Día 6.

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—Supongo que es tu primera vez comiendo sin Taehyung. —Hablaron frente de Minwoo quien sólo veía su comida; al escuchar la voz que le hablaba, Minwoo levantó la mirada y se topó con los ojos más bonitos que jamás había visto. —¿Puedo sentarme? —Preguntó el dueño de los preciosos ojos.

Minwoo asentó con la cabeza, pues parecía que sus labios se habían sellado. El doctor sonrió y tomó asiento, después tomó sus palillos y comenzó a comer en silencio.
Minwoo siguió mirando su comida, solo que ahora tenía en mente que debía decir para no parecer antipática ante el apuesto doctor.

—Taehyung terminó su turno bastante tarde, sus compañeras no dejaron que llegara tan temprano, así que, vendrá en el turno nocturno. —Minwoo sonrió levemente con los labios, pero no dijo nada, de nuevo. El doctor limpió sus labios y miró por un segundo a la paciente que tenía frente a él. —¿Te sientes mejor? —Preguntó después de tratar de contar las pecas que Minwoo tenía en el rostro.

—S-si. —Respondió respirando levemente. —El doctor Namjoon cuida bastante de mí, por lo que no dejó que mi dolor aumentara.

—Es agradable escuchar eso. Parece que te acostumbras a vivir un millón de tragedias al trabajar en un hospital, pero cuando una nueva llega a suceder, te das cuenta de que jamás dejaremos de preocuparnos por quienes están enfermos. El doctor Namjoon cuida bastante bien de sus pacientes, por lo que estoy seguro de que te sentirás mejor que ahora.

—¿Conoce al doctor? —Preguntó mirando como el doctor frente a ella bebía de su vaso.

—Más de lo que yo o él desearíamos. —Rió limpiando sus labios de nuevo. Minwoo frunció levemente el ceño, y entonces el doctor de nuevo rió. —Es mi hermano menor. Solo nos separan dos años, pero cuando éramos niños, él se comportaba más como un hermano mayor.

Minwoo se mostró sorprendía al saber que quien le atendía era hermano de quién le atraía.
El doctor le sonrió al ver que ella no sabía que decir con exactitud.

—Wow, jamás había sido tan descortés. —Habló de un momento a otro, golpeando levemente su frente. —Doctor Kim Seokjin. —Se presentó extendiendo su mano a la pálida chica frente a él.

—Ahn Minwoo. —Respondió tomando delicadamente la mano del doctor.

—Bueno, Minwoo, fue agradable conversar contigo. Me gustaría quedarme más tiempo, pero no creo que el paciente pueda esperar más. —El doctor Seokjin se levantó y después de sonreírle a Minwoo y esperar a que ésta le sonriera también, se fue. Minwoo miró el caminar  relajado pero elegante del doctor, y hasta que éste desapareciera de su vista, Minwoo regresó a su comida.
Jungkook llegó minutos después con su charola en sus piernas y se situó junto a Minwoo, quien parecía tener pocas ganas de comer al menos un bocado.

—Min, deberías comer; después de lo que te sucedió ayer, no creo que sea buena idea no comer.
—Minwoo escuchó las palabras de Jungkook, y escuchó al doctor Namjoon decirle lo mismo en su mente. La rubia artificial, comió un pequeño bocado de su plato y miró a Jungkook, quien con una mueca le sonrió. —Cuando llegué, ví que hablabas con Kim Seokjin. —Jungkook miró a Minwoo con una sonrisa un tanto pícara y esperó a que la que estaba a su lado, le respondiera.

Minwoo al escuchar la informalidad en la que Jungkook hablaba del doctor, lo miró con los ojos lo más abiertos que éstos le permitían estar: —Sí, el doctor llegó a preguntar cómo estaba. —Dijo después de remarcar la palabra “doctor”. Jungkook asintió y siguió comiendo, sin ninguna pena. Minwoo no terminó de comer, pero Jungkook sí, por lo que la rubia insistió en salir del comedor ya, pues no terminaría su comida jamás; Jungkook con reproche aceptó y dejó que la de pecas en el rostro, lo llevara hasta el ascensor. Ambos ingresaron al ascensor y esperaron a que éste cerrara y subiera hasta su piso, una vez llegando a su piso, Jungkook fue llamado por su doctor y el castaño rodó hasta el hombre y dejó a Minwoo ir a su cuarto.

Minwoo fue a su cuarto y recostó su cuerpo en su camilla, miró al techo y pensó cuánto tiempo pasaría para que su desgracia desapareciera. ¿O es que jamás desaparecería?
La mañana terminó y la tarde llegó, así como Taehyung con una sonrisa linda y feliz; todos en el piso al momento de verlo llegar, lo recibieron con una sonrisa también.
Minwoo, caminó hasta el castaño claro y él al verla, corrió hasta ella y la abrazó con la fuerza más débil que su cariño podía tener.

—Woo, me alegra tanto verte de pie. —Sonrió Taehyung al mirarla a sus ojos, Minwoo sonrió con los labios y agradeció la preocupación que Taehyung tenía por ella y por su bienestar. —¿Comiste? El doctor dijo que debías comer para evitar recaer tan mal como ayer. —La rubia de pecas en su rostro, asintió rápidamente y miró hacia otro lado para que Taehyung no viera la mentira en sus ojos; Taehyung sonrió y caminó al mostrador para comenzar su trabajo.
Minwoo caminó de regreso a su cuarto y como el doctor Namjoon le dijo, durmió para recuperar fuerzas.

El doctor Kim Seokjin terminó su trabajo y al caminar por el pasillo que daba a la salida, se detuvo al mirar a Taehyung hablar con el guardia de seguridad.
El de cabello negro, se acercó a Taehyung y esperó a que el castaño terminara su conversación con el hombre encargado de la seguridad en el lugar:
—Hola, niño. —Lo saludó al momento el que Taehyung giró sus talones. Taehyung sonrió y saludó con sus ojos sonrientes. —Hmm, ¿Puedo hacerte una pregunta?

—Ya la hizo. —Respondió Taehyung. El doctor rió y negó con la cabeza: —Bueno, dos. ¿Ahn Minwoo recibe quimioterapias con Namjoon?

Taehyung extrañado por la pregunta, asintió y preguntó el porque el interés en Minwoo y sus tratamientos.
El doctor Seokjin después de las respuestas de Taehyung, negó como si no fueran importantes sus preguntas, pero recordó que faltaba una: ¿Que días las recibe? —Taehyung aún no entendía el porque las preguntas, pero aún así respondió.

—Aún no tiene días en específico, pero el doctor me dijo que la próxima es dentro de una semana. —El doctor agradeció las respuestas de Taehyung y se despidió del enfermero y el guardia que se enteró de la conversación que tuvieron los dos. Taehyung se despidió y miró al doctor caminar a la salida. Cuando el doctor llegó a su auto, subió y sacó su celular, marcando al contacto que encontró hasta llegar a la letra N.

Después de que el contacto respondiera la llamada y que el doctor dijera quien era el que llamaba, comenzó a preguntar: —¿Podría estar presente en alguna de las quimioterapias que tienes programadas?

—Hmm, Jeon Jungkook recibe una mañana a las 5. Puedes llegar cinco minutos antes. —Respondió la voz del otro lado del teléfono, el doctor Seokjin negó con la cabeza y la voz y mintió sobre tener trabajo a esa hora: —¿Que hay de la próxima semana?
—Preguntó de nuevo. La voz del otro lado pensó unos segundos en silencio y respondió minutos después: —La paciente que ayudaste a llevar ayer a mi piso tiene una, aún no sé qué día, pero en cuanto lo programe bien, puedo avisarte. ¿Si?

Seokjin sonrió y asentó: —Gracias, Nam. Te veo después. —Dijo antes de terminar la llamada.

 —Dijo antes de terminar la llamada

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152 días. › 𝗞𝗶𝗺 𝗦𝗲𝗼𝗸𝗷𝗶𝗻.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora