LAGRIMAS

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Dejo a Forth dormido y saldo de la habitación sostenido mi bolsa de mano, estoy agotado tan pronto llegue, solo deje mi equipaje en el hotel y Salí directo hacia aquí, masajeo mi cuello mientras camino por los pasillos, sonrió a algunas personas que se cruzan en mi camino, debo hablar con Namcha y con Ming para organizarnos y ver cómo hacemos para que ese terco acepte el trasplante, antes de poder llegar al ascensor veo a Phana hablando con algunas enfermeras y colegas médicos, me detengo para esperar a mi amigo quien me mira pero continua con sus cosas, espero unos minutos hasta que lo veo caminar hacia mí.

— Phan....—

— Si piensas irte por lo menos despídete de Forth y no lo dejes como siempre lo haces— mis palabras son cortadas de manera abrupta por el castaño.

— No pienso irme a ningún lado— hablo molesto.

— No tienes derecho a enojarte Beam, todo lo que te han dicho y más mereces por ser alguien tan egoísta como eres— dice enfrentándome.

— No pienso pelear contigo Phana— hablo dando un paso hacia el lado— debo irme— digo iniciando mi caminata dolido por sus palabras aunque sé que las merezco.

— Ten en cuenta estas palabras— dice haciéndome detener— vuelve a lastimarlo y no descansare hasta encontrarte y romperte las putas piernas por desgraciado— tenso mi mandíbula para no responder a su amenaza.



Continuo mi camino, no deseo encontrarme con nadie más que me recrimine y me señale, yo igual he sido una víctima de todo esto, todos me señalan y creen que estar lejos ha sido fácil que me fui y seguí con mi vida sin ver atrás, nadie sabe cuántas lágrimas, noches en vela, cuantas horas llorando en la ducha he pasado, nadie sabe los padecimientos que he sufrido, todos se dedican a señalar y culpar sin pensar en lo que yo igual he pasado, alejarme de Forth ha sido la casa más dolorosa que he podido hacer en mi vida, me detengo al llegar al estacionamiento, busco con la mirada el auto rentado, dejo mis cosas en el asiento del copiloto antes de subir en él y salir lo más rápido posible del hospital.

— ¿Estás bien?— levanto la mirada al escuchar la voz de mi madre, cundo me dijo que estaría en el hotel no pensé que fuera cierto— no te vez muy bien— dice acercándose.

— No es nada para lo que no estaba preparado— digo mientras caminamos hacia la suite.

— ¿Ya le dijiste?— pregunta al abrir la puerta.

— No le preguntare eso hasta que esté bien y esté en condiciones de responder sin el peso de ninguna situación— respondo dejando mis cosas sobre una pequeña mesa de centro.

— Lo que hiciste lo hiciste pensando que era lo mejor para todos, no te sientas culpable ni permitas que otros te culpen— dice haciendo que detenga mis movimientos y dejando salir mis lágrimas.

— Fui egoísta y solo pensé en mi mamá, si solo hubiera esperado un poco más podría haber estado con Forth todo este tiempo— me quejo— si no fuera como soy nada de esto estuviera pasando, mis amigos no estarían enojados, Forth no se habría lastimado de esa manera por mi abandono y tu podrías haber sido feliz completamente pero no, decidí irme porque era lo que según mas convenía pero.... ¿A quién le convenía más?— pregunto girando para verla— soy un asco de persona— me dejo caer sentado en uno de los sillones.

POSITIVOS FORTH BEAMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora