- S M O O V E -

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-PABLO NERUDA -

Algunas veces encuentras en la vida una amistad especial: ese alguien que al entrar en tu vida la cambia por completo.
Ese alguien que te hace reír sin cesar; ese alguien que te hace creer que en el mundo existen realmente cosas buenas.
Ese alguien que te convence de que hay una puerta lista para que tú la abras. Esa es una amistad eterna...
Cuando estás triste y el mundo parece oscuro y vacío, esa amistad eterna levanta tu ánimo y hace que ese mundo oscuro y vacío de repente parezca brillante y pleno.
Tu amistad eterna te ayuda en los momentos difíciles, tristes, y de gran confusión.
Si te alejas, tu amistad eterna te sigue.
Si pierdes el camino, tu amistad eterna te guía y te alegra.
Tu amistad eterna te lleva de la mano y te dice que todo va a salir bien.
Si tú encuentras tal amistad te sientes feliz y lleno de gozo porque no tienes nada de qué preocuparte.
Tienes una amistad para toda la vida, ya que una amistad eterna no tiene fin.

- No es que crean en ti , es reflejarles que crees en ti mismo-

*MELANY*

LLevaba toda la mañana llamando a Ashley por teléfono para recordarle que pasaba por su casa a recoger unos libros que me había dejado días anteriores en su habitación pero no había manera alguna de conseguir que me cogiera las llamadas.

Seguramente seguiría durmiendo.

Si fuera por Ash se pasaría el día durmiendo, tirada en la cama o viendo pelis de Netflix en el sofa, sino fuera por mi esta chica no saldría nunca a ninguna fiesta.

Nunca entendí como era posible que siendo dos personas tan diferentes acabáramos congeniando tan bien y entendiéndonos a la perfección.

Hace unos años, cuando Ash se mudo a Denver vivimos en el mismo vecindario y al principio ella se juntaba con Catherine y sus súbditas, de hecho cuando nos encontrábamos por el barrio intentábamos no cruzarnos la palabra ni si quiera mirarnos , sin conocerla pensé que era una más de ese grupito.

Los meses pasaron y la situación no cambio mucho , de hecho aumento la tensión que había entre nosotras, las típicas bromas que ahora gasta a los demás, hace unos años todas iban hacia mi persona.

Pero de la noche a la mañana, con los acontecimientos de Luke y Catherine la relación entre nosotras cambio.

Ambas nos convertimos en las apestadas y decidimos hacer piña en contra de ellos.

Lo que ninguna se imaginaba era que esa simple e inocente alianza iba a acabar en una relación casi de hermanas.

Ambas éramos totalmente diferentes pero sabíamos equilibrar la balanza.

Estacione el coche delante de la casa de Ashley y toque varias veces al timbre con la esperanza de que no tardara mucho o me iba a resfriar, el invierno en Denver era bastante frío.

Por suerte la puerta se abrió dejando ver al hermano de Ashley.

Nicholas O'Pry.

- ¿Necesitas algo ?- su voz sonaba más grave de lo normal, lo más seguro es que se acabara de levantar-

Oh mierda si tenía el mismo carácter que Ash cuando se levantaba podría darme por muerta.
Sino aparezco ya saben donde pueden encontrarme.

Deja de fantasear Melany.

-Había quedado con Ash para recoger unos libros que me deje el otro día - frunció el ceño y miro hacia mi coche - ¿Pasa algo ?

- ¿Ashley no estaba contigo ? -negué rápidamente - me agarro del brazo y me introdujo dentro de su casa-