10.
El maratón de Glee había salido mejor de lo que esperaba. Geneden se nos unió cuando llego la pizza y Liam no se durmió con las canciones de Lady Gaga ni fruncía el ceño cada vez Rachel tomaba el control y comenzaba a cantar. Y yo había descubierto (después de darle tantas vueltas) que mi personaje favorito era Sue Sylvester.
Además toda aquella situación de Wendy mejoró notablemente cuando pude deshacerme del vestido rojo de Katy y cambiarlo por mi short amarillo y una de las camisas "viejas" de Liam.
—Jesse, por favor detente —suplicó Geneden con una mano en el corazón—. Rachel te ama, no puedes traicionarla, baja ese huevo.
El hombre mas guapo que había aparecido en la serie se encontraba en un encrucijada: sus amigos lo presionaban para que se uniera a ellos y atacara con huevos de gallina a su vegetariana ex novia.
—No lo hará —aseguré tratando de tranquilizar, mas que nada, a mi cuerpo y mente.
—Si lo hará —murmuró Liam antes de llevarse a la boca su pizza sin piña.
Que aberración.
—No, no lo hará, él la quiere —aseguré—, todo comenzó como un juego pero ahora la quiere.
—Baja ese huevo Jesse —suplicó Geneden.
Cuando Jesse St James estrelló el huevo sobre la cabeza de Rachel, Geneden y yo contuvimos el aliento cerrando el puño al aire y bajando la cabeza con decepción.
—Ya sabía —murmuró Liam sin pena ni lástima por nuestros corazones recién rotos.
—Que aberración —solté.
—¿Por qué? —preguntó Liam con la mirada fija en la pantalla de televisión—. Era demasiado obvio.
—Yo hablaba de tu pizza sin piña —señalé logrando únicamente que me viera mal.
Geneden rió. —No presiones Luce, hace unos meses ni siquiera podía sentarse a comer veinte minutos completos.
—Lo que me recuerda —Liam paró en pausa al musical—. Tú y yo tenemos un asunto pendiente —aseguró tirando de mi mano hacia arriba, dejándome de pie frente a él, donde pude comprobar que ni aún después de más un año de conocerle había logrado perder ese efecto deslumbrante sobre mí.
—Por favor no empiecen a babearse la cara —suplicó Geneden cubriéndose la cara con ambas manos.
—¿Recuerdas la pelea que tuvimos bajo la lluvia hace unos días? —preguntó mientras tiraba de mi mano hacia una bonita puerta de caoba.
Asentí a pesar de que no podía verme.
—¿Es en serio? Las parejas normales se besan bajo la lluvia y ustedes solo... ¿pelean? —Geneden me miró de arriba a abajo antes de añadir—: No me sorprende.
Cuando Liam abrió la puerta encontré una enorme habitación rodeada de espejos y barras, con el piso completamente libre, ocupado únicamente por un enorme colchón rojo.
—¿Vamos a practicar ballet? —pregunté con el ceño fruncido—. Porque desde ya te digo que una de las razones por las que odio los tacones del cinco es porque me obligan a caminar con los dedos. Yo renuncio —mostré las palmas.
La mano de Liam me detuvo del abdomen antes de enrollarme con un solo brazo contra su pecho.
—No vamos a practicar ballet —susurró Liam detrás de mí antes e que se le ocurriera la magnífica idea de girarme con velocidad en una vuelta que terminó estampándome de frente contra su pecho—. Vamos a pelear.

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Lucky Love (LR #3)
Humor√Incendiar una propiedad "accidentalmente". √Estrellar el auto de tu jefe contra una tienda de artesanías. √Irrumpir en la boda de tu jefe y oponerte en pijama. √HECHO. •Casarte con el amor de tu vida. •Tener trillizos. •Morir y volver a la vida. •S...