Matémonos || Rauw Alejandro (Completa)

Diez

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- Pensé que me habías dicho de que te daba vergüenza meterte en ropa interior a la piscina...—dice mirándome de pies a cabeza—

- Si —me reí y entre de un chapuzón a la piscina— pero cambie de opinión...

Se ríe.

- Venté baby, el agua está en el mejor ambiente...—dije salpicándole agua—

- Bueno...—de un solo movimiento se quita los pantalones cortos y salta al agua—

- Casi caes encima mía...—dije riendo—

- Esa era la idea...—me guiña el ojo—

- Idiota...—le salpique agua—

Desde ese momento empezamos a jugar, hasta que el me persiguió nadando por toda la piscina hasta agarrarme y llevarme en su brazo, salir de la piscina y tirarse a la piscina de nuevo, conmigo en el brazo.

- Casi me ahogo...—dije separándome de él, y saliendo a la superficie—

- Haha —se ríe—

Lo mire y nos empezamos a reír.

- Ven —se acerca a mi— un abrazo, dame el amor que me hace falta...—extiende sus brazos—

Me reí y lo abracé, después levanté mi mirada, y nos empezamos a besar...

- Ahora si no te escapas...—agarra mis muslos fuerte para que entrelacé mis piernas en su cintura...

- No importa, no me escaparé, ya era hora de que hagamos algo...—me reí y se sorprendió—

- Ah bueno, pues entonces....—me agarra con fuerza y salió de la piscina cargándome—

Lo volví a mirar y volvimos a enganchar ambos nuestros labios otra vez, me dio una nalgada, y pasito a pasito, termine tumbada en la cama de su habitación...

- Qué rápido llegamos...—dije mirándolo mientras el se ponía sobre mi, y empezaba a darme besos por el cuello...

- Cuando tengo ganas de algo y me gusta, no pierdo el tiempo nunca...—vuelve a besarme el cuello, a pasar suavemente sus labios y dejarme pequeñas marcas..

Mordí mi labio y solté un pequeño gemido, el cual, le causó una pequeña ereccion que iba creciendo y yo sintiéndola en medio de mis piernas...

- Dios mío Raúl, follame de una vez...—gemí en el lóbulo de su oído al sentir como pasó su lengua mojada por mis pechos, se sentía tan rico..

- Cumpliré tus deseos...—aprieta mis pechos y gime diciendo—- Porque yo también quiero comerte...

Nos miramos, y suavemente sentí como su mano iba caminando por mi abdomen, hasta llegar a la tela superior de mi pantie, mi ropa interior..

Le rogué con la mirada, sonrió malvadamente, y su mano atrevida empezó a tocar mi clitoris circularmente, haciéndome arquear una y otra vez mi espalda..

- Oh Dios! —gemí—

Lo volví a mirar directamente a los ojos mientras gemía, y por su mirada pude saber de que le encantaba verme sufrir, le volvían loco mis gemidos cada vez que entraba un dedo en mi intimidad y lo empezaba a mover rápido...

Apreté las sábanas, y el dejo de tocarme, lo mire nuevamente y sus besos fueron directamente a mi sexualidad..

Me volvió a mirar sonriendo mientras se concentraba en mi entrepierna, hasta sentir su lengua moverse rápido por mi clitoris, mordió mis labios vaginales y con su lengua los mojo...

En solo unos segundos mis hormonas y las mariposas en el estomago se dispararon, gemí con fuerza, y agarre unas de sus trenzas, jugué con ellas y apreté su cabeza contra mi sexualidad...

Ahogándolo con mis piernas cuando las puse en sus hombros y me apegué mas a su rostro...

- Ahhh...ahh....—gemí como una zorra en celo, volví a agarrar sus trenzas y las apreté, cerré mis ojos, y sentí como mis líquidos vaginales salían disparados, mientras que Raul aún seguía haciéndome
un oral...

Saqué mis piernas de sus hombros, sentí como escupió fuerte y me tocó por última vez, al verlo salir de en medio de mis piernas, lo mire, estaba completamente rojo...

- ¿Te...te la pasaste bien aquí arriba, no? —dice riéndose y poniéndose sobre mi..—

- Papi si —mordí mi labios— haces un oral inexplicable, parece que tienes una metralleta en vez de una lengua...

- Pues espero que no te olvides nunca, porque ahora llego mi turno de disfrutar...—noté como rápidamente se quito el bóxer y se puso un preservativo...

Lo mire, volvió a sonreír y de un solo movimiento entró en mi interior, me hizo gritar del dolor. Empezó el vaivén y clavé mis uñas en su espalda mientras me bombardeaba con fuerza...

- ahh, ahhh....ahhh...—gemí—

Mis gemidos eran los únicos que se escuchaban en toda la casa entera, y Raúl me callaba a besos...

Sentir sus labios carnosos y su lengua por el interior de mi boca, era una sensación única e inexplicable.

- ahh, si! que rico...que rico...—gemí de nuevo—

Mordió mi cuello y apretó mis pezones. Y cuando sentí que me iba a venir, agarre más fuerte su espalda y e hice más de una marca con mis uñas en su espalda...

- Si, si...—gemí—

En esos momentos noté como empezó a moverse cada vez más lento, bajando sus movimientos, hasta escucharlo gemir a la misma vez que yo, y caer agotado sobre mis pechos....

- ¡oh!

Suspire y trate de normalizar mi respiración, hasta que se quito de encima, y cerré los ojos, estaba completamente sudada y cansada...

- No me arrepiento de nada....—escuche su susurro mientras sigue viendo mi cuerpo
desnudo—

- Yo tampoco...—lo mire—

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