152 días. › 𝗞𝗶𝗺 𝗦𝗲𝗼𝗸𝗷𝗶𝗻.

Día 5.

—Tranquila, todos odiamos la quimioterapia. —El chico al lado de Minwoo trató de hacer que ella se sintiera mejor, pero Minwoo no pudo evitar sentirse triste al ver que quien lo decía era un chico que lucía menor que ella. —Eres nueva, ¿Cierto?
—Preguntó al ver que ella no tenía palabras.

Minwoo asintió y sonrió tímidamente: —Soy Minwoo.

—Jungkook. —Respondió sonriente quien comenzó la conversación. —Veo que el doctor Namjoon es quien te trata, es realmente agradable. —Sonrió mirando al doctor salir de la sala de la que Minwoo también salió, minutos antes.

—Creo que ha notado que soy un poco tímida. —Rió avergonzada.

—Todos lo somos al principio; yo no hablé con nadie hasta dos meses después de estar aquí. —Dos meses, ¿El realmente dijo dos meses? Minwoo no quería preguntar hace cuánto fueron esos dos meses, pues creía que solo se llenaría de más desilusión al saber que no es la única con pocas posibilidades de vivir. —Pero Taehyung se encargó en hacer que me integrara, él es la felicidad de este lugar. —Las palabras de Jungkook seguían sonando por lo que Minwoo no pudo pensar durante mucho tiempo.

—Taehyung realmente se ve como la alegría de este lugar. —Confirmó Minwoo y Jungkook sonrió.

—Bueno, creo que es mi turno. —Dijo Jungkook mirando que una mujer le llamaba para entrar a la sala. Minwoo sonrió y se levantó para también retirarse, pero se sintió tan confundida al ver que Jungkook jamás se levantó, pero sin embargo se dirigió a la sala de quimioterapias. —Cuidate, Min. —Se despidió Jungkook cuidando que su silla de ruedas entrara con cuidado.

En menos de una semana, Minwoo ya había conocido a bastantes personas como para desear salir de ahí de inmediato y regresar a su vida normal, pero ahora ésta, comenzaría a ser su vida normal.

—Veo que conociste a Jungkook, es lindo ¿No? —Taehyung con la misma sonrisa de siempre acompañó a Minwoo hasta su nueva habitación, aún si solo era una pequeña pieza. Taehyung al ver que Minwoo se recostó en la camilla como los últimos días, se sintió lleno de melancolía. —¿Estás bien, Minwoo?

Minwoo no habló pero sus ojos si lo hacían al derramar lágrimas. Taehyung la abrazó y trató de consolar el dolor que su corazón sentía.

—Sé que no es fácil, pero debes luchar.

—No vale la pena luchar, Tae. Estoy completamente conciente de que tengo el tiempo contado, no veo sentido al tener que quedarme aquí y recibir tratamientos que solo me debilitan. —Taehyung jamás dejó de abrazar a Minwoo por lo que sentía como sus lágrimas mojaban su uniforme paulatinamente.

—Si tiene sentido, Woo. —Habló Taehyung haciendo que Minwoo le mirara a los ojos.n—Jungkook también tenía el tiempo contado, y así como tú, él también decía que no tenía sentido recibir tratamientos, pues él moriría. —Minwoo limpió sus lágrimas y siguió escuchando las palabras de aliento que Taehyung le daba. —Todos creíamos que moriría 10 meses después de haber llegado pero, el domingo de la próxima semana cumplirá su segundo año aquí. Y aún si el cáncer no se ha ido, Jungkook ha obtenido mucha fuerza para seguir adelante. Minwoo, si el cancer no se va, al menos lucha lo suficiente para que no termine contigo con facilidad.

Minwoo dejó que las largas manos de Taehyung limpiaran el resto de lágrimas que su rostro guardaba y después recibió una sonrisa del enfermero que hasta ahora no la ha dejado sola ni un solo día.
Taehyung se levantó y comenzó a caminar hacia el pasillo para continuar con sus labores.

—¿Te veo a la hora de la comida? Hablé con las cocineras y me dijeron que hoy habrá gelatina de limón de postre. —Minwoo sonrió débilmente y asintió ante las palabras del chico de alegres ojos. Taehyung salió y caminó hasta encontrar a alguien más a quien alegrar.