilibrio y no irte de bruces al asfalto, pero Irina tenía un punto y no parecía tan malo.

—Creo que odia que lo llamen "Miranda". Dijo que era Luke —aclaré—. De todas formas tengo que pasar a la tintorería por un abrigo que manché de salsa la semana pasada.

Lucky Love (LR #3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora