One Shot Gay

Wosani

Narra Valentín

Faltan pocos días para el cumpleaños de Dani, y con los chicos queríamos hacerle una sorpresa, aunque para eso le tenía que decir una pequeña mentira.

Estabamos Manu, Teo, Dani y yo en mi casa, nos habíamos juntado después de unos cuantos meses. El rubio hablaba animadamente con Teo, mientras yo los miraba atentamente, tener a los chicos acá me daba a entender que era el momento perfecto para decirle a Dani la gran noticia.

Valen: Dani, amor -dijé mientras me sentaba al lado suyo en el sillón, cuando dejo de hablar con el menor- te tengo que contar algo

Dani: Que paso bebe? -pregunto preocupado mientras se daba vuelta quedando frente a frente conmigo-

Valen: Me salió un viaje a España, para hacer unas presentaciones -dije bajando la mirada- me tengo que ir el 4 y no vuelvo hasta el 8 de agosto.

Narra la escritora

La sonrisa que tenía Dani hasta hace apenas unos minutos desapareció de su carita, dejando lugar a una expresión de completa tristeza.

El menor odiaba festejar sintiendo. años, pero este año iba a ser diferente para él, ya que tenía pensado pasarlo con su novio y amigos, reírse y tomar hasta no poder más, pero sus planes cambiaban.

Dani: Que bueno amor -dijo mientras abrazaba al mayor- me alegro tanto por vos, me encanta saber que sos feliz haciendo lo que tanto amas -la voz del rubio salió cortada en la última frase-

Valen lo tomó de la cintura, haciendo que este se siente sobre su regazo, mientras escondía su cara en el cuello del mayor.

Valen: Estas bien amor? -pregunto, sabía perfectamente que el menor se estaba aguantando las ganas de llorar, y por más que le dolía muchísimo hacerle creer que no iba a estar para su cumpleaños, era necesario para el plan que tenía en mente-

Dani: Si Val, estoy bien -susurro para después alejarse del mayor- voy al baño

El rubio subió rapidamente las escaleras, dejando a sus amigos y novio solos en el salón.

Mateo: Ayy va a llorar -dijo mientras intentaba levantarse-

Manu: Para Teo, vos no vas a ir -dijo mientras tomaba las manos de su novio-

Mateo: Por que no? Es mi amigo -dijo indignado-

Valen: Por eso mismo, es tu amigo y cuando lo veas llorar vas a soltar la lengua, con tal de no verlo así -dijo mientras pasaba sus manos sobre su cara- al igual que voy a hacerlo yo si lo veo de esa forma -soltó el mayor de los tres, frustrado-

Manu: Por eso voy a ir yo, mientras ustedes se quedan acá

Manu se levanto, dejando un pequeño beso en la mejilla de su novio, y una suave caricia en el pelo de su amigo, para después dirigirse a la escalera, por la cual se había ido el rubio.

Manu: Rubio -dijo llamándolo- donde te metiste -el menor estaba frustrado-

Dani abrió la puerta del cuarto, tirandose a los brazos de su amigo, necesitaba un fuerte abrazó y los de Manu le hacían bien al alma, aunque no se comparaban con los de Valen, pensó el mayor de los dos

Manu: Ay enano, enano -dijo dejando pequeñas carícias sobre su espalda-

Dani: Me odio Manu -dijo mientras se separaba para mirar a su amigo a los ojos-

Manu: Por que te odias Dani? No tenes nada por lo que odiarte. -soltó mientras dejaba pequeñas carícias en las mejillas de su rubio amigo-

Dani: Tendría que estar feliz por Valen, va a ser presentaciones haciendo lo que más le gusta y yo en vez de estar contento por él estoy encerrado en su pieza, llorando porque se va -dijo para después hacer un puchero- pero no puedo no llorar, pense que iba a poder pasar mi cumpleaños con él, arrancarlo y terminarlo juntos, como hicimos en el suyo, pero parece que no va a pasar.

Manuel escuchaba a su amigo y las ganas de gritarle que era mentira, que Valen iba a pasar su cumpleaños con él, crecían cada segundo un poco más.

Dani: Soy un egoista de mierda -dijo-

Manuel tomo entre sus brazos a su amigo, mientras este volvía a llorar, mojando la remera del menor.

Manu: No sos egoista por querer pasar tu cumpleaños con tu novio Dani, pero por más que no estén juntos ese día, van a estar los otros 364. -Dani negó con la cabeza- enano yo se que vos queres pasarlo con él, pero esta vez no se puede, no te va a amar más o menos por no estar para tu cumple.

Dani: Ya se que Valen me ama igual, pero me duele que no pueda dejar de hacer su presentación ni un día, por mí -dijo mientras se separaba- pero esta todo bien Manu, yo estoy feliz por él, te lo juro que me encanta verlo disfrutar hacer lo que tanto ama, solo que duele un poquito.

Dani salió del cuarto dejando a Manuel con un gran nudo en su garganta, su amigo estaba sufriendo mucho por esa pequeña broma, pero sabía también que este la iba a disfrutar mucho más.

En el pasillo de esa casa se encontraban Valentín y Mateo escuchando la conversación de sus novios, el mayor sentía una fuerte presión en su pecho al escuchar las cosas que Dani le dijo a Manu, quería mandar la sorpresa a la mierda y contarle a su novio que no se iba a ir.

Mateo: Ni se te ocurra -susurro en el oido del ojiazul-

Valen: No puedo verlo así Teo, me cago en la sorpresa, no me importa nada con tal de no verlo llorar -decía el mayor desesperadamente, intentando entrar a su propia habitación-

Mateo: Escúchame una cosa -dijo mientras lo tomaba fuertemente del brazo para después dirigirse a la planta de abajo- entiendo que no te guste verlo llorar y todo eso, pero estuviste mucho tiempo haciendo esta sorpresa Valen, su cumpleaños lo van a pasar juntos, como él quiere y vos vas a poder contarle lo que planeaste para los dos. Aguanta unos días amigo

Valentín se quedo pensando en las palabras de menor, mientras en la parte de arriba de su casa, Manuel y Daniel se dirigían a la escalera para volver con ellos.

Mateo: Manu, vamos? -pregunto una vez que ambos chicos llegaron al living-

Manu: Si amor, vamos -los más jovenes saludaron a sus amigos, para después dirigirse a la salida de aquélla casa-

Mateo: Espero que Valen pueda aguantar y darle la sorpresa.

Manu: Ojalá

En la casa del mayor, se encontraban la otra pareja, el ojiazul estaba pensando en lo último que le había dicho Mateo, mientras Dani pensaba que el mayor estaba tan callado porque se fue y no se alegro por él. La culpa de ambos crecía en su interior, sin saber que los dos estaban teniendo pensamientos equivocados con respecto a lo que el otro estaba sintiendo.

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