El tren ha partido

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Su propio hyung lo había arrastrado a los baños, mientras la presentadora agradecía a los invitados y los animaba a pasar al escenario y la música y los colores se tornaban demenciales. Insoportables. Todo parecía hecho para impedir, para separar. El agarre fuerte solo había disminuido una vez adentro. Odiaba a Yoongi como nunca antes, y a Namjoon y a Jimin quienes lo habían secundado. Los odiaba, también al guardaespaldas que afuera, en la puerta repelía intrusos y él solo gritaba que los jodieran a todos, que no le importaba la prensa, ni una mierda.

"Ya fuiste impulsivo una vez. Y lo jodiste en grande. No lo hagas de nuevo Kook. No por la prensa, ni por nadie. Por Taehyung"

"Lo- lo sabías, lo sabías Yoongi, lo..."

"Lo siento. Me enteré hoy, por la mañana. Tae firmó un contrato con SM"

"SM" repitió sonámbulo

"Todo cierra" dijo Nam, sin dejar de rodearlo fuerte con sus brazos. No estaba seguro si por temor a que se fuera escapar o porque su cuerpo temblaba incontrolable "Solo una empresa así de grande podía esconderlo..."

"Decírtelo hubiese empeorado todo. Tae no está solo, Kook. No vino solo"

"No iba a hacer nada malo. Yo no iba..."

"Tranquilo. Ahora que no se oculta tenemos tiempo. Lo haremos bien"

Y le creyó. Y se dejó arrastrar hasta la casa, hasta su cama. Aún con las imágenes del castaño en su retina, pensando en lo cerca que habían estado y en lo lejos que lo había sentido. Una pastilla antes de dormir. Una necesaria.

Al despertar todo su cuerpo era un solo dolor. Y moría de sed. La tensión se había acumulado sobre sus hombros, en su cuello, en cada rincón de su espalda. Pero al levantarse descubrió que a sus piernas no le habían ido mejor. El hombre a su lado se movía entre sueños, desnudo y fuera de toda culpa. Después de lavarse los dientes y tomar un litro de agua se sentó a mirar lo que los medios y el resto de Corea tenían para decir sobre él.

"Sorprendente reaparición de ex miembro de bts"

"Luego del escándalo, regresa el hijo pródigo"

"La gran sorpresa de la noche y un kim Taehyung que puso el mundo a sus pies"

¿Había valido la pena todo el sufrimiento? ¿Lo valían esos titulares pomposos? No, desde luego que no. Esos mismos que ahora lo llenaban de laureles antes lo habían descuartizado y arrojado al mar. Así que le importaba una mierda. Seguían siendo la misma basura y como la basura que eran, al pasar, mencionaban la ausencia del fotógrafo amante y su posible ruptura. Si supieran con quién dormía ahora... sonrió levemente. Sí, mientras él existiera los medios amarillistas comerían bien.

Por suerte a parte del circo y los rumores, existía la música, y el escenario. Ahí había hablado en su idioma y había dejado un mensaje: libre.

Revisó su actuación y en algún punto casi desconocía al hombre seguro y arrogante que lo miraba a través de la pantalla.

¿Y ahora? Ahora ya no tenía mucho tiempo para volver a su piel en su propio país. Lo habían planificado milimétricamente. Un pasaje directo a Estados Unidos y una gira promocional que duraría mucho tiempo. El suficiente como para devolverle la moneda de desprecio a sus compatriotas. Mañana por la tarde un vuelo lo llevaría a suelo neoyorquino, visitaría tres estados, diez ciudades y continuaría hacia Sudamérica.

Refregó sus ojos cansados. Abajo de las notas que lo tenían como centro aparecían ellos. Lucían hermosos. Indiferentes al dolor. El nuevo integrante era la misma perfección. Nada humano ahí. Demasiada luz. Apagó la pantalla. No necesitaba eso. Tenía poco tiempo.

¿A quién llamaría? ¿Quién le daría la bienvenida a ese nuevo Taehyung sin cuestionarlo ni recriminarle su ausencia o su perversión? Porque subirse a ese tren que había partido hacía tanto significaba no entender el viaje de ninguno de los que había continuado sin él.

Marcó el número y esperó.

"Estuviste espectacular. No lo podía creer. Fue una locura"

Bogum gesticulaba inquieto. La luz del mediodía se detenía amable en su rostro. No había cambiado en absoluto. Y es que no era cierto lo que sentía, no habían transcurrido milenios, solo un puñado de meses. Le sonrió agradecido. No esperaba que alguien tan demandado y con una agenda enloquecedora atendiera a su pedido y en un par de horas hubiera arreglado una cita en un café. El segundo piso estaba reservado a las personas "importantes" y los inmensos sillones impedían miradas indiscretas.

"¿Estuviste todo este tiempo en Corea?"

"No. Hui primero a Japón"

Allá había quedado su familia. Las primeras semanas habían sido desoladoras. Siempre con la mirada en el piso. Arrastrando el alma como en un purgatorio. Si al menos la herida hubiera sido solo para él. Eon Jin y Jeong Gyu tuvieron que abandonar escuelas y amigos. Su padre había pedido traslado en el trabajo. Por su culpa. Desde la muerte de sus abuelos no recordaba días peores. Pero le ahorraría a su amigo toda esa historia. Le preguntó por la miniserie en la que estaba participando, dejó de oírlo ni bien empezó. ¿Esa sensación de extrañeza se iría algún día?

"Tú has cambiado Taetae"

"Tuve que..."

Ya no era el ingenuo que creía en la bondad y salía repartir pedacitos de su corazón como quien reparte dulces. Ahora la acidez de su mente era algo continuo, le perforaba la cabeza. No más fe en la humanidad.

"¿Vas a quedarte o...?"

"No. Mañana me voy a Nueva York.
Gira de promoción"

"Amé el tema"

De pronto ya no quería estar en ese lugar, revisitando amigos que no sabían en qué se había convertido. Tenía ganas de llorar.

"¿Cómo está tu padre? "

Bogum adoraba a su padre. ¿Cómo no hacerlo? Era toda fuerza, toda luz. Era quién lo había levantado desde el fondo. Recordaba el día en que le había pedido que lo acompañara a comprarse ropa y él se había negado. Para ese entonces había olvidado los colores del día. '¿Por qué no?' 'No quiero avergonzarte papá' '¿por qué lo harías? Si alguien se atreviera a decirte algo, ¿sabes qué le diría? Le diría que mi hijo ha ganado más premios que ningún asiático en la historia. Le diría que mi hijo es tan bueno que no hay nada en él que este mal. Y después lo mandaría al diablo. Lo único que me avergonzaría es ver a mi hijo con vergüenza de lo que es. Así que levántate Kim Taehyung" y eso hizo. Se levantó. Pero tampoco podía contarle todo eso. Simplemente le dijo que estaba bien y miró la hora impaciente.

"¿Pudiste hablar con ellos?

Por un segundo no logró entender la pregunta. ¿Ellos eran ellos?

"¿Por qué lo haría?"

"Te estuvieron buscando Taetae, todos estuvimos buscándote. Tengo miles de mensajes y audios de Jungkook. ¿Pudiste escuchar el tema de Agust D?

No sabía cómo responder sin la verdad esa vez. La indignación que le provocaban sus palabras. Bogum no sabe, se decía así mismo, no sabe, si no se lo dices, no podrá saber. Así que tragó duro y dejó que su voz rota le contara.

"Cuando pasó lo que pasó, yo busqué a Jungkook, Bogum. Lo busqué porque era mi puerto seguro. Era la persona que hubiese buscando en el fin del mundo para tener esperanzas. Pero yo, para él, era un maldito enfermo que lo había arruinado todo." Se tragó las lágrimas porque ya no las necesitaba "la última reunión que tuve con Bang PD me dejó claro que me había convertido en el problema a solucionar. Que nunca me pedirían a la cara que me fuera, pero era lo que el grupo necesitaba. Eso me dijo. Toma la decisión difícil por todos Taehyung, es tu responsabilidad, los chicos jamás podrían hacerlo, aunque lo deseen. Y, una parte de mi no quiso creerlo, ¿sabes? Por eso esperé, seis días. Uno por cada miembro. Pero ninguno me llamó. Así que ahora es tarde para reencuentros. Yo, ya no soy ese Taehyung "

La cara de Bogum se había contraído, entre la confusión, el dolor y el miedo. Pudo comprender todas esas emociones cuando se dio vuelta y lo vio. Se sintió doblemente traicionado y comenzó a llorar.

Taehyung leave BTS [Completa]♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora