One Shot Gay

Wosani I

Narra Dani

Lo último que recuerdo fue una cegante luz encontra, antes de impactar contra, lo que suponía era, un camión.

Los gritos de los presentes, la fuerza de los bomberos intentando sacarnos del destruído auto, las sirenas de las ambulancias, todo estaba grabado en mi mente, repitiéndose de forma constante.

Cada hueso de mi cuerpo dolía, mis músculos ardían, mi cabeza retumbaba cada vez que alguién hacía un mínimo movimiento.

Llevaba vários días intentando abrir mis ojos, pero nada lograba despergarlos, mis intentos por lograr abrirlos eran cada vez menos.

Me encontraba en un lugar oscuro, donde no había nadie, estaba completamente solo.

Los ruidos de la sala, que suponía era de un hospital, los escuchaba perfectamente, várias personas se habían acercado a hablarme, pero nada podía hacer que mis ojos se abrieran.

Mi mente pensaba que podría hacer para que mi cuerpo reaccione a lo que le pedía, pero no había caso de que eso pasara.

Valen: Hola amor -habló una voz completamente destruida, mientras tomaba mi mano- no puedo creer como estamos acá, vos en esta horrible cama de hospital, con tantos moretones, conectado a esos cables que tanto odias, luchando por tu vida -hizo una pausa- que paso Dani? -un fuerte sollozo se escapó de sus lábios- te fuíste de mi casa prometiendo avisarme cuando llegabas -otro sollozo igual al anterior salió de su boca- me prometiste pasar todo el día juntos, pero nada de eso paso -hizo otra breve pausa- ningún mensaje llegó, no pasamos nuestro día como lo teníamos planeado, nada fue como pensabamos -me dolía, cada palabra que Valentín soltaba me dolia, cada recuerdo que contaba era una fuerte punzada en mi pecho- no te quisiste quedar en casa porque estaba cansado, me besaste de una manera tan tierna y lenta, prometiendo miles de cosas con solamente ese beso, cosas que hoy en día no se si van a poder cumplirse -soltó un suspiró- amor, por favor, quedate conmigo, no me abandones ahora, no me podes dejar solo, no con tantas promesas y sueños por cumplir juntos -sentí una de sus lágrimas caer sobre mi mano- te necesito Dani, te necesito conmigo, por favor, lucha.

Eso fue lo último que escuche antes de caer profundamente dormido, mi cabeza dolía de una forma fuerte, mi pecho ardía y por un momento me olvidé del dolor que tenía en todo mi cuerpo, solo para concentrarme en el de mi pecho.

Los días seguian pasando, Valen venía todos y cada uno de ellos, me tomaba la mano, me hablaba, recordaba momentos juntos, y hasta me cantaba, por mi parte seguía luchando, quería poder cumplir con todo lo que le había prometido a mi ojitos, pero cada vez era más difícil, mi cuerpo no aguantaba más, me dolía todo, me sentía débil, pero todavía no me quería dar por vencido.

Valen: Hola amor -hola ojitos, pensé- ya pasaron dos meses desde el peor día de mi vida, sabes -su voz sonaba cada día más destruída- no hay mejoras en tu cuerpo Dani, cada día que pasa pierdo un poco más la fe de que puedas despertar y no me gusta eso, no me gusta ver como te escapas de mis brazos y no poder hacer nada -un sollozo salió de ambas bocas, aúnque el mío solo sonó en mi mente- me niego a perderte amor, no quiero, no puedo, y núnca voy a poder vivir sin vos, necesito que te recuperes, que vuelvas conmigo, pero tampoco quiero ser egoista con vos, no puedo pedirte que sigas luchando una batalla casi pérdida, no quiero que sigas sufriendo amor, solo quiero poder verte a los ojos una vez más, besarte y después dejar que decidas lo que quieras hacer.

Sabía que se venía una despedida, sabía que no podía seguir luchando, ya no me quedaban fuerzas, por más que intentara y quisiera lograrlo, por él, por mi, por mi familia, ya no podía más.

Pensar en Valentín había sido uno de los motivos por los cuales aguante durante estos dos meses, pero no nos hacía bien a ninguno de los dos esta situación, él tenía que aceptar lo que iba a pasar y seguir adelante con su vida.

Valen, mi amor, mi ojitos, lo único que tengo para decirte es gracias -mi cuerpo y mente se estaban despidiendo de él- gracias por los años de amistad, por los años como pareja, por acompañarme durante una gran parte de mi vida, por ser ese lugar seguro al cual huír cuando todo se ponía feo, y perdón, perdón por no poder cumplir las promesas que habíamos hecho, perdón por abandonarte justo ahora, perdón por hacerte sufrir de esta manera, no te mereces esto, mereces algo mucho mejor, ser feliz, seguir con tu carrera, con tu vida, tenes un talento impresionante, amigos y familia que te bancan en todo, me tenes a mi que siempre voy a ser una parte tuya, este donde este, siempre te voy a acompañar amor, te lo prometí un día y sabes que núnca rompo mis promesas. No creas que no lo intenté amor, porque si que lo intenté Valen, por nosotros, intenté luchar para quedarme con vos, pero ya no puedo ojitos, no tengo fuerzas, estoy débil, me estoy yendo, aúnque no quiera aceptarlo, sólo necesitaba escucharte decir esas palabras para saber que era inútil seguir intentando algo tan imposible.

Los sollozos de Valentín seguían saliendo de su boca, mientras en la oscuridad de mi cabeza, me despedía de él, me despedía de la peor forma posible, me estaba separando para siempre de la persona que más amaba sin poder decirle nada, me estaba yendo, sin decirle lo mucho que lo amaba.

Valen: Dani, con todo el dolor del mundo, así como te pedí que lucharás, hoy te pido que dejes de hacerlo -núnca me había gustado que Valen este mal, no me gustaba verlo llorar, y menos sabiendo que era por mi culpa- ya esta amor, basta, no sufras más, por favor

"No sufras más" me pedía que no sufra, cuando él era el que lentamente se estaba destruyendo. Perdón Valen, perdóname amor

Mis ojos se abrieron lentamente, encontrándose con los cristalinos ojos color cielo más lindos que había visto en mi vida.

Valentín unió sus labios con los míos en un lento y amargo beso, sabiendo que iba a ser el último, sus lágrimas se mezclaban con las mías, mientras su mano apretaba mi mano, entre la suya fuertemente.

Solo dos palabras salieron de mi boca antes de que todo se convierta en color negro.

Mis pulmones dejaron de ingresar oxígeno en ellos, mi corazón lentamente se quedó estático, y lo último que escuché antes de quedarme completamente dormido para siempre, fue un susurré de Valentín

Valen: Yo también te amo Dani, y para siempre -soltó un gran suspiro- descansa en paz mi amor -sus sollozos fue lo último que escuche-

Con un amargo gusto en mi boca, me deje ir, sintiendo una fuerte punzada de dolor en mi pecho.

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Bueno, les estoy haciendo terminar un domingo horrible, perdón por eso amores.

Este capítulo va a tener segunda parte, aunque todavía no se como va a ser, porque estoy entre tres opciones, que no les voy a decir, solo quiero que voten:

A. Sufrir

B. No sufrir

C. Ambas

Es decisión de ustedes bebes.

Otra cosa, no se si hacer otro de Wosani o uno Pauki, toy en duda

Y bueno, me fuí a llorar porque me pego re duro el capítulo.

Las adoro ❤