Otro hombre

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¡Me encanta dedicar capítulos! Este es para AnaliaMin, quien siempre tiene un comentario hermoso que brindar y nunca deja de recomendar la historia💜

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Su mamá le decía que estaba bien, que ya no le dolían tanto los huesos de las manos. Había sido por esa tormenta, estaba segura. Sí, era por eso.

Tenían una relación amor/odio que se intensificaba con el correr de las etapas. Rose había destruido sus manos lavando pisos ajenos estrujando trapos cosiendo ropa a sus vecinos cosiendo las suyas para que duraran otro año tejiendo para no pasar tanto frío. Amaba a esa madre.

Odiaba a la que nunca le hablaba de los García ni de los Gómez que habían quedado en Allende y Monterrey. La que nunca mencionaba a Pablito, comido por los buitres. La que se negaba a hablarle en español.

Amaba a la mujer que todas las noches rezaba, para que durmiera bien, un rosario completo y lo bendecía en cada despedida.

Odiaba a la que preferiría arder en el infierno antes que aceptar que su hijo era un puto incurable el cual no le daría nietos ni tendría una profesión respetable de traje y corbata.

A ella le respondía cuando escuchó los primeros quejidos. Detuvo el movimiento de sus dedos. Parpadeó un par de veces. Sí, era Jungkook. Por un momento pensó que estaba otra vez ahogándose en lágrimas. Pero no. Era claro ahora. Bajó el aparato. Había algo en la forma en que los sonidos salían estrangulados, que no dejaba de confundirlo. Jungkook estaba tratando de reprimirse, pero se desbordaba por las grietas de su garganta.

"¿Lo escuchas?"

Jack, acostado su lado, iluminado por la pantalla del teléfono, lo miró de refilón.

"No es difícil hacerlo"

"Suena diferente ¿No crees?"

"Felicitaciones"

"¿Qué? No estoy jodiendo. Suena distinto. Escucha. No estás prestando atención"

"Dije felicitaciones, pervertido. Acabas de descubrir la diferencia entre tener sexo y hacer el amor"

"Puto cabrón"

Jack era odioso. ¡Querer darle cátedra, justo él, que nunca había tenido ni una sola relación formal o estable! Coger con amigos no contaba.

Con un bufido, dejando así en claro su opinión al respecto, pateó las sábanas y salió en busca de agua. Quizás un cigarrillo estaría bien. Llevaba un día entero sin fumar.

Por el pasillo el entrecortado respirar y gemir de JK le llegaban con demasiada nitidez. Era obvio, por su silencio, en qué lugar estaba Taehyung.
Se detuvo. Sus pies descalzos sobre la alfombra eran inaudibles.

Pensó en esos sucios placeres que persistían desde su adolescencia y lo avergonzaban, cuando se acercó a la puerta, maravillosamente entreabierta.

No eran muchos. Pero rozaban en la ilegalidad. Un amigo que trabajaba en seguridad le vendía videos de plazas y parques donde la gente se acoplaba sin vergüenza, como perros en celo en la semioscuridad. A veces eran pasillos de hospitales. Incluso de Universidades. Cuerpos normales edades variadas gay lesbianas heteros prostitutas trans amas de casas policías vagabundos buscando apagar un incendio peligroso, sin importarles dónde o con quién.

No era un comportamiento moral o normal. El suyo. Pero el voyeurismo había sido una constante creciente en su vida. Un placer culposo y tiránico que lo obligaba a empujar la puerta ¿qué mierda estaba haciendo? Y sin embargo sus pasos fueron uno y dos y ya estaba adentro.

Taehyung leave BTS [Completa]♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora