Capítulo 13. No lo intentes

55 5 18
                                    

Estaba recibiendo golpes.

Eran golpes demasiados fuertes, así sentía el agua caer sobre él, sentía que eran golpes. Era normal, su cuerpo estaba demasiado débil debido a que no había comido bien últimamente. Cerró la llave del agua y secó su cuerpo, envolvió su cintura con la toalla y observó su reflejo, las ojeras eran notables, sus mejillas estaban más delgadas, tenía marcas en su abdomen, pecho y tenía el cabello demasiado largo. Se puso unos shorts y de nuevo miro su cabello, decidió enrollar la toalla en su cintura mientras trataba de recordar donde estaba la rasuradora. Estaba por empezar a rapar su cabello cuando tocaron a su puerta, decidió ignorarlo y de nuevo tocaron que tuvo que gritar que en un momento abría. 

Supuso que era Jinhwan, ya que siempre venía a esas horas a su casa o podría ser su mamá que olvidó las llaves. Salió del baño con el torso descubierto como si nada y se acercó a la puerta buscando sus llaves, que justo ahora no sabía dónde estaban.

—Te he dicho que no toques más de una vez el timbre porque...—se sorprendió al ver que Jiwon era el que tocaba y acaba de entrar a su casa, casi de inmediato se tapó el torso con sus brazos como si eso fuera a funcionar. Jiwon solo soltó una risa

—No hay nada que no haya visto antes —mencionó mientras se sentaba en la sala y tenía la mirada fija en él—. Ya vi todas esas cicatrices. ¿Qué te pasó?

—¿Qué haces aquí? —buscó rápido una almohada, no quería que lo viera vulnerable.

—Vine a verte —sonrió triste—.  ¿Qué te pasó? ¿Te hicieron algo? ¿Tú fuiste?

—¿Por qué actúas como si te importara ahora? —Hanbin temblaba, not anto por miedo sino porque empezaba a sentir frío—. ¿Por qué no te importe cuando realmente debía hacerlo? ¿Por qué no te importe cuando te acostabas con alguien más?

—Respondeme —trató de ignorar aquello que dijo, sin embargo le estaba doliendo—. Tú siempre me has importado, aunque no lo creas. 

—No juegues Jiwon —habló con mucha seguridad que realmente se la creyó—. Perdón por no haber sido suficiente para ti.

—Tú siempre has sido suficiente —trató de acercarse pero Hanbin lo alejó de un manotazo—. No me dejas explicarte nada, sé que lo que te diga no justificará nada pero necesito decírtelo para poder dejarte ir.

—¿Qué vas a decirme? —Hanbin se relajó un poco.

—Primero ponte más ropa porque estás temblando —le ordenó y solo asintió, no le hacía caso porque era él, si no porque realmente estaba temblando. Hanbin regresó con una camiseta puesta—. Listo.

—¿Por qué sigues preocupándote por mí? —miro hacia el suelo.

—Porque siempre me preocupare por ti aunque tú no me quieras cerca —pronuncio eso con dolor, le dolía y sabía que le dolía al contrario—. No me gusta verte tan delgado, lleno de ojeras, sé que no te estas alimentando bien y que te la pasas durmiendo.

—He estado comiendo de maravilla y lo del sueño es porque la carrera me cansa —mintió, pero esperaba que Jiwon no lo notara.

—Puedes mentirle a quien quieras, pero a mi no me puedes mentir —Jiwon solo le dedico una sonrisa triste—. Creeme que estoy arrepentido de lo que hice y más cuando te perdí, supe realmente lo que valías cuando te preocupaste por mi aun sabiendo que fui una mierda, no te merezco ni te merecía.

—¿A qué quieres llegar?

—Lo conocí uno de esos días donde sentí que mi pasado me perseguía y salí a un bar. Ahí encontré a ese hombre y se me acercó, comenzamos a platicar de muchas cosas, yo terminé desahogando. Estábamos demasiado ebrios y de repente él me contó que pronto se casaría con una mujer que no amaba. La razón por la que se casaría era porque lo estaban obligando por negocios entre ambas familias.  Eventualmente nos hicimos amigos, me contó que odiaba no tener control de su vida y que ni siquiera pudo escoger que estudiar porque lo obligaron a estudiar lo que su padre quería, me daba mucha pena su vida. 

Touchdown [Chanhwan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora