❛❛ ¡Yo nunca decidí entrar, leer su expediente y enamorarme de ella! ❞
Tienes 152 días para conocer, amar y despedir a una persona.
Un doctor, dedicado y admirado, se ve con más cargas de las que su vida diaria le suministra.
Y son cargas...
Conforme veo las cosas, creo que ésto será una despedida.Aún si no quiero que sea así. Y aunque todos traten de alentarme a seguir luchando, la verdad es que no puedo; y quizá, tampoco quiero. Estoy muriendo y eso ya no puedo detenerlo.
Traté de vivir una buena vida, y con buena me refiero a todos los sentidos; comía sano, hacia ejercicio, siempre fuí buena en mis estudios. Y, aunque no siempre estaba convencida sobre su existencia, también hablaba con Dios.
No creo que merezca cargar con una enfermedad tan destructiva como es el cáncer; pero aquí estoy, conectada a una máquina que me ayuda a seguir respirando, ya que mis pulmones no son lo suficientemente capaces de hacerlo solos.
Tú estás ahí, dormido en las bancas que están en la sala de espera, en horas fuera de turno; porque no te ha sido suficiente el tiempo que me haz visto. Para mí tampoco lo ha sido.
82 días jamás son ni serán suficientes. Pero no tengo otra opción, no puedo pedir más de lo que se me ha dado.
Seokjin, no sé si hoy es mi último día, o uno más de los pocos que me quedan; pero lo que si sé es, que jamás me había sentido tan enamorada desde que te vi sonreír por primera vez.
No tengo miedo de morir, pero si tengo miedo de irme sin poder abrazarte una última vez. O, de escucharte pronunciar mi nombre con una sonrisa de acompañamiento.
Seokjin, tengo tanto miedo de decirte adiós, que prefiero terminar ésto pidiéndote que cuando despiertes lo primero que hagas sea recordar que no me fuí porque fuera mi descisión. Pero, si aún sigo aquí, recuerda que prometo amar los días a tu lado, como si fueran los primeros y no los últimos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
