One Shot Gay

Lit y Paulo

Narra Mauro

Mau: Hola Paulito -dije después de sentarse a su lado- en que andas? -pregunte-

Paulo: Hola Mau -dijó sin despegar la vista de la pantalla de su celular- estoy tratando de pasar este nivel de mierda para superar mi record -hablo clavando unas cuantas pausas entre las palabras-

Mauro: Uhh a ver!! Yo te lo pasó -agarré su celular y un cartel rojo con las palabras "Game over" en blanco aparecieron rápidamente- ups, perdí

Paulo: Te mato -dijo mirandome mal-

Mauro: Perdón Paulito, no fue queriendo -dijé intentando no soltar una fuerte carcajada por la cara de enojo que tenía el rubio-

Paulo ignoró lo que dije, guardo su celular en el bolsillo y se quedo en silencio mirando a cualquier lugar, que hombre que se enoja por cualquier cosa

Mauro: Pau -susurre- Pauli -nada- Paulitooo -todavía no había respuesta- Vamos a tomar un helado? -pregunte- dejame comprarte uno por hacerte perder el juego -dijé con una sonrisa-

Paulo: Vos vas a la heladería a comprar y yo me quedó acá esperándote -dijó-

Mauro: Es injusto eso, vos te quedas acá y yo me cago de calor

Paulo: Jodete, eso te pasa por tocar lo que no tenes que tocar, ahora andate dale -dijo- ya sabes cuales son mis gustos favoritos.

Salí de la casa solo con mi celular y la billetera encima, no tarde más de veinte minutos en volver a la casa de Pau, encontrándolo en el sillón con el control remoto en una mano, mientras buscaba algo para mirar en netflix. Me senté a su lado cuando movió sus piernas dejandome un pequeño espacio, para después apoyar estas sobre mi regazo

Mauro: Tomá -le tendí el pote de helado-

Paulo: Gracias bebe -dijó feliz- arrancamos alguna série? -pregunto volviendo su mirada hacía la televisión-

Mauro: Para que? Si ambos sabemos que no podemos ver series juntos, los capítulos pasan mientras nosotros nos besamos y hasta hacemos el amor, y después cada uno se encarga de verla por separado -solté, para después llevar una gran cucharada de dulce de leche a mi boca-

Paulo: Esa es la gracia genio -dijó obvio- pero no entendes nada

Mauro: Entiendo que quieras que lo hagamos o nos chapemos por horas, pero no es más fácil hacerlo directamente, antes de buscar una serie que ni siquiera importa? -pregunte mirándolo-

Paulo: Es que así le sacas la diversión -soltó haciendo un tierno puchero-

Sonreír estirandome sobre él, para dejar un pequeño pico en sus lábios

Mauro: Sos hermoso -dijé admirando su rostro-

Paulo: Ay, me voy a poner rojito -dijó tapándose la cara con ambas manos-

Solté una leve carcajada abrazándome a su cuerpo fuertemente. Paulo llevo sus manos a mi espalda baja, metiéndolas bajo mi remera negra, para después sacarla tirándola por alguna parte del living, pocos segundos después todas la prendas que cubrían nuestros cuerpos hasta hace algunos instantes se encontraba por distintas partes del gran salón.

Mauro: Me encantas -susurre mirando atentamente cada parte de su cuerpo- no te das una idea de todo lo que me gustas -volví a decir-

Paulo: Y vos no te das una idea de todo lo que te amo -dijó, mientras con mi mano derecha me ponía un preservativo, alistándome para ingresar en su interior-

Con una fuerte embestida me hundí en él, sus uñas dejaron unos largos y ardientes caminos desde mis hombros hasta la parte baja de mi espalda, cuando la punta de mi miembro encontro su lugar sensible. Los ojos de Londra se mantenían cerrados, mientras los mios se encargaban de mirar atentos todos y cada uno de los gestos que hacía cuando una nueva embestida se producía en su interior.

Los jadeos, gemidos y pequeños gritos abandonaban nuestras gargantas, perdiéndose en los labios o cuello del contrario. Los espasmos no tardaron en aparecer, ambos estabamos cerca de correros, Paulo era él que en peor estado se encontraba, la necesidad de alcanzar el climax lo estaba empujando a moverse encontra de mis movimientos, logrando así una penetración más profunda que las anteriores.

Sus gemidos acompañados por el calor que desprendían ambos cuerpos y la sensación de placer que se instalaba cada vez más fuerte en mi pecho me estaban llevando a perder la poca cordura que me quedaba. Frené las estocadas, sentándome sobre el sillón con Paulo sobre mi regazo.

El rubio empezo a dar rápidos saltos sobre mi miembro, generando más placer que antes. Pocos minutos necesitamos para corrernos, Pau apoyo su frente en mi hombro, mientras mi mano derecha acariciaba lentamente su sedoso cabello.

Mauro: Viste que no era necesario la serie -dije después de mantener el silencio por unos cuantos minutos- si de todas formas ambos sabíamos que ibamos a terminar así

Paulo: Pero vos le sacas lo divertido, la serie es una escusa perfecta para terminar haciendo cualquier cosa menos mirarla, pero vos tenes que venir y cagarme los planes -dijo ofendido-

Sonreí abrazándome a su cuerpo de forma fuerte.

Maur: Perdón amor, ahora buscamos una que este buena y sea larga, así podemos hacer cualquier cosa mientras los capítulos avanzan, te parece? -pregunte tiernamente-

Paulo: Si -asenti infantilmente- ahora esta mucho mejor.

Deje un pequeño beso sobre su hombro para después llevarnos escaleras arriba, en busca de un buen baño que nos quitara la transpiración y los restos de semen. Después de una reconfortante ducha y con ropa limpia, volvimos al sillón en busca de una buena série para ver.

Paulo: Uuuh el helado -dijo cuando se sento frente a su pote con un puchero en los labios-

Mauro: El helado ya se hizo sopa amor -dije riendo- a la noche te compro un kilo solo para vos mientras miramos la série y nos besamos de muchas maneras diferentes, queres?

Paulo: Con vos quiero todo -dijo tiernamente-

Ambos sonreímos para después darnos un lento y largo beso, antes de acurrucarnos juntos en el sillón, buscando la próxima série que iba a ser testigo de nuestro amor.

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5/6