Capítulo 34

1.2K 40 1
                                    

Daniel Oviedo.
Lunes 17 de Mayo a las 12.30
°
Mi madre entra en mi despacho, la miro intentando no pagar con ella la rabia que tengo desde las ocho de la mañana, me abraza dulce y me mira.
~
-¿Cómo estás? -pregunta.
-Como siempre, trabajando. -digo serio.
-¿Y mi nieta? -pregunta sentándose frente a mi.
-Echa un torbellino. -aseguro.
~
Sonrie tierna y la miro apartando la pantalla dle ordenador.
~
-¿Se solucionó el problema del abogado? -pregunto.
~
Encoje sus hombros.
~
-Nose, en principio lo he encontrado yo y gracias a Dios tu hermana lo ha vuelto a preguntarme. -explica.
-¿Por qué evitas el tema? ¿Qué ocurre mamá? -pregunto poniendome en pie.
-No tiene importancia. -me mira.
-Si incluye un juicio tiene mucha importancia. -digo frio.
~
Ella me mira, y llaman a la puerta.
~
-¿Se puede? -es Jesús.
-Hijo. -mi madre se pone en pie.
~
Lo abraza, me mira y cojo aire.
~
-Quiero saber que pasa con Venezia mamá, ella no dice nada porque confía en ti pero merece saber que sucede. -digo serio.
~
Mira a mi hermano, este encoje sus hombros y mi madre niega.
~
-¿Jesus lo sabe? -me quedo impresionado.
-Necesitaba ayuda Daniel, estaba perdida y tu hermano estaba conmigo. -excusa.
-¡Venga ya mamá! -alzo la voz.
~
Ella me mira preocupada y me siento en mi sillón.
~
-Dejadme solo. -digo aturdido.
~
Mi madre intenta acercarse a mi pero Jesús la para negando, sale del despacho y mi hermano se acerca.
~
-Todo esta echo un lío. -digo serio.
-¿Qué ocurre Daniel? -pregunta preocupado.

De sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora