Capítulo 20

1.5K 46 0
                                    

Venezia Oviedo.
Jueves 2 de Abril a las 01.00
°
Esteban respira tranquilamente dormido mientras yo, apoyada en su pecho, sigo batallando con lo que me lleva comiendo la cabeza hace días: mi hermano.
Cierro los ojos en un estúpido intento de dormirme pero no lo consigo, suspiro levemente y me aparto del pecho de mi pareja mirandole.
Hace tiempo que dejé de sentir todo lo que sentía hacia este hombre, lo amaba a morir, Esteban, aunque me cueste admitirlo, se aprovechó de mi amor hacia él e hizo todo lo que quiso conmigo hasta que vió que s ele fue de las manos y me dejó embarazada a sabiendas que era mejor lo dejarme sola y que debía aguantar con la familia sin había formado sin quererlo.
Me pongo en pie bajando a la cocina y miro mi teléfono, bebo agua recibiendo una llamada de mi hermano... ¿Por qué me sale esta estupida sonrisa?
~
-¿Te desperté? -susurra.
-No, no podía dormir. -confieso.
-Yo tampoco. -comenta.
-Deberías dormir. -aconsejo.
-Tú también enana. -reprocha.
~
Rio levemente.
~
-No puedo parar de pensar en ti -susurro.
-Yo tampoco puedo. -confiesa.
-Daniel... No puedo ilusionarte, ni aunque estuviera segura de mis sentimientos podríamos estar juntos. -digo.
-Lose, pero necesito saber qué sientes por mi. -susurra.
-Siento que te amo. -murmuro.
~
Escucho su sonrisa al otro lado del teléfono.
~
-¿Qué sientes cuando estás conmigo? -pregunta.
-Que quiero estar contigo, que me beses... Nose, joder, me pongo nerviosa cuando estás conmigo. -explico.
-Pareces una adolescente. -bromea dulce.
-Eso es el problema Daniel, esto no es una cosa de críos, estamos hablando que tenemos familias formadas. -digo agobiada.
-A veces es necesario retroceder el tiempo en el presente para poder disfrutar del futuro. -murmura.
~
Me quedo callada, y tiene razón, por mucha rabia que me dé tiene razón.
~
-Tú y yo jamás podremos formar una familia. -aseguro.
-Ya tenemos dos niñas hermosas. -asegura.
~
Sonrio pero suspiro.
~
-¿Sabes lo difícil que puede ser esto? -pregunto.
-Complícame la vida Venezia, me da igual, quiero estar a tu lado. -asegura.
~
Cierro los ojos y escucho la escalera.
~
-Mañana te llamo, viene Esteban. -murmuro.
~
Cuelgo sin darle tiempo a decir nada más, bebo agua y siento los brazos de mi pareja rodear ki espalda.
~
-Bebé ¿que haces despierta? -pregunta.
~
Encojo los hombros.
~
-No podía dormir. -confieso.
~
Siento su miembro en mi trasero, él sonrie y yo simplemente me quedo callada.
~
-Voy a la cama. -me aparto sin querer hacer nada.
~
Me mira serio y asiente molesto pues sabe que he notado como está... ¿Desde cuando me da pereza hacerlo con mi pareja?

De sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora