La palabra dolor

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"El único milagro que podemos hacer será seguir viviendo, defender la fragilidad de la vida día a día".



– José Saramago



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Dos meses. Dos. 60 días de invierno. Entrando a ese hospital. Saliendo de ese hospital. Hundiendo las uñas en el colchón. Sobre todo cuando soñaba con Tae. Si no se despertaba con una erección lo hacía llorando.

Pocos amigos estaban dispuestos a soportarlo.

Tenía un humor terrible.

Respondía mal.

Buscaba excusas de cualquier tipo para no salir.



La última vez que lo había besado se sintió el pequeño Kookie de 15 años, abrumado por la cercanía de su hyung. Insignificante a su lado.


En un rincón de su cabeza, él pensaba que había acelerado su propio crecimiento para ser visto. Que los ejercicios y los cuidados de su cuerpo eran para estar a la altura de quien era dos años mayor y mil veces más hermoso que cualquiera.

Tan hermoso como una aurora boreal.

Nadie posee una aurora boreal, simplemente te quedas boquiabierto mirándola, adorando la forma en que se mueve.

Das gracias por cada noche que puedes verla.


No puedes ser dueño de una aurora boreal.

Jungkook también creía haber transformado su personalidad en algo más vistoso solo para que Tae no dejara de mirarlo.

Era una criatura insegura y retraída anhelando el amor de una criatura radiante. Lejana. Ambigua.

Recordaba el día, la hora y las circunstancias. Fue un miércoles, de madrugada. Se había despertado gritando. Las pesadillas habían vuelto. Le costaba respirar cuando pasaba. Taehyung a su lado le acariciaba el pelo y le decía tranquilo, fue solo un sueño. Pero entonces recordaba que Jimin agonizaba en un hospital y Tae había armado sus valijas y era peor. La realidad.

No volverían. Ni uno ni el otro.

Como en una regresión, de pronto era el maknae en el cuerpo de un hombre. Temblaba. No habría después para los dos aunque Tae dijera lo contrario. Esa boca no se abriría sobre la suya para darle consuelo.

¡Ah! labios absurdamente hermosos que se movían lentos, como sabiendo la verdad que negaba. Los ruidos que hacían las bocas al separarse eran lo único palpable. Todo estaba oscuro y silencioso y dormido a su alrededor.

"Voy a prender la luz" su voz ronca era erotismo puro y él preguntó por qué

"Quiero verte"

Parpadeó un poco ante la intromisión de la lámpara, aunque era una iluminación pobre.


Taehyung había cambiado su color de pelo otra vez a negro y nunca sabría con exactitud con cuál color le gustaba más. Él era un color que cambiaba.

"¿Estás mejor?"


"Sí, pero por favor, no te detengas"


"¿Qué quieres dongsaeng?"


"A ti"

Pero allí había empezado. El principio del fin.

"Luces tan cansado Kookie y en dos horas nos tenemos que levantar"

Así fue como volvió a la niñez.

Taehyung le dijo que debía dormir. Se negó a una última vez. 15 días atrás ese hombre habría tenido relaciones en las peores circunstancias. Y ese miércoles lo mandó a acostarse, sin la necesidad que le quemaba a él.

Subió a un avión directo a Estados Unidos. En una semana volvería, prometió.

Dos meses después Jungkook era un tipo vencido.


Algunas semanas, cuando a las autoridades se les antojaba, podían hacer llamadas telefónicas desde una línea fija. Él nunca había querido hablar con nadie.

A veces le decían cosas para herirlo. O lo golpeaban mientras dormía. Una vez lo dejaron toda la noche en uno de los baños. Durmió enrollado sobre sí en la frialdad de las baldosas. No sabía si a los otros los castigaban igual. Presentía que su falta de reacción los alentaba a seguir.

Hacía mucho frío para la ropa que llevaban y se preguntaba si acaso morir de pulmonía era una opción.


Miraba el teléfono. ¿Había olvidado cómo hablar? ¿Se podía olvidar del lenguaje y crear uno donde la palabra dolor no existiera?

La sangre de Jimin estaba en sus manos.

No quería hablar con nadie. Solo con él.

No dejaría que nadie lo abrazara. Se quedaría toda la puta vida esperando el calor de su afecto.

Pero si moría, ahora tenía un arma.

Iría a buscarlo.

Marcó. Espero sin saber usar sus cuerdas vocales, él que antes era un rapero, en otra vida.

"Hola"

No pudo.

"¿Hola?"

Cortara si no hablas. Gruñó a cambio.

"¿Yoongi hyung?

Volvió a gruñir.

"Hoy le sacaron el respirador"


Taehyung leave BTS [Completa]♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora